ADOLECENTES

ADOLESCENCIA

En tanto que los individuos difieren ampliamente no sólo en edad sino también en la secuencia de las etapas de repetición de la historia de la raza.

El aspecto más amplio posible de todos los hechos de la vida y la mente es educativo, y la única historia completa es la de las influencias que han hecho avanzar o retroceder el desarrollo del hombre hacia su realización, siempre ideal y perpetuamente para el futuro.

El periodo de los ocho a los 12 años es único en la vida humana: está terminando la crítica etapa de la dentición, el cerebro está a punto de alcanzar el tamaño y peso de la edad adulta, la salud está casi en su mejor estado.

El niño desarrolla una vida propia fuera del círculo del hogar, la percepción es muy aguda y existe una gran inmunidad al riesgo, al peligro, al accidente y a la tentación.

Las cualidades desarrolladas en este momento son filéticamente mucho más antiguas que todos los rasgos neoatávicos del cuerpo y la mente.

La función de la madurez sexual y la capacidad de procrear pueden oscilar por encima o debajo de la línea de la edad, independientemente de las cualidades, por lo general tan estrechamente relacionadas con ella, de manera que mucho de lo que el sexo creó en el phylum ahora lo precede en el individuo.

Los rudimentarios órganos del alma, en esta etapa negados, pervertidos o reprimidos, que más tarde resurgen en formas amenazantes, podrían madurar en su momento para después inmunizarnos en los años de madurez.

Estos instintos nativistas y más o menos crueles pueden y deben ser alimentados y formados.

El arte del maestro debe animar todo lo que los recursos de la literatura, la tradición y la historia ofrecen de manera que el niño, con su imaginación casi visual, reforzada por los impulsos recapitulatorios psiconómicos, pueda disponer de toda su herencia.

El discernimiento, la comprensión, el interés y el sentimiento, por lo general, sólo aparecen de manera incipiente y todo lo que pertenece al auténtico reino del hombre maduro es embrionario.

Pero los sentidos son agudos y están alerta, las reacciones son inmediatas y vigorosas y la memoria es rápida, segura y permanente; asimismo, las ideas de espacio, tiempo y causalidad física, además de muchas libertades y prohibiciones morales y sociales están en pleno desarrollo.

La lectura, la escritura, el dibujo, se encuentran en su edad de oro, y si estos conocimientos pasan de largo sólo podrá adquirirlos más tarde con graves desventajas y obstáculos.

el arte pedagógico consiste en empujar al niño a que vaya a su encuentro en buena hora, de manera tan intensa y rápida como se pueda, a costa del menor esfuerzo posible.

La adolescencia es un renacimiento, pues rasgos humanos más elevados

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