¿Artesanias U Obras De Arte?

Para comenzar a argumentar si las artesanías deberían considerarse como arte, en primera instancia me gustaría analizar el origen de la palabra “artesanía”. La palabra artesanía viene del latín «artis-manus» que significa: arte con las manos. Se refiere a la creación de objetos realizados sin utilizar maquinaria, de maneras individuales y diferentes entre sí. Los orígenes de las artesanías datan desde la prehistoria, encontrando objetos que se realizaron con poca o nula ayuda de herramientas, siendo estos de uso común o decorativos; hasta la edad media se les consideró como arte, pero en la época del renacimiento se les subordinó a los artesanos para a su vez darles mayor importancia a los artistas (gente de sociedad quienes ellos pensaban era de su nivel para llamarlos artistas). Lo cual me parece que los pobres artesanos fueron víctimas del clasismo de la época del renacimiento. Actividad que subsiste hasta estos días.

En mi opinión personal creo que fue una injusticia el haberles degradado el nombre de artistas a los artesanos, ya que finalmente es arte, aun cuando los artesanos realicen piezas muy similares, las realizan con sus manos y de manera individual, por lo tanto cada pieza por mucho que se parezca siempre tendrá sus diferencias; además si no se les hubiera devaluado como artistas, jamás se hubiesen visto en la necesidad de repetir o copiar las piezas que se vendieron con mayor demanda, les habrían dado la cantidad que ellos exigieran y vender las piezas de manera única. La misma necesidad los hizo trabajar de esta manera.

Definitivamente estoy a favor de que las artesanías mexicanas y del todo el mundo retomen la importancia que les fue arrebatada, que se les considere como lo que son: “obras de arte”. Obviamente al reconocerse como obras de arte, sus costos se incrementarían y tendrían que manejarse como piezas genuinas y únicas, a menos que se les pague las regalías para realizar sus replicas, tal y como encontramos replicas de obras de arte famosas como: “La Gioconda”, “El Grito”, “Las Meninas” etc.

Otro aspecto a considerar es la autenticidad de las obras ya que en mi experiencia personal, he visto personas realizar artesanías tales como: bolsas de piel, zapatos, pintura en platos, collares bordados con chaquira, entre otros; hay quienes se hacen llamar “artesanos” y lo único que hacen es revender los productos que se realizan por otras personas, a quienes se les paga muy barata su mano de obra y lo peor de todo es talento que vive en el anonimato, sería interesante desenmascarar a esos pseudo artesanos y darle el realce a quienes se merecen el titulo.

Para concluir me gustaría mencionar que para que esto sea posible, se necesitaría acabar con los niveles sociales; mucha gente de sociedad se le destaca como artista simplemente por el hecho de mostrar sus talentos ante un nivel socioeconómico elevado cuando a un humilde y de escasos recursos artesano ni siquiera miraría. Deberíamos seguir el ejemplo de Cuba, el gobierno apoya a los artesanos, llamándoles “artesanos artistas”, expidiéndoles un carnet de registro que les permita identificarse como artistas, permitiéndoles exportar y vender sus productos con el apoyo, dirección política y económica del país, cosa que también sucede en España, entonces ¿Por qué no llevarse a cabo en nuestro país?

Empecemos por nosotros, reconozcamos las maravillas que realizan nuestros “artesanos artistas” brindémosles respeto comprando sus piezas originales sin estar regateando, o comprándoles a los revendedores que traen cosas posiblemente más económicas, pero que dañan a los verdaderos trabajadores del arte. Muchas veces abusamos de la necesidad de ellos y les pedimos que nos rebajen los precios hasta donde más sea posible, algunas veces ellos en su desesperación de realizar una venta, rebajan el costo de sus artesanías con la única finalidad

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