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¿Será usted un buen trabajador en la cosecha?


Enviado por   •  16 de Septiembre de 2022  •  Apuntes  •  2.525 Palabras (11 Páginas)  •  2.514 Visitas

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Núm. 66        ¿Será usted un buen trabajador en la cosecha?        Página 

Núm. 66        ¿Será usted un buen trabajador en la cosecha?

NOTA: Motive a los estudiantes de la Biblia que están progresando a participar con entusiasmo en la predicación. Ayúdelos a vencer sus temores. Si lo desea, puede usar las imágenes suministradas para explicar las ideas correspondientes.

Hace unas pocas semanas estaba escuchando por la radio precisamente una encuesta acerca del trabajo, en ella se mencionaba que México ocupa uno de los primeros lugares en donde el trabajador se pasa más horas en su lugar de trabajo, al escuchar esto quizá usted piense que es un gran logro, aquí si somos trabajadores, la otra parte de este reportaje comentaba que aunque se pasan más horas en trabajo igual ocupa unos de los primeros lugares en donde se tienen pocas horas productivas, Imagen 1 es decir quizá un trabajador además de sus 8 horas obligatorias, pase 8 horas en su lugar de trabajo, la mayoría solo trabaja de verdad quizá 6 o 7 hrs, las otras 2 o 1 se la pasa haciendo otras cosas que no tiene nada que ver con su trabajo, redes sociales, conversando, o hasta durmiendo.

Al saber esto, podría decir usted que la persona que trabaja de esta manera, ¿Es un buen trabajador? Difícilmente verdad.

Es fácil llegar a la conclusión de que un buen trabajador, es el que cumple con sus funciones para la cual se le contrato y no pierde tiempo en otras cosas de manera innecesaria.

Ahora bien, hay un trabajo en el cual todos debemos esforzarnos mucho por efectuarlo de la mejor manera,

SE NECESITAN MÁS TRABAJADORES EN LA COSECHA (3 mins.)

Recordemos de que trabajo estamos hablando ahora [lea Mateo 9:35-38] y mientras lo leemos tengamos en cuenta que este trabajo es tan importante debido a que el futuro de la humanidad depende de su resultado.

[imagen 2] Cuando Jesús estuvo en la Tierra, su labor principal fue predicar las buenas noticias del Reino de Dios. Por tres años y medio dedicó su tiempo y energías exclusivamente a esta obra. Entrenó discípulos y los envió a entrenar a otros.

Él comparó la predicación con el trabajo de cosechar y dijo que se necesitaban más trabajadores.

Aunque han pasado casi 2 mil años desde los días de Jesús, hoy aún se necesitan con urgencia muchos buenos trabajadores.

¿Está usted haciendo todo lo que puede en esta labor tan importante, de acuerdo a sus circunstancias?

Recordemos que este trabajo de la cosecha o de la predicación, no es un trabajo seglar que solo se mida por el tiempo que pasemos en él, o por cuantos hemos ayudado a llegar al bautismo,

Por eso durante el tiempo que nos resta nos centraremos en dos puntos importantes.

  1. La razón que nos motiva a dar lo mejor de nosotros para ser buenos trabajadores en la cosecha
  2. Si creemos que algunas cosas como el temor, nuestra personalidad o el poco conocimiento que pensemos tener de la biblia, nos están impidiendo ser buenos trabajadores en la cosecha veremos que nos ayudara a vencer estas cosas.

¿POR QUÉ PREDICAMOS LAS BUENAS NOTICIAS? (10 mins.)

La respuesta en sencilla, Predicamos porque amamos a Jehová, a Jesús y a la gente (Mt 22:37-39).

Sin embargo, ampliemos un poquito más cada razón, para identificar porque cada una de estas nos motiva a ser buenos trabajadores en la cosecha

Analicemos el primer punto el Amamos a Jehová

Mt 6:9 recordemos lo que Jesús nos enseñó en la oración modelo, Deseamos santificar el nombre de Jehová, Santificar algo es hacer que sea santo, limpio o puro. Pero puede que alguien se pregunte: “¿Es que el nombre de Jehová no es santo, limpio y puro en sentido absoluto? ¿Por qué hay que santificarlo? Para entenderlo piense en este momento en su mejor amigo o amiga, y que de repente usted escucha que empiezan a levantar falsas acusaciones en su contra, recuerde están levantando falsos de su mejor amigo a quien usted aprecia muchísimo que haría en ese momento, no es verdad que defenderlo y si tiene pruebas de que lo que se dice es mentira, no es verdad que las mostraríamos (w18.05 18 párr. 4)

Es verdad que no podemos hacer más santo el nombre de Jehová, el amor que sentimos por él nos motiva a buscar oportunidades para hablar sobre sus maravillosas cualidades y de sus fieles promesas, de esta manera defendemos el nombre de Dios de las mentiras y calumnias de Satanás

Pero también al contarles a otros cómo es él y cómo actúa, les ayudamos a comprender que su nombre es especial y santo (Sl 145:7-12).

Hablemos de la segunda razón Amamos a Jesús

En esta ocasión imaginémonos que estamos en una situación muy difícil, por motivos económicos, y ya nos amenazan con embargar o quitar todo lo que tenemos hasta nuestra propia casa, no buscamos la salida a esa situación y de repente un amigo se entera de esta situación, y se ofrece ayudarnos y cubrir por completo la deuda que teníamos. ¿Cómo nos sentiríamos? En primer lugar, muy alívianos, pero también muy agradecidos con este amigo porque nos rescató o salvo de esa situación difícil, ahora si este amigo que nos ayudó nos pidiera algo por él, ¿lo dudaríamos? ¿nos quejaríamos al hacerlo? ¿Lo dejaríamos para después?

el rescate más importante es el que Cristo pagó al dar su vida en sacrificio para liberar del pecado y la muerte a los seres humanos obedientes,

Nunca se podrá comparar a cualquier ayuda que podamos recibir de otro ser humano, sin duda por eso amamos mucho a Jesús.

¿A que nos debe impulsar ese amor que sentimos por él?

lea Mateo 28:19, 20, sus seguidores estar muy emocionados cuando se reunieron en la ladera de una montaña. Jesús les había pedido después de su resurrección que se encontraran con él allí, 

¿Por qué organizó Jesús esta reunión?

Para darles a sus seguidores un emocionante trabajo, Predicar y enseñar

 Y como mencionamos al principio, aunque ya pasaron casi 2 mil años de esto, este mandato también nos implica a nosotros, Por amor obedecemos su mandato de predicar y enseñar, esto no se mide por las horas o quizá por las personas a las que hemos ayudado a llegar al bautismo, si no por nuestra actitud el ministerio, ¿Participo de buena Gana?, no se escribir cartas, no sé cómo llamar, no sé cómo utilizar la tecnología, sabemos que en la congregación ese no es el caso hasta nuestros hermanos mayores se volvieron expertos en usa la tecnología, un cambio quizá salir de casa en casa, sol, caminar, levantarse más tempranos, otra pregunta para reflexionar seria conociendo nuestras circunstancias sin compararnos ¿Doy lo mejor de mí, o solo doy lo que me sobra? No olvidemos que nuestra actitud determinará si nos estamos esforzando por ser buenos trabajadores en la cosecha.

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