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La Iglesia Católica sometió un recurso de amparo contra la Asociación Dominicana Pro Bienestar de la Familia (Profamilia) para que retire de los medios la campaña publicitaria “Tus derechos sexuales y derechos reproductivos son derechos humanos” bajo el eslogan “Conoce, Actúa, Exige”, que tiene como finalidad crear conciencia sobre la educación sexual, el uso de preservativos, el aborto, el incesto, el acoso y los embarazos de alto riesgo.

La Vicaría Pastoral Familia y Vida y la Pastoral de la Salud de la Arquidiócesis de Santo alegan que esta campaña incita al aborto y a las relaciones sexuales tempranas; viola el derecho a la vida, el derecho de los padres a ejercer su autoridad sobre sus hijos y el derecho a la no injerencia en el hogar, y hace uso de imágenes de menores, lo que está prohibido en la Constitución.

A raíz de la campaña sobre derechos sexuales y reproductivos, ideada por la organización no gubernamental Profamilia, la iglesia católica interpuso un recurso de amparo contra esta. Para que retirara de los medios de comunicación su campaña publicitaria por considerar que con ella se incentivan las relaciones sexuales a temprana edad y se violaban los derechos constitucionales. Rechazando la exposición de menores de edad en las imágenes de la campaña, así como la supuesta incitación a la desobediencia paternal, el sexo a temprana edad y el aborto.

Si bien es cierto que esa entidad debe llevar a cabo este tipo de acciones, el anuncio en cuestión es contraproducente porque esta una adolescente a la que se le dice que tiene derecho a mantener relaciones sexuales protegidas.

Más que una propaganda de protección, lo que hace es resaltar el derecho al sexo; no te sugiere que no hagas eso, y si ya lo hiciste protégete aquí entra en un elemento moral.

Al hacer un análisis de los mensajes de la campaña publicitaria de Profamilia, la presidenta de la Quinta Sala Civil y Comercial del Distrito Nacional consideró que informan y advierten a los padres al momento de enfrentar una pregunta embarazosa que le hagan sus hijos.

“Los padres autorizaron a los menores de edad a que su figura fuera utilizada en el comercial y cuando el niño le pregunta a la madre ¿mami tú y papi lo hacen?, el comercial trata de advertir a los padres de que a temprana edad se despierta la curiosidad de los menores”, indica la sentencia.

La jueza explica además que este tipo de publicidad ayuda a incluir dentro del currículo educativo la educación sexual y la paternidad responsable.

Libertad de expresión

Otra parte de la sentencia que beneficia la campaña realizada por Profamilia a favor de los derechos sexuales y reproductivos, es donde la jueza explica que censurar el derecho que tiene la entidad no gubernamental sería lacerar el derecho a la libertad de expresión.

“Mal podría y sería aventurado por parte de la juzgadora prohibir la divulgación de esta campaña publicitaria, porque violenta la libertad de expresión que tiene Profamilia”, indica el dictamen.

La magistrada entiende que la campaña de la Profamilia no viola derechos fundamentales es una manifestación que la organización no gubernamental entiende es su derecho a expresarse.

Con respecto a la posición de la Iglesia Católica de que el uso de la imagen de un menor para expresar un “crimen”, la jueza dijo que la presencia de los menores en los anuncios publicitarios solo ayuda a que los padres orienten a sus hijos.

“Un papel en una publicidad, no implica que el receptor entienda que eso le pasó a las actrices que lo representan”, explicó la jueza Minaya Pérez en la sentencia.

También solicitan al alto tribunal ordenar a los medios de comunicación abstenerse de colocar esa publicidad, y ordenar a Profamilia a rectificar su campaña acorde con los lineamientos jurídicos. Piden además que se fije audiencia para conocer de la acción.

Iglesia Católica

La Iglesia Católica sometió un recurso de amparo contra la Asociación Dominicana Pro Bienestar de la Familia (Profamilia) para que retire de los medios la campaña publicitaria “Tus derechos sexuales y derechos reproductivos son derechos humanos” bajo el eslogan “Conoce, Actúa, Exige”, que tiene como finalidad crear conciencia sobre la educación sexual, el uso de preservativos, el aborto, el incesto, el acoso y los embarazos de alto riesgo.

