Educación

Los paradigmas y postulados del pasado, así como fundamentos y creencias tradicionales, vienen siendo remplazados de manera muy rápida por avances científicos y tecnológicos, descubrimientos y nuevas posturas y visiones respecto del futuro.

Ya no se trata de remendar “viejos conceptos”. Se deben reemplazar a las viejas metodologías, para poder identificar los factores de vulnerabilidad de niño, jóvenes y adultos de las distintas y diferentes comunidades.

Antes usábamos la vieja concepción de currículo, hoy una nueva ubicación en la dimensión de futuro nos lleva a los diseños de formación.

Uno de los factores que es preciso identificar, abordar y profundizar es el que ha venido construyendo desde las neurociencias, los estudios sobre cerebro humano y el comportamiento de los individuos, como referente de los buenos procesos de formación. Permiten saber con cierta aproximación lo que pasa cuando alguien aprende y la forma como se desarrollan las habilidades en los humanos.

La oportunidad educativa tiene que ver con procesos formativos que permitan la estructuración cognitiva, con las condiciones internas de las personas y con las condiciones externas o los factores que coadyuvan y conforman un todo formativo.

Un segundo factor es la Bioética, todo aquello que guía de manera racional las decisiones y los comportamientos desde una construcción de valores y principios fundamentados en las relaciones del ser humano con todo el universo.

El tercer factor tiene que ver con la Economía en el sentido de una nueva economía, ya que le modelo tradicional ha hecho muy miserable la vida de muchos y ha arruinado a los países.

Las innovaciones disruptivas, es preciso considerar estos avances, no sólo como herramientas, si no como verdaderas plataformas, es decir, como dimensiones y visiones desde las cuales se puedan plantear procesos formativos coherentes con las dinámicas del futuro.

La nueva Educación del futuro es donde los nuevos maestros deben reflexionar para hacer una transformación positiva. El currículo, podría ser transformado por un diseño de planes generales de formación en donde la exposición a situaciones sea la esencia de los procesos formativos.

El siguiente artículo nos invita hacernos las preguntas que han surgido y reflexionar para actuar,¿ Qué hay que hacer con los niños que tienen dificultades para aprender?,¿Qué hay que hacer con los niños y los jóvenes que tienen dificultades para aprender?.

Esta comprensión se dio en el terreno de la educación de jóvenes que tienen dificultades que tienen los jóvenes y los adultos que por efectos de la inequidad quedan fuera de la educación regular y oportuna.

Surgen varias líneas de investigación: Evaluación de las competencias profesionales básicas de docente, funciones cognitivas, operaciones mentales y criterios de mediación.

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