DISCURSO FIN DE CICLO

Buenos días honorable presídium, padres de familia, profesores y compañeros alumnos.
Hay formalidades que no se puedes pasar por alto.

Quisiera aprovechar que nos encontramos aquí, para dar un agradecimiento especial a los profesores que participaron en nuestra formación, aquellos profesores que se preocuparon por que aprendamos y nos tuvieron tanta paciencia y varias veces fueron más que eso y se convirtieron en grandes amigos nuestros.

¡Por eso gracias!

Tres años, algunos más, pero por fin estamos aquí. Terminamos un ciclo, cerramos un capítulo, nos despedimos de personas y lugares que tal vez ya no frecuentaremos, pero que han formado parte de nuestra vida por algún tiempo. Crecer duele. Pero al mismo tiempo no podemos evitar entusiasmarnos por la nueva etapa que comenzaremos. Nuevos sueños, nuevas metas y retos, nuevas personas y nuevos lugares. La aventura aún continua. En la escale todavía hay peldaños por subir.

El ciclo de la vida continua, y muchas veces cada final es un nuevo comienzo, una libreta en blanco, una nueva oportunidad, ser como siempre hemos querido ser, hacer lo que siempre hemos querido hacer, cambiar lo que siempre hemos querido cambiar.

Tiempo de graduación es tiempo de despedida, comienzas a darte cuenta  de que disfrutabas las clases de ecología, las gorditas en el receso, te atemoriza pensar que harás ahora sin el nerd de la clase que te explicaba las ecuaciones y te preguntas si la vida no será muy aburrida sin el molesto bullyng. Habrá compañeros que en efecto, no volverás a ver, pero muchos de ellos podrán seguir siendo parte de tu vida, y algunos de ellos te acompañarán por siempre. No importa donde estén, no importan cuanto tiempo pase, se buscará, se encontrarán y formaran parte uno de otro de su misma esencia.

Durante todo este tiempo aprendimos a valorar los ochos. Descubrimos que es difícil escoger una carrera pero es más saber que queremos hacer de nuestras vidas. Que existen muchos y diferentes métodos de estudio, que no le podemos caer bien a toda la gente, que encontraremos diferentes ideologías y tenemos que aprender a respetarlas todas y que el prejuicio hay que dejarlo aunado.
Conocimos a todo tipo de personas; con algunas pasamos tiempo, con otras no, hubo compañeros que tal vez nunca les hablamos, y que tal vez quisiéramos haber conocido mejor; también hay amigos de toda la vida, esos que estuvieron con nosotros cuando entramos y siguen con nosotros ahora que salimos. Perdimos y ganamos compañeros, por una pelea perdimos tal vez a nuestro amigo de toda la vida, por una casualidad conocimos al que ahora es nuestro mejor amigo; conocimos profesores que más allá de frustrarnos y de explicarnos alguna materia, nos enseñaron tantas cosas, dejando ese ideal, esa reflexión, cambiando tal vez nuestra vida; las cosas se dieron y ahora llegamos a este momentos como unas personas totalmente diferentes a las que entraron.

Hoy nos graduamos. Ese momento que todos queríamos que llegue cuando terminamos nuestro primer semestre en el COBAEM, pero que cada vez que se acerca no queremos que termine. Muchos se quedaron en el camino, nos consta, otros se integraron, otros estuvieron poco tiempo y tal vez ni nos acordamos de ellos, pero los que estamos aquí, lo logramos.

“Intenta ser siempre una gran versión de ti antes que una mala copia de otro” bien dice Judy Garland.

Hay muchas personas a quien agradecer. Primero que nada a la institución por darnos la oportunidad. También, es necesario agradecer a esas personas que hacen del COBAEM lo que es, al director, administrativos y profesores, son ustedes los que nos hacen llegar hasta aquí, los que nos preparan para lo que viene después de esto.

Pero si a alguien hay que agradecer es a nuestros padres, tíos, abuelos y hermanos que nos apoyaron en esta etapa de nuestras vidas.
Compañeros, el agradecimiento es para nosotros. Miles de personas han pasado por aquí y cada una de ellas se ha llevado y ha dejado algo. Nosotros nos llevamos conocimiento, decisiones; pero dejamos recuerdos, todo lo que vivimos en el COBAEM, risas, desesperaciones, corajes, diversión. Dejamos compañero, maestros todos aquellos que nos ayudaron a vivir esta etapa y que se vuelven tan definitivos para nuestra vida.

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