ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Comeme Perro

CristianUmayorApuntes21 de Agosto de 2015

94.257 Palabras (378 Páginas)145 Visitas

Página 1 de 378

LOS REGIMENES O SISTEMAS POLÍTICOSNote1.

1.1.- El Régimen Parlamentario: Reino Unido y España

El Régimen Parlamentario surgió en Inglaterra, donde se fue configurando en la medida que el Parlamento fortalecía sus atribuciones frente a los restantes poderes públicos en el siglo XVII para luego expandirse a otros países en el siglo XIX. Como señala Sartori, “el Parlamento, como institución, se fue formando en Inglaterra esencialmente entre 1689 y 1832, después de la Revolución Gloriosa de 1688”.Note2.

Este sistema de gobierno presenta las siguientes características:

El órgano ejecutivo es dual, o bicéfalo, ya que existe un Jefe de Estado, que puede ser un Rey o un Presidente, según si el régimen es monárquico o republicano, con escaso o ningún poder de decisión en el ámbito político y un Jefe de Gobierno (Primer Ministro o Canciller) que dirige un órgano colegiado llamado Gabinete. Algunos sistemas parlamentarios son monárquicos (v.gr. Reino Unido, Suecia, Noruega, Dinamarca, Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo, España, Japón), mientras que otros son republicanos (v.gr. Italia, Alemania e Irlanda).

La única autoridad primaria y legítimamente democrática es el Parlamento, el que goza de “todas las atribuciones centrales del ejercicio de la soberanía”Note3. . Esto significa que no hay otras elecciones populares que aquellas destinadas a elegir a los representantes parlamentarios, excluidas las de carácter local.

El Gobierno lo origina el Parlamento, y más específicamente la cámara política de éste, ya sea por un apoyo explícito de la mayoría de sus miembros, o bien, o por la tolerancia de dicha mayoría parlamentaria a un gobierno de minoría.Note4. Es decir, tanto el Primer Ministro como el Presidente, en caso de haberlo, son elegidos por el Parlamento, esto es, de un modo indirecto, lo cual hace que el parlamentarismo asegure entre el poder ejecutivo y el poder legislativo “un acercamiento constante, una coordinación estrecha, en virtud de la cual, lejos de perseguir su separación, su finalidad precisa a este efecto y su característica, es la de fundar su asociación”.Note5.

El Primer Ministro y el Gabinete no pueden gobernar si no cuentan con la confianza permanente de la mayoría de la cámara política del Parlamento.

La responsabilidad política del Gobierno se hace efectiva a través de dos medios: la cuestión de confianza y la moción de censura. La primera es planteada por el Jefe de Gobierno, generalmente a propósito de la tramitación de un proyecto de ley relevante para el cumplimiento de su programa y su rechazo determina la caída del Gabinete, mientras que su aprobación trae como consecuencia la sanción del proyecto de ley y la continuación del Gobierno en sus funciones. La moción de censura, en cambio, es de iniciativa de los miembros del Parlamento, quienes la proponen durante un debate. Su materialización ocasiona la caída del Gabinete y su rechazo la permanencia de éste.

Como contrapartida, el Gobierno tiene la facultad de disolver la cámara política, mediante el llamado “derecho de disolución”. A través de él se somete a la decisión ciudadana las censuras parlamentarias, solicitando ambos bandos la confianza del cuerpo electoral, el que deberá resolver el conflicto entre el Parlamento y el Gabinete. Esto lleva a Maurice Duverger a caracterizar al régimen parlamentario como aquel en el cual “el Gobierno está dividido en dos elementos, de los cuales uno, el Gabinete o Gobierno en el sentido más estrecho del término, es responsable políticamente frente al Parlamento y posee el derecho de disolver a éste”.Note6.

El Jefe de Estado es políticamente irresponsable, excepto por la comisión de delitos que atenten contra la seguridad y el honor de la Nación.

Los regímenes parlamentarios por antonomasia son, en la actualidad, el de Gran Bretaña y España.

El Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte es una monarquía constitucional y parlamentaria conformada por cuatro países: Inglaterra, EscociaNote7. , GalesNote8. e Irlanda del NorteNote9. . A diferencia de la mayoría de los países, la Constitución británica no se encuentra escrita en un documento sino que sus normas se encuentran sustentadas básicamente por costumbres o convenciones. Sin perjuicio de ello, existen también fuentes constitucionales formales como la Carta Magna (1215)Note10. , el Acta de Habeas Corpus (1679)Note11. , el Act of Settlement (1701)Note12. , el Act of Union with Scotland (1707)Note13. y las Parliaments Acts (de 1832, 1911 y 1949)Note14. . Las convenciones, por su parte, corresponden a prácticas constitucionales que, aunque no son legalmente obligatorias, son consideradas indispensables para la actuación del Gobierno. La mayoría de ellas fueron producto de las soluciones institucionales que se daban frente a conflictos políticos determinados, soluciones que se transformaron en verdaderos precedentes para el futuro.

