ANALISIS SOCIAL ECONOMICO DE LA POLITICA CRIMINAL DEL ESTADO COLOMBIANO
jptg3023 de Julio de 2013
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ANALISIS SOCIAL ECONOMICO DE LA
POLITICA CRIMINAL DEL ESTADO COLOMBIANO
El Análisis Social Económico de la Política Criminal del Estado Colombiano se refiere al impacto Social y Económico que el Estado mediante sus Políticas de control de la criminalidad han producido en la sociedad, en cómo sus actuaciones, reformas y medidas de control han intervenido en el desarrollo del bienestar de las partes interesadas, trabajaremos con un énfasis especial en los sectores más vulnerables y de acuerdo a los grupos criminales más fuertes.
El presente análisis no solo lleva implícito un análisis económico sino que intervienen en el, las tres áreas de análisis que se superponen y se derivan de distintos campos disciplinarios que actúan de manera directa en el Estado. Estas áreas fijan su atención en las reglas y las relaciones que subyacen e inciden en los resultados de las acciones que se deben tomar en un caso específico.
• El análisis político estudia tanto la estructura de las relaciones de poder como los
Intereses, frecuentemente muy arraigados, de aquellos que influyen en la toma de decisiones y en los resultados distributivos. Este análisis se basa en el reconocimiento de que los intereses políticos son determinantes en muchas de las áreas sociales y del debate que surge en torno a las políticas de seguridad y de las acciones económicas, que se llevan a cabo, aquí trataremos de interpretar la manera más precisa de que esa formulación de políticas interfiera de una forma productiva y benéfica en la población vulnerable.
• El análisis social examina las relaciones sociales que rigen las interacciones en los distintos niveles sociales que resultan involucrados en la toma de decisiones o de políticas criminales, tales como el hogar, las comunidades y los grupos sociales geográficamente establecidos. Este análisis se desarrolla con base al reconocimiento del papel que desempeñan las normas sociales y culturales para regir las relaciones dentro y entre los distintos grupos de actores criminales, al igual que sus repercusiones en el grado de inclusión y empoderamiento de estos mismos.
• El análisis económico busca establecer cuáles de todas las alternativas existentes para atacar a los grupos criminales, afectaría en menor porcentaje la económica del país, sin embargo este análisis no están reducido pues no solo se trata de la toma de decisiones para aumentar la economía, sino integrar que esas decisiones no afecten en futuro a los grupos sociales vulnerados, pues la solución económicamente aceptable puede ser válida en el presente y constituir una problemática social en el futuro que lograría afectar de manera significativa la economía del país.
El Análisis Social Económico de la Política Criminal del Estado Colombiano estudia la forma de contribuir a la reducción de los grupos criminales, del Impacto Social que tienen las políticas para contrarrestar la violencia, contribuir a la reducción de la pobreza en los sectores marginales y más afectados por la criminalidad.
Este análisis tiene como objetivo principal determinar el impacto económico y social que tienen los 4 grupos criminales, diferenciando la zona geográfica vulnerable. Es decir se tendrá en cuenta la violencia perpetrada por los grupos guerrilleros (FARC y ELN), por los grupos paramilitares, por las Bandas Criminales (BACRIM) y por la delincuencia Organizada.
Desde el inicio de la economía se plantea que la violencia, a través de varios medios; puede tener un impacto negativo sobre el crecimiento económico. “En primer lugar, la violencia destruye capital humano y capital físico. Segundo, afecta los flujos de comercio. Tercero, genera incertidumbre que disminuye la inversión. Y cuarto, desvía los recursos del Estado hacia actividades menos productivas como gastos en defensa y seguridad”.
Por otra parte, no toda la violencia es igual. Para el caso de Colombia ésta puede clasificarse a grandes rasgos en dos tipos: la violencia asociada al conflicto armado y la violencia asociada a la criminalidad (delincuencia común u organizada). Aunque algunas veces la diferencia entre estas dos expresiones de violencia puede hacerse ligera, existen algunas diferencias categóricas. La más importante radica en su objetivo: la primera tiene fines de tipo político o ideológico y a su vez económico, mientras la segunda solo tiene fines económicos o lucrativos. Los grupos que han estado con mayor permanencia en la violencia (FARC, ELN y paramilitares) son los principales actores históricos del conflicto, conflicto armado.
