El Reto de la Transparencia y el Combate a la Corrupcion

EL RETO DE LA TRANSPARENCIA Y EL COMBATE A LA CORRUPCIÓN EN MÉXICO

Introducción

La situación actual del país, está en una etapa crítica, la corrupción ha tomado la vida de la población y ha hecho que temas esenciales como lo son la justicia, la transparencia y en ocasiones la libertad, se vean opacadas y no aplicadas en situaciones donde deberían impartirse. La corrupción no ha hecho más que dar a conocer los pocos valores éticos con los que las personas cuentan en la actualidad, muchas veces esto se nota en las personas con cierto grado de autoridad, en aquellos que deben emitir juicios. Muchas veces, el poder de las personas con recursos, sobrepasa la verdad, cegando aún más a un ya muy subestimado sistema de justicia. Desafortunadamente la voz de la población en el combate a este tipo de conductas inmorales ha sido ignorada por aquellos que tienen los medios para defender sus sucios actos sin importar el daño que estos ocasionan.

Podemos definir a la corrupción, como una práctica consistente en la utilización de las funciones y medios de aquellas en provecho, económico o de otra índole, de sus gestores o como la acción y efecto de corromper.

Como definición personal, puedo decir que es la forma o acción en la que, una persona altera u omite información que puede afectar sus intereses o inclusive puede provocar un beneficio hacia sí mismo o hacia otra persona, a costa de, muchas veces, la verdad y la justicia.

La corrupción es un fenómeno que se da a nivel mundial, no importa el avance o el nivel socio-económico que se tenga, es un fenómeno que se ha ido esparciendo e inclusive, ha ido creciendo.

Para el escritor e historiador Enrique Krauze (2015), la injusticia, la violencia, la impunidad y la corrupción son los problemas centrales de México; gobiernos federal, locales  y estatales corruptos, falta de instituciones judiciales, de policías confiables, de jueces, ministerios públicos y procuradurías.

En México, se ha vivido una etapa en la cual, la corrupción se ve en todos los niveles gubernamentales, según el portal Forbes, México se ubicó en el lugar número 103 de un total de 175 países analizados en todo el mundo, en el Índice de Percepción de la Corrupción, debido a la posición de estancamiento en la que se ha mantenido por casi una década.

Aunque una posición 103 no parece alarmante, se debe considerar que esto, es posiblemente una cifra de un estudio hecho “en la superficie” del sistema. Como mexicanos, hemos sido testigos de que cada día, hay más y más pruebas e involucrados en casos de corrupción.

Para la investigadora Maria Amparo Casar (2015), México muestra un nivel de percepción de la corrupción elevado en prácticamente la totalidad de las instituciones, de una investigación que esta tomo de base del año 2013, se establece que, de una consulta hecha a 114,000 personas, un 91% establecía que veía corrupción en los partidos políticos, 90% en la policía y un 87% en los funcionarios públicos.

El tema de la corrupción, no es un caso nuevo de este milenio, es un tema que se ha venido acarreando desde décadas e incluso siglos atrás, solo que, ahora por las nuevas tecnologías de información y comunicación, como el internet, y más específicamente, las redes sociales, estos han podido ser comentados masivamente, sin que estos puedan ser impedidos o censurados por instituciones o personas con intereses, aunque actualmente, han habido intentos por hacerlo, por ejemplo, con el reciente intento del senador Omar Fayad al proponer la ya odiada ley Fayad, la cual, no causo más que el descontento y rechazo de la población civil, pues contemplaba, que el uso de cualquier dispositivo con conexión a internet, podría ser considerado como un delito, entre otros intentos de ley.

México en la actualidad ha vivido inmerso en la corrupción, desde los sistemas de justicia o gubernamentales, hasta los niveles en contacto a la población. Hoy en día, se han visto casos donde las personas tienden a aplicar la justicia por “propia mano”, pues ya no se confía en la que debería ser nuestra garantía de justicia.

Muchos de los encargados de impartir justicia o deben emitir juicios, son en los que la corrupción suele ser más evidente, muchos casos que llegan a los tribunales son en contra de grandes empresas o persona influyentes, que, valiéndose de sus recursos, influyen en las decisiones y sanciones que se toman al analizar pruebas y comentarios de posibles testigos.

Inclusive, es aún más notorio en la calle, en la vía pública, los funcionarios que deberían procurar la justicia y la seguridad de la población, son los que han sido involucrados en casos de corrupción sumamente notorios, a través de videos grabados por ciudadanos, se ha visto que policías, detienen por cualquier motivo, aun así sea el más insignificante o injusto a los conductores, y estos, de forma muchas veces arbitraria, piden las llamadas “mordidas” para no dar las multas o ejercer las acciones legales.

Hablando de eso, se puede también denunciar la parte culpable que tiene la población en este tipo de actos, las personas muchas veces permiten que se lleven a cabo estas conductas o también la incitan, con tal de evitar pagar las multas y todos los procesos administrativos que deban hacerse para realizar los pagos y, en caso de confiscación de material, su recuperación.

Hay casos donde la población debe poner aún más atención a este tipo de casos, por ejemplo, cuando estos afectan los intereses de la población, toman dinero proporcionado por los ciudadanos a través de los muy altos impuestos y hacen con ello lo que quieren, un ejemplo claro, los proyectos destinados al mejoramiento de la infraestructura del país o construcción de instituciones que sirvan para el mejoramiento de la calidad de vida de la población, donde van destinados grandes cantidades de recursos, tanto materiales y económicos, que terminan en proyectos de muy mala calidad, y con los recursos en bolsillos de aquellos que se suponía que llevara el control para verificar el buen uso de ellos, dando comprobantes falsos para justificar la desaparición del dinero.

La corrupción se empieza a manifestar muchas veces en la vida joven de los mexicanos, los jóvenes viven dentro de círculos donde el soborno y por así llamarlos malos ejemplos son cosa de todos los días, donde los padres que son su figura de autoridad tienen mucho que ver. Por simple lógica los jóvenes, al tener estos ejemplos en la etapa donde solo aprenden, lo verán como algo normal, y lo llevaran a la práctica en su vida adulta.

La corrupción está presente aun en los más mínimos detalles, en las actividades cotidianas de todos los mexicanos, puedo citar algunos ejemplos, como por ejemplo, el joven que le da algo a algún profesor a cambio de alguna buena nota, al conductor que soborna a un oficial de tránsito para evitar la respectiva multa por alguna violación al reglamento de tránsito, al que soborna a un jurado para ganar un concurso, al que soborna a un árbitro en un partido, entre muchas otras. En pocas palabras, está inmerso en todos los ámbitos de la sociedad, en lo cultural, lo académico, lo deportivo, lo jurídico, e inclusive, muchas veces en lo que concierne a la salud, aunque esto ya englobaría otro tema a debatir.

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