Coherencia Y Cohesión

Aprender a aceptar el fracaso

Forzarse una vida creativa no dependerá de la capacidad de evitar todos los errores, que es lo más común, sino de cómo las personas reaccionan ante ellos. Los entrevistados lograron ganarle a la derrota. Algunos científicos sociales han informado como con éxito superan estos momentos fallidos. A través de investigaciones y entrevistas se destaca el hecho que las perso-nas que reconocen sus errores y los aceptan son más capaces de salir adelante, en casos contrarios es muy notorio el miedo a ser denominado perdedor, esto los lleva a buscar escusas, resaltar lo bueno que son en otras áreas o simplemente desertar en la mayoría de sus experiencias.

En lo leído se señalan dos visiones de inteligencia. 1- la visión fija de la inteligencia en donde no está solo en decir que se nace siendo inteligente, sino que también se puede crear una visión de perfección en uno mismo o en otra persona que hace pensar que <<soy tan inteligente que no debo esforzarme por nada>>. 2- La inteligencia creativa o de crecimiento con la cual a pesar de todos los fracasos que pueda experimentar la persona, es capaz de salir triunfante y no darse por vencida, sino que está constantemente buscando la forma de solucionar problemas y si en el peor de los casos no las haya, cambia de rumbo sin llevar a cuesta sus fracasos.

Maneras rígidas y flexibles de contemplar la vida

El incentivo desde pequeños es un factor importante en el desarrollo y control de emociones. Pues un niño se puede sentir muy interesado en aprender y obtener buenos resultados, hasta que se le hace difícil. Su entorno le repite frases como "tú solías ser bastante listo ¿qué te está pasando?", esto los hace asumir que perdieron y deciden evadir cualquier cosa que los haga quedar como perdedores. En un experimento realizado con niños de 10 años se les repitió la palabra equivocado cada vez que erraban, esto los desmotivó enormemente. Para un niño no es fácil asumir la derrota. Reacciones que no solo se presentan en la niñez, si no, que en todas las etapas de la vida.

La manera de justificar tus éxitos o fracasos influye en la decisión de seguir o renunciar. Si solo buscas culpables lo más proba-ble es que termines renunciando, en cambio, sí reconocer tus errores y los asumes podrás encontrar una solución. En todas partes encontramos formas de medición de inteligencia y al darle valor a esto menos cavamos las capacidades del otro, alu-diendo a que quienes no son capases de cumplir ciertos patrones no son lo suficientemente inteligentes para destacar en la vida y así en cuanto va pasando el tiempo los que no se creen capaces se sienten cómodos con su posición y no se esfuerzan para mejorarlo. La cultura los hace pensar en esto.

El hecho de sentirse desafortunado nos lleva a La irresponsabilidad, no arriesgarse a intentarlo, enviarse mensajes desmotiva-dores, evadir el tema o resaltar lo bueno que somos en otras áreas, al sentirse muy bueno en todo, puedes tomar malas deci-siones como saltarse etapas en el aprendizaje. Aquellos son factores que se repiten en el texto. Es fundamental crear desde niño la curiosidad por leer, informarse, crear conocimiento, conocerse, sentir respeto por sí mismo, ya que estas habilidades son fundamentales para que sean personas capaces de enfrentarse en la vida de la mejor manera ante cualquier eventual fra-caso.

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