Cómo Mirar El Arte.

Cómo mirar el arte.

La aventura de aprender a como mirar el una obra artística es uno de los grandes goces del contacto con el arte, comprenderla e interpretarla suele considerarse una tarea difícil, y en algunas ocasiones imposible pues no todos tienen la oportunidad de mirarlo. El arte es considerado un privilegio solo para algunos, sin embargo todos somos aptos para entenderlo.

Cada imagen que observamos tiene un objetivo distinto, cuentan historias y muestran una expresión única e irrepetible que cautivan la vista, y que muy pocos se atreven a descubrirla. Mirar de manera correcta el arte es una forma de honrarla, Aaron Copland menciona que “Honrar todas las clases de arte sin falsas pretensiones de comprensión ilógicas es gozar conforme a esta naturaleza dicta los diferentes atractivos de diversos esfuerzos” (Copland; 2005, 5). Valorar una obra de arte implica disfrutarla y comprenderla.

Este texto debe ayudar a los lectores que se sienten atraídos por formas diferentes y en ocasiones más complejas de arte a mirar con atención e identificar cada mensaje que la obra desee comunicar. El lector se podrá dar cuenta que observar un arte requiere no solo de sentimientos, gustos, o preferencias sino también de conocimientos, desde los más sencillos como el observar con detenimiento hasta lo más complejos como su contexto.

El hombre aprende diferentes cosas. En este proceso se incluyen acciones como caminar, hablar, escribir, vestirse, dibujar; entre otras; sin embargo la mayoría se olvida de lo complicado que en su momento resulta. Por ejemplo, las personas que aprenden a leer, dejan de lado el esfuerzo que conlleva dicho aprendizaje, las horas invertidas en la memorización y análisis de cada grafía así como la comprensión e ilación de estos. Es tan poco el valor concedido a tal esfuerzo que solo un grupo reducido de personas siguen desarrollando y cultivando su hábito de observar cada grafía, sin automatizar su lectura.

Por lo tanto obras de arte con un gran valor estético son poco entendidas y valoradas, ejemplo de esto es la obra; Mujer llorando, de Pablo Picasso que a primera vista es difícil apreciar dada su complejidad, por consiguiente son muy pocos los que logran observar cada detalle logrando su comprensión. Son pocos los que saben cómo mirar el arte.

“El arte, es la manifestación de la actividad humana mediante la cual se expresa una visión personal y desinteresada que interpreta lo real o imaginario con recursos plásticos, lingüísticos y sonoros” (RAE:). No obstante, para entenderlo se requiere conocer la forma de trabajar, los materiales usados y el contexto en el que situamos a cada artista y su obra; de manera que esto ayude a ver con claridad lo que trataron de expresar.

Entender el arte no es fácil, ya que cada persona vive de manera diferente y no todos están al alcance de éste, y de aquellos afortunados solo una minoría sabe mirarla. Es importante destacar que la sociedad y su contexto influyen radicalmente en quiénes son aptos para entender o no el arte, de la misma forma para tener acceso a éste. Ya que nuestra historia humana hace parecer que el arte es algo reservado para quienes tengan tiempo y medios de obtener un aprendizaje que les permita expresar su pensamiento de esta forma; algo más apto para el “erudito” que para una persona ordinaria.

La historia indica que el hombre dibujó antes de saber escribir; cumpliendo en un principio una función mágica y ritual, al igual que religiosa. Con lo anterior se buscó la mera expresión de ideas, sin ahondar en la creación de un modelo lingüístico complejo. El hombre tan solo tenía la intención de comunicarse sin tener que realizar un sistema de símbolos complicado. Tan pronto el hombre se desarrolla, su forma comunicar también; logrando con el tiempo una mera expresión estética, artística.

En el Renacimiento italiano a fines del S.XV, el arte comienza a imponer su distinción, a fin de lograr su importante reconocimiento. El artesano se dedicaba a producir obras múltiples, mientras que el artista; era creador de obras únicas e irrepetibles. De tal modo que fue en esta época en la que se destacan los artistas y sus obras más reconocidas, figuras como Leonardo Da Vinci, “La Gioconda”; Miguel Ángel, “La Capilla Sixtina”; Donatello, “Gattamelata”; Tiziano, “Venus de Urbino”; y Rafael con su obra “Los desposorios de la Virgen”.

A finales del siglo XVIII, y a mediados del siglo XIX, aparece un gran reconocimiento en el producto artístico, además de una lucha de carácter industrial, logrando un notable incremento en las colecciones privadas, influyendo de manera importante en los costos de las obras. Al mismo tiempo, surgieron las primeras academias de arte, museos, críticos galeristas y coleccionistas.Es a partir de 1920 que surge la distinción entre dos conceptos importantes; primero, las bellas artes, formas de arte desarrolladas principalmente por la estética, la belleza y por su utilidad práctica; y las artes aplicadas, industriales o decorativas, que han de anteponer su función práctica a la estética.

Actualmente se reconocen diferentes categorías artísticas utilizadas en la Grecia Antigua y divididas en dos; las artes superiores que correspondían a la interpretación por medio de la vista y el oído; y las artes menores que cautivan a los sentidos menores, gusto, olfato y tacto; destacando seis disciplinas las cuales son; arquitectura, la danza, la escultura, la música, la pintura, la poesía y posteriormente el cine que surgirá como un séptimo arte en la edad moderna y utilizadas hoy en las Bellas Artes

El arte, es una forma de expresión que se manifiesta de diferentes maneras, y que siempre trata de la realidad que concibe un artista; que se puede presentar en infinidad de formas y espacios. El arte no es un lujo, ya que deriva de una necesidad inherente al ser humano, que lo obliga a expresarse con otros al ser un ente social; por otro lado arrebatará consigo al espectador o al oyente, liberándolo de sus preocupaciones durante algún tiempo, incluso llenándolo de nueva energía.

Es importante destacar que este ensayo, se limitará a la clase de arte visual; implicando así la distinción de los conceptos ver y mirar. Ya que es muy común dar por hecho lo que vemos; descartando un análisis a fondo; lo contrario de mirar, acción que exige un detenimiento y raciocinio para la correcta comprensión.

Debemos meditar que aunque la mayoría de autores consideran sinónimos palabras tales como: mirar, ver y observar; cada uno tiene su significado, distante en cuanto a la profundidad y detenimiento que conlleva su acción. Con el fin de preparar al lector para el correcto análisis del presente ensayo, esbozaremos

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