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En la provincia de Granada hay 505 farmacias y la mayoría con problemas. Las medidas de contención del gasto farmacéutico impuestas por los gobiernos nacional y autonómico, sobre todo en los últimos cuatro años, han llevado a muchas boticas a tener serios problemas de liquidez e incluso a plantearse el cierre. El Colegio de Farmacéuticos de Granada ya conoce la intención de algunos boticarios de clausurar sus oficinas si la situación sigue así.

El problema no es pequeño. Según el colegio profesional, este año va a bajar la facturación de las farmacias un 15% respecto al año pasado. Y se suma a la cascada de pérdidas que viven desde el año 2000, fecha desde la que la rentabilidad de las farmacias ha bajado un 50%. Porque desde ese año se han aprobado por los distintos gobiernos más de una docena de medidas para reducir el gasto farmacéutico que han deteriorado la economía del sector.

"La situación es caótica y algunas farmacias se plantean seriamente el cierre. No pueden soportar esta situación. Además, la financiación es escasa y la rentabilidad mínima, por lo que no pueden pagar al personal y los costes que genera la explotación de la oficina", asegura el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Granada, Manuel Fuentes, que se muestra seriamente preocupado por la situación del sector. Así, si el sector antes era garante de empleo, ahora todo lo contrario.

Las farmacias tienen cada vez más gastos, como mantener el servicio de internet y todo lo que supone el funcionamiento de Receta XXI, la luz, el agua, la hipoteca, los seguros, los sueldos de personal, la subida del IVA, "y todo eso con los ingresos bajando cada vez más".

"No se puede tocar más al sector, hay otras medidas que se pueden hacer antes. Pero desde que aprobaron el decreto que cada dos meses baja los precios de los medicamentos tenemos un problema. Cuando baja el precio, lo que tienes en stock se ha perdido. En los últimos tres o cuatros años la situación es insufrible", explica.

Además de las pérdidas económicas y de la falta de liquidez de muchas boticas, el sector se está viendo obligado a despedir profesionales por esa merma en los ingresos. "Se están despidiendo profesionales en un colectivo que antes no tenía paro porque no se pueden mantener los empleos", aseguró.

En la provincia se ha perdido un 15% de empleo en los últimos años, según los datos del colegio. El sector emplea a unas 2.000 personas en la provincia.

Hay tres perfiles de boticas afectadas por la asfixia financiera. La de los pueblos de menos de 1.000 habitantes que con los progresivos decretos del Gobierno central para la contención del gasto han perdido el escaso margen de rentabilidad que tenían.

Otro bloque de farmacias aquejadas por la situación económica suelen ser las adquiridas

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