Es decir, se tiene en cuenta, por un lado, la violencia perpetrada por los dos grupos guerrilleros que aún permanecen activos: (FARC) y (ELN); y por otro lado, la violencia perpetrada por los grupos paramilitares. Si bien la violencia puede tener otros efectos negativos que sería valioso analizar, como por ejemplo la pérdida de vidas humanas o el impacto en términos de bienestar de la población, sin embargo el tema que se analizara será las consecuencias económicas de la violencia y las políticas criminales adoptadas para neutralizar la violencia.
Colombia ha vivido, durante los últimos cincuenta años, un conflicto armado interno de baja intensidad, bastante heterogéneo en sus patrones de victimización y actores del conflicto. Las razones que han generado la confrontación no son identidades religiosas, regionales o étnicas, tal como ha ocurrido en otros países; por el contrario son, en contraste, las tensiones características de la vida política y económica las que suelen generar y agravar las formas violentas de resolución de conflictos.
La dinámica de la violencia en el país ha tenido cambios significativos, no sólo por las diferentes políticas de seguridad nacional implementadas por los gobiernos de turno, sino también por los diferentes actores que se han involucrado generando conflictos y violencia (Guerrillas, Paramiltares, BACRIM) .
La violencia es un fenómeno que tiene manifestaciones e impactos diferenciados sobre el territorio. Particularmente, la violencia asociada al conflicto armado colombiano no se ha distribuido homogéneamente en el país. Los grupos armados en conflicto tienen presencia en algunas regiones específicas y la intensidad de la violencia ha variado. Este comportamiento se hace evidente al analizar la distribución de las acciones armadas de las FARC, el ELN y los paramilitares.
Las FARC y el ELN son los grupos guerrilleros con mayor actividad armada en el país. Las FARC, por un lado, mantienen acciones armadas en los municipios del departamento de Caquetá, zona histórica controlada por este grupo guerrillero, así como en los municipios de los departamentos de Cauca, Cundinamarca, Magdalena medio, . En el norte del país, las FARC mantenían acciones armadas en algunos municipios del departamento de Antioquia; específicamente en Urabá. El ELN, por su parte, concentraba sus acciones en el nororiente del país; específicamente en los municipios de Santander, Norte de Santander, Boyacá, Cundinamarca y Magdalena y Arauca.
Las actividades de los paramilitares fueron hechos aislados relacionados más con la dinámica del narcotráfico que la del conflicto armado.
Mientras que las BACRIM mantienen acciones armadas en Córdoba, estas bandas son la alternativa de tipo delincuencial con el ánimo de buscar fuentes alternas de financiamiento y de delegar acciones terroristas, estas desarrollan actividades de control de grandes negocios ilícitos específicamente de narcotráfico, lo que genera un incremento en los activos de los grupos armados, pues su ideología se perdió, y su fin perseguido es netamente lucrativo.
Siempre existirá una relación entre violencia y economía, pues cuando las condiciones económicas no son favorables causan violencia, pero la violencia tiene también un efecto sobre las condiciones económicas. Se debe observar esta relación en dos sentidos uno son las causas económicas que dan surgimiento a la violencia y, el otro son las consecuencias económicas de la violencia, su efecto sobre el crecimiento y otras variables económicas.
En el análisis de los supuestos económicos en los que la violencia interfiere se pueden observar en dos enfoques. Por un lado, se puede estudiar una postura en la cual la violencia responde a una razón de tipo económico; este enfoque es un poco individualista y se relaciona con la codicia de las personas. El otro enfoque esta inclinado ha quienes alegan que la violencia es el resultado de unas condiciones estructurales de pobreza y desigualdad en la sociedad, y que sumadas a una política sin equidad, generan Conflicto armado y crecimiento económico desequilibrado pues solo se evidencia en pocas zonas de Colombia, este descontento conduce a la violencia.
Podríamos hablar de la economía del crimen. Donde según esta teoría, el “Comportamiento criminal de un individuo es el resultado de la decisión racional de comparar las ganancias que se pueden obtener por transgredir la ley y el costo deducido de la probabilidad de ser sancionado” . Teniendo en cuenta este argumento podríamos decir que lo que se debe examinar es el sistema de justicia, es decir las instituciones, en donde se supone que un aumento del gasto en seguridad y justicia podría disminuir la criminalidad.
Después de conocer el tema de la violencia y de los grupos generadores de esta en Colombia, se podría decir que la violencia en Colombia, especialmente la producida por los grupos guerrilleros y el narcotráfico son producto de un sistema Penal frágil y acobardado,
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