En cuanto al fondo de acoger la presente acción de amparo y en consecuencia ordenar garantizar la tutela efectiva al:

a) Derecho a la vida del niño por nacer.

b) El derecho a la dignidad de los niños, niñas y adolescentes, en el respeto y uso de la imagen pública de los menores de edad exhibidos en los spots publicitarios televisivos y de prensa escrita.

c) Derecho de los padres a ejercer la autoridad parental sobre sus hijos de considerar y respetar sus padres.

d) Derecho a la injerencia en el hogar y en la familia, por medio de publicidades comerciales que fomentan la desavenencia y desobediencia familiar entre los padres, hijos e hijas a favor de la familia dominicana y los accionantes en el presente amparo, y en consecuencia se ordene adoptar de las medidas que se indican a continuación o cualquier otra de igual naturaleza.

La iglesia católica solicita que el juez de amparo entienda garantice de forma más eficaz los derechos fundamentales en los presente caso vulnerados.

Ordenar a la entidad no gubernamental Profamilia y a sus directivos, el retiro inmediato de los medios de comunicación televisivo, radial y escrito, de toda la publicidad que enmarca los mensajes que aquí hemos denominado 1, 2, 3 y 4 y cualquier otra vinculación al mensaje que pretendemos erradicar por la presente acción de amparo, toda vez que la misma es violatoria de las disposiciones legales siguientes:

a) Constitución dominicana en sus artículos 37, derecho a la vida del niño por nacer; 5, fundamento de la constitución; 38, dignidad humana, 56, protección de las personas menores de edad y 44, derecho a la intimidad y el honor personal.

b) La declaración universal de los derechos humanos en su articulo3.

c) El pacto internacional de derechos civiles y políticos en su artículo 6.

d) La convención americana sobre los derechos humanos en penalización del aborto.

e) Ordenar a Profamilia y a su junta directiva rectificar su publicidad conforme los ordenamientos jurídicos dominicanos que han sido descritos.

La decisión de la Iglesia católica de someter un recurso de amparo contra PROFAMILIA por su campaña a favor de los derechos sexuales y reproductivos luce como una muestra de debilidad, además de un error táctico.

Ambas cosas son producto de la incapacidad que evidencia la Iglesia tanto la universal como la dominicana de entender e interpretar correctamente el contexto político, social y tecnológico actual, lo que la lleva a un accionar torpe que erosiona su influencia, su prestigio y su poder a un ritmo inimaginable hace apenas algunas décadas.

El problema de fondo parece ser justamente la sobreestimación de su poder e influencia por parte de la jerarquía, que le impide reconocer hasta qué punto la Iglesia se ha debilitado en el mundo actual, aún en los países católicos.

Hasta hace algunas décadas, en países como el nuestro era impensable que una institución, ya fuera estatal o privada, promoviera abiertamente posiciones contrarias a la ortodoxia católica. El control social e ideológico de la Iglesia era tan completo y la cultura democrática tan débil- que el espacio público simplemente no daba acceso a las disidencias, las cuales debían, en el mejor de los casos, canalizarse hacia los márgenes del mundillo intelectual o de las izquierdas semi clandestinas.

Con las aperturas democráticas y el auge de los movimientos sociales de fines del siglo XX, las posiciones disidentes empiezan a demandar acceso a los espacios públicos, a los medios de comunicación, al mundo académico, etc., y la situación empieza a cambiar. Pero todavía durante algún tiempo la Iglesia dominicana pudo contar con que las élites de poder -sobre todo las que controlaban los partidos políticos y los medios de comunicación- se aplicaran la autocensura, primero en aras de “la moral pública”, y luego por temor a sufrir represalias eclesiásticas.

Esta era la época en que la Comisión de Espectáculos Públicos rutinariamente prohibía la exhibición de películas consideradas ofensivas a la Iglesia, en que ninguna organización ‘seria’ ni persona prestante se atrevía a hablar públicamente de aborto terapéutico, en que los escándalos sexuales o financieros de la iglesia ni se mencionaban en los periódicos.

La iglesia católica tiene calidad para accionar porque representa a un sector de la sociedad.

Códigos y textos constitucionales

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