1000 Preguntas Y Respuestas

LIBRO DE LAS 1000 PREGUNTAS Y RESPUESTAS

¿Desde cuándo practican las personas la Astrología?

Desde el comienzo de la civilización humana, los expertos se han ocupado del transcurrir del sol, de la luna y de las estrellas. Esos astrónomos estaban alta¬mente considerados en todas las culturas conocidas. Los incas y aztecas en América, los asirios en Asia, los egipcios en África, los celtas en Europa; éstos y otros pueblos levantaron ya hace miles de años edificios monumentales que servían de calendario de las estre¬llas; con su ayuda, se podía seguir y predecir los movimientos del sol, de la luna y de los planetas. El famoso y misterioso círculo de piedra de Stonehenge, Inglaterra, hizo posible hace 4.000 años cálculos astronómicos sorprendentemente precisos.

¿Cómo se creó el Universo?

Actualmente la mayoría de los científicos es de la opinión de que el Universo surgió por una especie de una gran explosión, el llamado «Big Bang». Sin em¬bargo, esto no debe tomarse demasiado literalmente. La «explosión original- no es, en realidad, nada más que una imagen del inimaginable nacimiento de nuestro Universo. La mayoría de lo que sabemos sobre el comportamiento de las estrellas, sobre su tra¬yectoria a través del Universo y sobre la constante expansión del mismo indica que, en un determinado momento, la totalidad de la materia y energía del Universo -esto es, el sol, la luna y el conjunto de las estrellas- estuvo comprimida en un único punto. Ese punto era infinitamente pesado y caliente y cuando, finalmente, el concentrado Universo explotó, expan¬dido todo hacia fuera, hacia lo que nosotros hoy conocemos como Universo, un segundo después de esa explosión, la temperatura del Universo era de 10.000 millones de grados celsius. Y en lo equivalen¬te a la cabeza de un alfiler de aquella materia, se con¬centraba tanta energía como la que nuestro sol ha generado en los últimos cinco mil millones de años.

¿Cómo se generó la explosión original?

Los astrofísicos (o físicos de las estrellas) no están en absoluto de acuerdo sobre cuándo tuvo lugar esta explosión. De todas formas, está claro que el Univer¬so es más viejo que nuestra Tierra, y la Tierra alcanza la nada despreciable cifra de 4.500 millones de años. El Universo tiene que ser también más viejo que la Vía Láctea o galaxia en la que se encuentra nuestro sol (6.500 millones de años). ¿Y además? Bueno, aquí los cálculos difieren notablemente. El nacimiento del Uni¬verso tiene que haber tenido lugar hace aproximada-mente entre 10.000 y 20.000 millones de años.

Si se analiza la luz de las estrellas, se puede com¬probar que el Universo continúa explotando. Sus tro¬zos salen despedidos muy lejos los unos de los otros, algunos con una

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