LIGA MISIONAL JUVENIL

LIGA MISIONAL JUVENIL

“Joven no es suficiente descubrir a Cristo es necesario llevarlo a los demás”

1. NATURALEZA

La Liga Misional Juvenil (LMJ) es un programa de la Obra Pontificia de la Propagación de la Fe (PF) encargada de informar, animar, y promover la cooperación misionera en los jóvenes de toda la República Mexicana.

Al ser parte de la PF y por tanto estar bajo la dirección de las Obras Misionales Pontificio Episcopales de México (OMPE), la LMJ adopta distintos ejes de acción para cumplir con metas muy específicas de las OMPE, entre las cuales destaca el trabajo formativo y espiritual con los jóvenes para entender mejor lo que es ser misionero. Ser enviado a predicar el Evangelio de Cristo.

2. OBJETIVO GENERAL

Sensibilizar a la juventud hacia una respuesta generosa, constante al desafío de la evangelización Ad gentes (es decir, con los que aún no conocen a Cristo) y hacia una organizada animación, cooperación y comunión misioneras de toda la Iglesia, teniendo en cuenta que el Obispo, como sucesor de los apóstoles, es el único que puede realizar este envío misionero de manera formal y en nombre de toda la Iglesia.

3. OBJETIVOS ESPECÍFICOS

.a) Educación para ser evangelizados y evangelizadores sin fronteras (Evangelii Nunciandi 13)

b) Formar líderes como levadura misionera en la comunidad (Documento de Puebla 1190)

c) Promoción y orientación vocacional misioneras Ad Gentes (Redemptoris Missio 83)

d) Conocimiento y compromiso con las OMPE

“Jóvenes: Cristo los envía para cambiar el mundo.” Papa Juan Pablo II

4. MIEMBROS DE LA LMJ

Tu puedes ser parte de la LMJ, si eres un joven católico de 15 a 25 años, soltero, pueden ser ambos sexos, que acepten el compromiso de servicio y entrega a la actividad misionera, trabajando por Cristo y la Iglesia con los objetivos de la LMJ, en forma sincera y fraterna.

5. COMPROMISOS PERSONALES

• Asistir a las reuniones de grupos y cumplir con las responsabilidades asumidas.

• Ser animador misionera de su comunidad.

• Ser misionero (en el hogar, en la parroquia, en la escuela y en el trabajo), dando testimonio de Cristo misionero.

• Hacer oración y hacer sacrificio por los que aún no conocen a Cristo.

• Autofinanciar las actividades propias del grupo.

• Estar

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