EFECTOS DE LA GLOBALIZACIÓN Y TRANSFORMACIONES POSITIVAS

Laura María Angulo Palacios         Procesos de Globalización

Iván Andrés Salamanca Quintana         17/09/2015

EFECTOS DE LA GLOBALIZACIÓN Y TRANSFORMACIONES POSITIVAS

     Algunos piensan que la globalización es algo inexistente, y es intrínsecamente un concepto que no es llevado a la realidad, otros proponen que el estado-nación está por acabarse, ya que los estados pierden su soberanía gracias al ámbito globalizador el cual tiene un alcance masivo. Pero ninguno de estos se acerca a lo que estamos viviendo hoy en día, ya que no toma en cuenta aspectos como la realidad y las garantías. Es correcto decir, con tan solo mirar alrededor que las cosas no son lo que eran hace 50 años, por no ir más hacia atrás, pero aun así erróneo pensar que el estado-nación va a desaparecer en consecuencia de estos cambios. Teniendo en cuenta que las relaciones internacionales son las interacciones entre estados y la globalización como un proceso histórico, de interconexión e intercambio cultural, religioso, económico, político, ideológico y que tiene un objetivo creciente en la comunicación y la interdependencia entre los distintos países del mundo, el estado-nación está sufriendo un proceso de transformación como ya lo ha hecho antes, sin embargo, cabe decir que su impacto internacional es mayor.

     La globalización permite que se estrechen los lazos en las relaciones internacionales, a su vez que transforma a los actores (estado-nación), mas no llevan a su destrucción de estos  ni reduce su importancia.

     A través de la historia hemos podido verificar que el estado tiene una característica adaptativa, por lo tanto está en constante cambio, así como la sociedad, y los grupos humanos también. Uno de los puntos clave para cambios en el estado fue la ilustración, ya que como se menciona repetidamente fue el momento donde empezamos a pensar por nosotros mismos y ese desprendimiento de los lineamientos a los que estamos sometidos generaron un giro donde predomino el razonamiento y las ideas propias, y los choques de ideologías, produjeron distorsiones fuertes que repercuten a nuestro hoy en día. La cultura y los grupos humanos son las maquinas que llevan a los cambios, el estado necesita mantener un modelo base, y por lo tanto con ciertas transformaciones se dan garantías para que el pueblo se sienta satisfecho. Giddens (2007) afirma: “La globalización es la razón del resurgimiento de identidades culturales locales en diferentes partes del mundo” (p.9). Las identidades culturales son muy importantes hoy en día ya que, a diferencia de como la mayoría de personas piensa, se vuelven cada vez más fuertes y con unas raíces más profundas. Giddens en su texto nos explica como realidades que creemos permanentes están expuestas a un constante cambio, las tradiciones son creadas y además se ven influenciadas a través del tiempo a variar, manteniendo unos principios, pero con reformas visibles. Gracias a la globalización es que se logra afianzar las tradiciones y de esta manera, teniendo sus raíces claras es fácil darlas a conocer y aceptar el intercambio con otros, y es en gran medida una “colonización inversa” donde la influencia se da traspasando fronteras.

     En  el estado neoliberal, modelo actual, se han dado transformaciones culturales necesarias para mantener el modelo, por ejemplo, las garantías a las minorías, a las mujeres y demás grupos antes rechazados, excluidos y desprotegidos que no entraban a hacer parte del estado, y por lo tanto de la parte global e internacional, el conservadurismo donde la religión era el punto de partida, o por lo menos un pilar decisivo también se deja atrás para proveer convivencia social, en la cual dientes grupos pueden convivir entre sí. Los medios de comunicación masiva han logrado difundir y dar a conocer creencias dientes, y logran que el estado pierda soberanía en las fronteras al no poder controlar el flujo de información que es cada vez más creciente y asequible para casi cualquier individuo.

     La tradición aquí es meramente la sombra de la modernidad, una elaboración poco plausible que puede desecharse fácilmente (Giddens, 2009, p.20).Gracias a la globalización es que se logra afianzar las tradiciones y de esta manera, teniendo sus raíces claras es fácil darlas a conocer y aceptar el intercambio con otros, y es en gran medida una “colonización inversa” donde la influencia se da traspasando fronteras. La comunicación y las tecnologías, son otros de los aspectos desde los que podemos ver la adaptación y transformación del estado, ya que no se pueden cerrar las fronteras, como antes se hacía, y el intercambio de conocimiento es cada vez mayor, los medios pueden mover masas y la información es ahora asequible para casi cualquier individuo.

      Uno de los puntos base del estado nación es la soberanía. Con las organizaciones internacionales una parte de la soberanía es cedida, y aunque no se pierde ya no es la misma.

Con la presencia de estos grandes sistemas globales, es natural que haya una cierta pérdida de autonomía local.

     Por otra parte, la globalización ha creado una forma nueva de ver el mundo, ya que estamos más conectados que nunca, ya nada está muy lejos de nuestro alcance y es precisamente eso lo que hace que lo que está más cerca de nosotros, lo tengamos que enraizar para tenerlo como parte de una identidad especial y no ser considerados “ciudadanos del mundo” en el que todas las personas piensan, visten, hablan, comen exactamente lo mismo. Gracias a la globalización nos damos cuenta de la importancia de nuestra cultura, que aunque no tenga una larga tradición, si nos sentimos identificados con ella y es gracias a esa cultura, que la forma en que interactúan diferentes actores de las relaciones internacionales se convierte en algo más amplio. La globalización permite que nuevos actores entren a las relaciones internacionales para aportar diferentes perspectivas frente a diferentes temas. Por ejemplo permite a países en vías de desarrollo protestar y hacer escuchar su voz gracias al desarrollo que trae la globalización. La globalización es la herramienta clave para que los actores de las relaciones internacionales tengan una fuerza mayor y se desarrollen positivamente.

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