Un regalo de Dios

CAPÍTULO

6 • Un regalo de Dios

'¡Oh, no!' dijo Mario, cuando escuchó las palabras de Pedro. 'Los Un cuento fron de! AJ, éxico eran las seis o'dock en la mañana y en su pequeña casa en un pequeño pueblo en México-Mario estaba dormido. Él todavía estaba dormido a las siete, a las ocho, a las nueve, ya las diez o'dock. La mayoría de los días de Mario despertó a eso de eleven..Then su mujer solía ir a la tienda para comprar tortillas y café para el desayuno. Mario era un hombre afortunado, porque Pedro, el tendero, era un buen amigo y nunca le pidió que pagar por su comida. Pero una mañana, Pedro se despertó sintiéndose enojado. "Me levanto a las cinco de la mañana para trabajar," él dijo. 'Pero

roclcs son demasiado pesada para mí de seguir. ¿Cuántas veces tengo que • decir: "Si Dios quiere dar, Él le dará. Y cuando Él da, Él va a empujarlo por la ventana." • Por favor, no más talle de trabajo. ¿Qué pasa con una buena taza de café recién hecho? ' Después de eso, se puso su ropa y salió de la casa. Más tarde esa mañana, Mario fue walldng la colina feliz . mirando las nubes en el cielo. De pronto oyó sh01¿.ts detrás de él, 'Whoal Whoa, therel' Volviéndose, vio que un caballo galopaba cerca y más cerca. Un mapa. estaba montando el caballo y gritando, pero el Dios una importan! siendo que nunca muere y quién decide lo que pasa en el mundo Mario se encuentra en la cama toda la mañana sin hacer nada. Él no trabaja caballo no se detuvo. galope que moverse rápido (de un caballo) una especie de tortilla muy delgada, pan redondo de México alguien comerciante que tiene una tienda el rock una gran cantera de piedra un lugar donde se obtiene

rocas del suelo y yo doy comida hin1free. Eso es enoughl Si quiere más comida gratis, que tendrá que hacer el trabajo de forma para Sorne. ' Más tarde esa mañana, la esposa de Mario wallced en la tienda a la hora habitual. "Dile a tu marido que no le puedo dar ningún alimento más libre, 'Dijo Pedro. 'Estoy maldng una habitación extra en el lado de mi casa. Si él me ayuda a llevar SORNE grandes rocas de la cantera, entonces usted puede tener más comida. ' 'Whoal' el jinete volvió a gritar, pero el caballo no fue ninguna más lento. Ahora los horswas justo en frente de Mario. Saltó

en ella, tomó las riendas del caballo en sus manos y lo hizo detener. El 1. •

jinete era un anciano con el pelo largo y blanco. Se bajó.riendas cuerdas que se atan a la cabeza de un caballo y que se tire a hacer que se vaya de una manera u otra,) 'Usted no se quede todo el día como los demás ", dijo a Mario, 'pero estás allí cuando alguien te necesita. " "Es usted muy amable, replicó M. a..rio. "Pero para ser como esto no es difícil. Trato de dormir bien, comer bien, y no preocuparse por las cosas. ' 'Bueno, hoy realmente me ayudaste, "dijo el anciano. 'Y así que

quiero darte un regalo de Dios '. "Un regalo de Dios? No lo entiendo ", dijo Mario. 'Cuando Dios da un regalo a alguien,' el anciano explicó, "Sólo la persona que Dios le da a puede mantenerlo. Sígueme. " Mario lo siguió, y se fueron encima de la colina. Allí, el anciano se detuvo y le mostró una gran roca. 'En virtud de que el rock', dijo, 'son hojas Sorne. Bajo las hojas son cofres Sorne. En los cofres que encontrarás el regalo de Dios a la espera de usted '. Mario se acercó a la roca, lmelt por ella, y la tomó en sus manos. Se movía con facilidad. Luego se trasladó de las hojas, y vio seis cofres de madera. Poco a poco se abrió uno de los cofres. Dentro de él había cientos de monedas de plata. Abrió un segundo en el pecho y una tercera ... Los seis cofres llenos de monedas de plata! Mario volvió a dar las gracias al anciano, pero extrañamente no estaba más allí.

Mario tomó Sorne de las monedas y se las guardó en el bolsillo. Luego elosed los seis cofres, • put deja sobre ellos de nuevo y puso baclc la roca. Ahora, después de todo este trabajo, se sentía cansado. Se sentó debajo de un árbol, y se fue a dormir. Cuando Mario se despertó, tenía hambre. Recordó algo sobre un caballo, un hombre viejo y Sorne plata. 'Lo hizo que le dan a re Y appen o fue sólo un 1t eam. e sar a 1mse ._ ut alguien entonces se acordó de algo mucho más -almuerzo irp_portant! pecho una caja grande Esposa Esa noche de Mario fue baclc a la tienda. Ella puso las monedas en la mano de Pedro. 'Mi marido le envía éstos. Necesitamos arroz, un chicleen, tortillas, tomates, q.nd café '. La boca de Pedro se abrió cuando vio las monedas de plata en la mano. '¿Cómo Mario conseguir tanto dinero?' , preguntó. 'COMETO nuestra casa mañana por la mañana después de las once, "la mujer dijo,' y él te lo dirá." A la mañana siguiente Pedro escuchó la historia. No estaba muy seguro de si era cierto. 'Pero Mario,' gritó, '¿por qué no traer a todos esos cofres casa con usted?' "Eran demasiado pesados", explicó Mario. "Yo necesitaba caballos para llevarlos y no tengo caballos. Y, mi amigo, ¿cuántas veces te he dicho que, "Si Dios quiere dar, Él le dará. Y cuando Él da, Él va a empujarlo n por la ventana." ' 'Lo sé!' Dijo Pedro. 'Tengo caballos Sorne. Voy a venir a tu // para poner las cosas en recoger a tomar algo en la mano

Empezó a caminar quicldy por la colina hasta su casa. De repente oyó un ruido clinlcing. Le puso la mano en el bolsillo y encontró seis monedas de plata allí. casa esta noche y nos iremos juntos a este lugar. Mis caballos llevar a los seis cofres; usted mantendrá tres o yhem y dar la otra tres tomos. Nos convertimos en ricos juntos! Estás de acuerdo? " 1ill derecho ", dijo Mario. Él estaba feliz porque su esposa estaba cocinando un pollo delicl.ous para; ner. Pedro volvió a su shop.But comenzó a pensar, '¿Por qué debe Comparto la plata con Mario? Los caballos pertenecen tomo. Sin ellos Mario no puede hacer nada. Y él no sabrá qué autorización del todo with.The dinero. Él acaba de comer y dormir, como de costumbre. Pero yo siempre sabía qué hacer con el dinero. Voy a construir una casa más grande ... " Esa noche, a las once, Mario estaba dormido.

"Esposo, dijo su esposa. 'Hasta Walce. Ya son las once y tu amigo no ha llegado. "«No es más que tarde," dijo Mario y volvió a dormir. Una hora más tarde, la esposa se despertó a su marido. "Esposo, es medianoche y me temo que Pedro ha decidido mantener toda la plata para sí mismo."

'Midnight? Es demasiado

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