Tecnologia De Japon
ROBERTOAP30 de Agosto de 2011
690 Palabras (3 Páginas)731 Visitas
Japón: Tecnología, historia y fe en la tierra del sol naciente (IV)
La región de Kansai es un destino que no puede faltar en un viaje a Japón. Esta semana continuamos nuestro recorrido por tierras niponas en Kioto, el principal atractivo de Kansai junto con Nara. Kioto es la mina de la cultura tradicional japonesa. 17 lugares declarados Patrimonio de la Humanidad respaldan esta condición. Pero Kioto ha sido además escenario de gran parte de la historia del país y aquí es precisamente donde el viajero se encuentra el Japón que siempre ha tenido en la mente.
Maria Casinos_11/12/2008
Kioto fue la capital imperial entre los años 794 y 1868, y para muchos sigue siendo la capital cultural del país. No en vano, posee 17 lugares que cuentan con la declaración de Patrimonio Mundial por la UNESCO. Trece templos budistas, tres santuarios sintoístas y un castillo cumplieron los requisitos para contar con esta denominación.
Lo cierto es que considerar esta lista a la hora de visitar Kioto resulta bastante cómodo, sobre todo si tenemos en cuenta que en la ciudad hay más de 1.600 templos budistas y unos 400 santuarios sintoístas.
En Kioto se encuentra el Japón que forma parte de nuestro imaginario colectivo: jardines de estilo zen con guijarros rastrillados, templos dorados flotando sobre aguas tranquilas en medio de impresionantes jardines, puertas de santuario rojas, geishas que desaparecen silenciosas cruzando la entrada de restaurantes tradicionales...
Al bajar del tren, Kioto puede decepcionar un poco. El hormigón y el neón parecen ser los protagonistas de una ciudad que se aprecia en un primer momento como la hermana pequeña de Tokio. Sin embargo, cuando uno se adentra en ella y mira de cerca, comprueba que detrás de muros, puertas y fachadas se ocultan rincones de extraordinaria belleza.
El famoso Templo Dorado de Kinkaku-ji fue levantado en 1397 y en 1950 quedó reducido a cenizas después de que un joven monje llevara al extremo su obsesión por el templo. Una fiel reconstrucción de 1955 nos permite disfrutar de este edificio, enclavado en medio de jardines y lagos.
También es muy recomendable visitar los jardines imperiales, así como el propio Palacio Imperial, para el que hay que solicitar permiso un día antes de la visita. El Kyoto Gosho sigue siendo lugar de celebración de ceremonias de entronización de nuevos emperadores y otros actos del Gobierno japonés.
El castillo de Nijo-jo, al noroeste de la ciudad, se construyó en 1603 como residencia oficial en Kioto del primer sogún de la dinastía Tokugawa, el poderoso Ieyasu. Su intención era demostrar su prestigio y la paulatina pérdida de poder del emperador, por lo que se decantó por un estilo descaradamente ostentoso. A un exterior de gran belleza le sigue un interior sorprendente. En el castillo de Nijo-jo, todo estaba pensado para evitar ataques y acciones de espionaje de partidarios del emperador. Por ello, toda la casa cuenta con "suelos de ruiseñor", un suelo de madera que al caminar emite un ruido similar al canto de un pájaro. Asimismo, en las diferentes salas en las que el sogún se reunía con los señores feudales, se pueden ver cámaras secretas en las que la guardia de Ieyasu se ocultaba para evitar ataques.
Dichas salas están cubiertas de mamparas, para separar estancias, decoradas con espectaculares pinturas que representan paisajes tradicionales japoneses.
Algo obligado al visitar Kioto es ver geishas. No es fácil, pero si uno sabe dónde buscar, puede encontrarse con alguna. En las noches de fin de semana, es muy probable encontrarse con geishas o maikos, sus aprendices, en la calle de Ponto-cho, en los alrededores del barrio de Gion.
Hay tantas
...