ASUMIR LA RESPONSABILIDAD-CIUDAD Y NUEVOS PARADIGMAS.

La sociedad de mercado ha influido considerablemente en las actuales economías, ya que la necesidad de la gente es lo que hace que las cosas realmente tengan valor, siendo esto la motivación; para que el hombre mismo sea productivo e innovador y de esta forma haga aportes que son de mucha importancia para la sociedad, ya que atribuirle responsabilidades a otros prácticamente es echarle la culpa o alagar su trabajo; mientras que si asumimos la responsabilidad; estamos aceptando una serie de retos entremezclados, planificando el futuro, aceptando posibles errores y viendo el lado positivo, tanto de las cosas buenas como también de las malas.

Es de vital importancia responsabilizarnos de nuestro propio bienestar e inculcar esta cultura a nuestros hijos, haciendo aportes a la sociedad de mercado ya que si producimos, contribuimos y de esta manera también se nos retribuyen beneficios económicos como prosperidad y progreso, pues hay culturas, instituciones, sociedades o regiones que han logrado un avance económico, han logrado un éxito en la búsqueda del bien propio y bien común pero desafortunadamente hay otras que no; esto debido a la falta de responsabilizarse en búsqueda del bien propio, pues si las personas que se encuentran en edad productiva a nivel laboral, abandonan sus empleos pasaran a estar en peores condiciones solamente apoyados en las ayudas que personas o instituciones ajenas les quieran ofrecer y quizá estén menos dispuestos de transmitir a sus hijos que asumir la responsabilidad de su propio bienestar forma parte del proceso de hacerse adulto; de ahí la importancia de fomentar los comportamientos responsables en las actuales y próximas generaciones, pues la brecha económica entre las personas que aceptan sus propias responsabilidades y las que no, continuará creciendo con el tiempo inevitablemente, y con ella también crecerá el grado de autoestima; el pensar y actuar de esta forma, puede ayudar a muchos de los que necesitan ayuda salir de ese pozo en el que se encuentran, pues cuando las personas se responsabilizan de sí mismos es menos probable que lleguen a necesitar de dicha ayuda.

Podríamos determinar que “existen dos tipos de responsabilidad, la externalizada y la internalizada” en la primera hay personas que consideran que su bienestar es

problema de otros, y en la segunda opción las personas consideran que su bienestar es su propio problema y por ello voluntariamente se responsabilizan de sí mismas, como individuos, al mismo tiempo se responsabilizan unos de otros como familias, empresas, grupos etc. , pues muchas cosas son necesarias, por tal motivo es necesario garantizar la producción de esas cosas; el internacionalizar la responsabilidad cuando aprovechamos nuestras oportunidades y consideramos que nuestros problemas son problema nuestro y no culpa o responsabilidad de los demás

En la actualidad es asombroso que en los miembros promedio de las sociedades de mercado ya el hambre es una rareza (sin embargo contamos con un nivel muy alto de pobreza y miseria a nivel mundial), claro está que hasta hace poco era algo muy habitual. Se dice que la sociedad de mercado es muy rica, por tal motivo se puede permitir el convertirse en una sociedad de no mercado, una sociedad en la que el gobierno puede distribuir los ingresos con el fin de satisfacer las necesidades de los demás.

La cultura influye mucho en el desarrollo social, sin embargo la política y la economía no concuerdan; pues los intentos por lograrlo deben establecer coherentemente el vínculo entre los ámbitos sin enfrentar contradictoriamente acciones políticas y económicas y sin superponer liberalismo político y neoliberalismo económico. Estas dos vertientes no coinciden y provienen de concepciones filosóficas que posiblemente obstruyen el funcionamiento del mercado e impide la construcción de una sociedad que tenga bases firmes y solidas con el fin de construir un país donde estén de la mano la democracia política con la democracia económica y crear una mentalidad en la sociedad de proyección y ganas de trabajar por su propio desarrollo y el beneficio de los demás; pues nadie quisiera vivir en una sociedad donde la gente pasa hambre o necesidades. Por esta razón es de suma importancia crear sentido de pertenencia en las personas ya que estamos inmersos en un gobierno antidemocrático de poderosas empresas privadas transnacionales, que operan a nivel mundial que han sido clave para el desarrollo tecnológico y científico enfatizados en el lucro y éxito individuales; entre otros mercados manipulados con otros criterios de ineficiencia, corrupción y muy bajo crecimiento, que han aumentado el desempleo, enfrentamientos comerciales y en especial las guerras por sentido económico y especialmente por la lucha de poder; acogidos involuntariamente a la globalización actual de capitales, mercados, y empresas, obligados a innovar constantemente,

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