Si bien en el sistema parlamentario del Reino Unido no existe una separación estricta de poderes, ello no implica que se desconozca el concepto fundamental de la teoría de Montesquieu, de que las funciones públicas no pueden estar en las mismas manos si se pretende evitar la tiraníaNote15. . Lo que ocurre es que, salvo el caso del poder judicial al que se le reconoce una amplia independencia, en Gran Bretaña el sistema de pesos y contrapesos opera más bien dentro de las instituciones que entre ellas. Esta es, a mi modo de ver, una de las características más singulares que distinguen a los regímenes parlamentarios de los presidenciales, cuyas consecuencias políticas tendremos oportunidad de comentar más adelante. Por ahora, bástenos hacer presente que, en Inglaterra, la autoridad legislativa del Parlamento se encuentra dividida entre Cámara de los Lores y la Cámara de los Comunes; el poder ejecutivo compartido entre el Primer Ministro, su Gabinete y el Monarca, los dos primeros bajo la estrecha fiscalización y crítica de la oposición política en el Parlamento, la cual en Inglaterra corresponde a una verdadera institución; la administración estatal férreamente inspeccionada por el Parlamento y con amplios márgenes de independencia frente al ejecutivo; los gobiernos locales operando como suplemento del Gobierno central y los sectores industriales del Estado gozando de amplia libertad frente al Gobierno de turnoNote16. .

Para entender el régimen político imperante en Inglaterra es preciso tener presente que la preeminencia del Parlamento no se da sólo a nivel institucional, sino que también se advierte con mucho ímpetu al analizar el papel esencial que dicho órgano cumple en la materialización de los tres conceptos sobre los cuales descansa todo el entramado político británico: la soberanía legal parlamentaria, la soberanía política del pueblo y el rule of law.

En efecto, el sistema británico opera, en primer lugar, sobre el principio de la soberanía legal del Parlamento, el cual a su vez descansa sobre el reconocimiento de la soberanía política final del pueblo. Ello pues es el Parlamento el que tiene el poder supremo y exclusivo para hacer las leyes, de ahí su soberanía legal, pero, dentro de él, la verdadera autoridad legislativa descansa sólo en aquella cámara cuyos miembros son elegidos popularmente y en intervalos regulares, con lo cual se asume que la soberanía política última reside en el pueblo. La supremacía parlamentaria permite entonces al Parlamento la dictación de cualquier ley que sea su voluntad. En esencia, esto significa que no existe diferencia alguna entre la legislación ordinaria y la constitucional, lo cual distingue a Inglaterra de la gran mayoría de los países cuyas constituciones jerarquizan sus leyes de acuerdo a su importancia y establecen mecanismos más o menos rígidos para modificarlas. El Parlamento británico es, por el contrario, completamente autónomo, pudiendo aprobar, derogar, modificar o suspender temporalmente cualquier ley, incluidas las referidas a los derechos fundamentales y aún cuando ello implique alterar su propia orgánica o prolongarse indefinidamente en sus funciones, como lo hizo a propósito de las dos grandes guerras en 1914 y 1939Note17. . Finalmente, del hecho de que no exista diferencia entre la ley ordinaria y la constitucional se deriva otra importante consecuencia: la inexistencia de tribunal u órgano alguno que juzgue si el Parlamento respetó o no el procedimiento requerido para dictar una norma constitucional. Vale decir, en Inglaterra es completamente desconocida la institución de un Tribunal Constitucional, cuya labor es entregada completamente al Parlamento.

En cuanto a la noción de rule of law, éste corresponde a un conjunto de principios plenamente arraigados en la cultura política británica, cuyo desarrollo ha sido producto de circunstancias y prácticas políticas centenarias y cuya idea central es que el sistema político debe proveer a los individuos de garantías efectivas tanto contra la anarquía y el desorden como contra la opresión y el capricho de la tiranía.

Si bien de ello podría concluirse que se trata de un concepto restrictivo de la autoridad del Parlamento, lo que en realidad ocurre es que, por el contrario, fortalece su posición relativa frente a los restantes órganos públicos, atendida su calidad de generador exclusivo de la legislación. Ello por cuanto, como su denominación ya lo insinúa, el rule of law deposita una confianza sublime en la ley y en el mandato que prescribe, de manera que cualquiera sea la legislación que dicte el Parlamento ésta deberá ser aplicada. A partir de esta idea fundamental, el rule of law desarrolla otras muchas, como la necesidad de certeza jurídica por parte de los ciudadanos, la fundamentación legal de toda supresión o limitación de la libertad individual, el establecimiento legal previo de las penas y del procedimiento de su asignación y una concepción de la justicia que exige que la ley sea interpretada en su propio mérito y sin influencias externasNote18. .

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (616 Kb) pdf (3 Mb) docx (308 Kb)
Leer 377 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com