Religión

Tema 2.- Mi posición en Cristo

En la palabra de Dios nos enseña que antes de recibir a Jesús en nuestro corazón, éramos hijos del pecado, pero al recibir al Espíritu Santo pasamos a ser hijos de Dios.

Cuando vivíamos en pecado y satisfacíamos los deseos de la carne, esto mantenía lejos de Dios, pero cuando recibimos a Cristo Jesús en nuestro corazón viene a morar en nosotros el Espíritu Santo y pasamos de muerte a vida. La salvación es por fe no por obras para que nadie se gloríe, gracias a Jesucristo que dio su vida por nosotros los pecadores somos salvos y podemos ser llamados hijos de Dios.

Efesios 2: 1-13

Lo que soy en Cristo

1.-Soy nueva criatura: Porque ya no soy prisionero de mi pasado, pues Jesús le ha dado sentido y dirección a mi vida, y ahora soy libre.

(2 Corintios 5:17)

2.- Soy templo del Espíritu Santo: Antiguamente el Espíritu Santo solo se manifestaba cuando él quería anunciar algo de parte de Dios, pero ahora el permanece en mi y puedo tener una comunión con él. Por lo tanto debo apartarme de todo lo malo cuidando mi cuerpo porque ahora le pertenece a Dios.

Antes solo los judíos eran considerados el pueblo de Dios, mas ahora todo mundo puede ser pueblo de Dios sin importar de donde seas.

(1 Corintios 6:19 al20)

3.- Soy sal de la tierra: Porque yo le doy sabor a la tierra al preservar la palabra de Dios.

(Mateo 5: 17 al 18)

4.-Soy la luz del mundo: Porque alumbro a todos los que están en tinieblas y reflejo la luz de Dios al comportarme mejor que un impío y dar ejemplo actuando conforme a la palabra de Dios.

(Mateo 5:14 al 16)

5.- Soy hechura suya: Porque fui creado para hacer buenas obras, porque al tener ahora la naturaleza divina a imagen de Dios, hago buenas obras no para obtener la salvación si no porque soy hechura de Jesús a la imagen de Dios.

(Efesios 2:10)

6.-Soy piedra viva: La iglesia no la conforma un edificio, si no el grupo de hombres, mujeres y niños que han sido salvos por la gracia de Jesús, todos los que hemos sido salvos por su gracia somos esas piedras escogidas, firmes y preciosas que unidas edificamos su iglesia.

(1 Pedro 2:4 al 5)

7.- Soy ministro competente: A través del sacrificio que hizo Jesús y por su sangre Dios hizo un nuevo pacto con nosotros para hacernos ministros competentes “no de letra, sino del espíritu; porque la letra mata, mas el espíritu vivifica”.

Esto quiere decir que me hizo ministro competente para honrarlo con mi comportamiento y no avergonzarlo, dignificar la posición que él me dio.

(2 Corintios 3:6)

8.-Soy linaje escogido: Porque ahora soy parte del pueblo de Dios, para que anuncie las virtudes de Cristo Jesús en mi, para que refleje los frutos del Espíritu Santo que son: amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza.

(1 Pedro 2:9)

9.-Soy hijo de Dios: Al recibir a Cristo Jesús en mi corazón pase de ser creación de Dios a hijo de Dios, pues el Espíritu santa que mora en mi clama “¡Abba, Padre!” el mismos Espíritu Santo muestra la posición que tenemos ahora delante de Dios, por lo tanto ahora soy heredero legitimo, pues al ser hijo recibo este beneficio de heredar todo lo que posee mi padre.

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