Apuntes de la Web, Tuya de Claudia Piñeiro

Sobre la autora

Claudia Piñeiro nació en el Gran Buenos Aires en 1960. Es escritora, dramaturga, guionista de TV y colaboradora de distintos medios gráficos. Ha obtenido diversos premios nacionales e internacionales por su obra literaria, teatral y periodística.

Es autora de las novelas: Las viudas de los jueves, que recibió el Premio Clarín de Novela 2005; Tuya (Alfaguara, 2005); Elena sabe, Premio LiBeraturpreis 2010 (Alfaguara, 2007); Las grietas de Jara, Premio Sor Juana Inés de la Cruz 2010 ( Alfaguara, 2009); Betibú (Alfaguara, 2011); Un comunista en calzoncillos (Alfaguara, 2013); Una suerte pequeña (Alfaguara, 2015); y Las Maldiciones (Alfaguara, 2017)

Ha publicado también relatos para niños y obras de teatro. Varias de sus novelas han sido llevadas al cine. Es una de las escritoras argentinas más traducidas a otros idiomas, lo que hace que sus libros sean leídos y disfrutados por miles de lectores en todo el mundo.

https://latinta.com.ar/2019/02/tuya-la-conservacion-de-las-buenas-apariencias/

Piñeiro se puso a escribir guiones para televisión y a producir unas novelas singulares, con unos personajes femeninos muy poderosos y, casi siempre, un crimen: “La muerte es una de mis obsesiones, se mete en mi escritura. Y en cuanto introduces una muerte violenta, un crimen, la historia se desplaza inevitablemente hacia lo policial”.

En las novelas policiales de Piñeiro los protagonistas, los “buenos”, los investigadores, no son policías: “Después de la dictadura quedó mucha mano de obra de la represión, policías que formaron bandas de secuestradores y de sicarios. En España, probablemente, los padres aconsejan a sus hijos que en caso de problemas busquen a un policía. Los argentinos de mi generación les recomendamos que busquen a un quiosquero o a quien sea, pero no a un policía”. “Quizá las cosas estén cambiando un poco”, matiza. Pero no hay día en que la prensa no informe de la participación de un policía o ex policía en un acto criminal.

Piñeiro evoca a Petros Markaris, el escritor griego, creador del comisario Kostas Jaritos, “en cuyas novelas el tipo de crimen va cambiando según la situación económica”. En las últimas (ojo), el crimen importa ya menos que el crimen detrás del crimen, es decir, el crimen económico. Es el origen de la novela negra, desde la seminal Cosecha roja, de Dashiell Hammett. “A veces perdemos el contexto histórico. En¿Acaso no matan a los caballos?, de Horace McCoy, se refiere un crimen en un concurso de baile. Pero el auténtico crimen es el propio concurso de baile, en el que gana quien más resiste y la gente muere de agotamiento porque necesita los dólares del premio. Lo que McCoy denuncia es el salvajismo del capitalismo de su época, pero no sé si mis hijos lo captarían. La novela negra nació para denunciar las injusticias de la sociedad”.

Claudia Piñeiro goza de fama como constructora de tramas. Lo que más le interesa, sin embargo, lo que mueve su escritura, son los personajes. “Una inventa continuamente abismos y situaciones críticas para saber qué hará su personaje. David Lodge, un escritor al que admiro, dice que la novela es solo una excusa para desarrollar la conciencia del personaje, para descubrir quién es”.

https://elpais.com/cultura/2019/01/18/babelia/1547826210_171101.html

Sobre la novela

Tuya se divide en dos partes entre las que transcurre un período de cinco meses. En ambas, se despliega una serie de voces que ofrecen diferentes puntos de vista y perspectivas que van dando forma de policial a la novela. A partir de la muerte de Alicia (amante de Ernesto), Inés comienza una minuciosa investigación y descubre secretos de la vida de su esposo que empiezan a derrumbar la imagen de familia perfecta armada para los demás.

El matrimonio de Inés y Ernesto tiene una hija: Lali, una adolescente que critica la hipocresía reinante en sus padres. Está embarazada y no encuentra con quién compartir todo lo que le pasa. La idea de realizarse un aborto la sobrevuela constantemente.

Tuya es también un retrato de ciertas mujeres de clase media y clase media alta con ideas conservadoras: la mujer debe casarse con un hombre que nunca le haga faltar nada (y ese “nada” remite, sobre todo, a lo material) y que le permita adquirir una identidad. Lo importante es, ante todo, la imagen de felicidad que se dé hacia afuera, aunque, en la intimidad, el sexo sea escaso y haya que soportar, cada tanto, las infidelidades del marido.

Desnuda las hipocresías de una clase media alta obsesionada por conservar el estatus social adquirido y las buenas apariencias. Con una escritura cuidada y con alternancia de escenas, Piñeiro, a través del manejo del humor negro, la ironía y el misterio, logra una novela cautivante con un análisis sociológico excepcional.

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El lector, junto con la protagonista, va descubriendo todas las infidelidades de Ernesto, Inés busca la investiga a las amantes de su esposo y va armando el rompecabezas.

Organizar las ideas, explicar como se desarrolla el suspenso en la obra de Tuya

https://elestanteliterario.com/blog/tutoriales/suspenso-literatura/

De manera especial, podemos indicar que el texto que inicia aquello que se define como “el policial argentino” es La bolsa de huesos (1896), de Eduardo Holmberg. Se trata de un punto de fuga frente a los estándares genéricos de este tipo de relatos, puesto que la delincuente, en este texto, es una mujer.1 Decimos esto porque marca una diferencia con las obras canónicas que colocaban al detective en un rol protagónico indiscutible y a la caza de un delincuente siempre hombre: dicho de otro modo, implica la ruptura de un enfrentamiento entre hombres en el que generalmente el detective sale triunfante. Muy por el contrario, en esta ficción argentina la mujer cumple un rol fundamental dentro de la novela: es la criminal, la asesina, y no la víctima.

Fueron más de doscientas las escritoras argentinas que en abril del 2018 firmaron una carta abierta que enviaron al Congreso Nacional para apoyar el aborto legal, seguro y gratuito. La iniciativa surgió siguiendo al colectivo de Actrices Argentinas y de la mano de Claudia Piñeiro y Cecilia Szperling. Particularmente, fue Piñeiro quien tuvo la palabra frente al Senado y planteó que desde que se trata el tema se puede decir la palabra aborto sin eufemismos.3

En la escritura de Claudia Piñeiro podemos encontrar fuertes marcas feministas. Sus novelas Tuya (2005), Las viudas de los jueves (2005),

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