El Proyecto Arquitectónico

Entendemos que la base fundamental de un arquitecto son sus proyectos, pero a su vez son muchos los interrogantes que se nos presentan como: ¿Por qué la insistente presencia del proyecto en la arquitectura?, ¿no se puede hacer arquitectura sin proyectos?, ¿Qué es un proyecto?, ¿Cómo se hace?, y para resolverlos debemos conocer en qué consiste un proyecto y los factores que hay que tener en cuenta para iniciarlo.

Transformar la realidad.

Un proyecto es la conclusión de ciertas necesidades humanas mediante un ejercicio intelectual de diseño arquitectónico, pero también puede ser el planteamiento de relaciones espaciales.

En la arquitectura moderna existes tres conceptos de proyecto muy distintos pero a su vez complementarios, cuando nos referimos a proyecto, podemos estar refiriéndonos al deseo de creación de una realidad en el plano social, económico, político, donde la arquitectura tiene un campo de acción concreto. Siendo más específicos el proyecto es la serie de actividades que se realizan para crear una obra arquitectónica. Pero también podemos definir el proyecto como el conjunto de dibujos, de planos, de textos, de documentos que se necesitan para ejecutar la obra.

El proyecto como creación

El proyecto nace como el primer desafío del hombre, con el problema de resolver unas necesidades, creando algo que no existía. Así inicialmente el proyecto es un deseo por modificar el entorno donde intervienen factores sociales, políticos, económicos y culturales. La intervención de un técnico o persona encargada de llevar a cabo el proceso de desarrollo del proyecto es fundamental ya que este debe definir: la forma de actuar, evaluar costes, establecer plazos, valoras los impactos etc.

El proceso del proyecto.

el proceso de realización del proyecto es algo complejo ya que se divide en diversas actividades: análisis del programa, reconocimiento del lugar, revisión de casos similares, estudio de materiales y técnicas a implementar, ideación de soluciones, elaboración de maquetas, representación de alternativas, dialogo con el cliente, elección de la solución adecuada, dibujo de los planos, diseño y calculo de estructuras, definición de soluciones constructivas, diseño y calculo de instalaciones, elaboración de presupuestos, definición de condiciones técnicas, redacción de la memoria. El proceso del proyecto quedara plasmado en un documento, el cual ayudara para llevar a cabo la consecución de la obra dejando material que fue instrumento de trabajo para definir el proyecto: croquis, maquetas de trabajo, fotomontajes, planos modificados, cálculos entre otros.

Este proceso no es nada simple, por el contrario es muy complejo, por ello siempre tenemos que tener claras nuestras ideas para saber plasmarlas. El proceso de diseño no puede ser establecido con un carácter general, debido a que cada arquitecto desarrolla su forma de trabajar, adapta sus instrumentos y concibe el proyecto de manera distinta. En la cultura moderna la arquitectura se encuentra unida al proyecto, por lo que podemos decir que proyectar es crear arquitectura. Por ello el proceso de diseño es la base de nuestra actividad como arquitectos.

El proyecto como documento.

al final del proceso del proyecto llegamos a un documento, dentro del cual se ubica la suma de determinaciones y representaciones graficas o escritas que permiten construir la obra proyectada, pero al mismo tiempo es la base para la solicitud de permisos administrativos, la definición legal de contenido para los contratos que en la obra se establecen , la formación del proyecto al cliente, al promotor o a los futuros usuarios y un testimonio documental de cómo se ha gestado y realizado la obra por lo que se hace importante su exactitud y correcta redacción.

Según el código técnico de la edificación, las partes que

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