Elena Cano

Propósito del Autor

Elena Cano a través de este libro, pretende dar a conocer las necesidades de cambios que debe enfrentar un docente en el ejercicio de sus labores, identificando en él mismo las competencias necesarias o imprescindibles que se deben poseer, pero sobre todo tener clarificado qué es una competencia.

En mi opinión el propósito del autor de este libro es conseguir una mejora continua en la calidad de la docencia, así nosotros como profesores debemos saber enseñar, ser empáticos, ser competentes es hacer cosas importantes con lo que se sabe o se conoce y no sólo "demostrar" que se posee tal conocimiento. Para poder ser un profesional competente, es necesario desarrollar la habilidad de solucionar problemas y como toda capacidad de pensamiento, se halla indisolublemente unida a la idea de un "constructo", es decir a la percepción de que una competencia se construye y se va desarrollando.

Resumen

Este libro aborda diferentes competencias especialmente importantes en el ámbito de la profesión docente: las capacidades de planificar y organizar el propio trabajo, de comunicarse, de trabajar en equipo, de afrontar conflictos desarrollando habilidades interpersonales, de utilizar las nuevas tecnologías, de revisar constantemente nuestro trabajo y de hacer todo ello con responsabilidad y realismo, conociendo nuestras posibilidades y nuestras debilidades.

Competencias profesionales

1. Básicas o transversales: esenciales para el desarrollo vital de todos los individuos

2. Específicas: se derivan de la existencia de un contexto o trabajo complejo

Competencias docentes

1. Competencias interpersonales

• Comunicación: Es esencial en nuestras vidas, no es solo transmitir información, sino una forma de relacionarnos.

• Trabajo en equipo: dinamiza el trabajo, lo vuelve agradable y gratificante. Conjuga lo mejor de cada persona.

• Liderazgo: Es esencial ya que debe ser el rol del educador para poder guiar a sus alumnos.

2. Competencias cognitivas

• Resolución de problemas: Se debe adoptar una postura de negociador.

• Pensamiento crítico: Pasa fundamentar el porqué de las cosas (investigación – análisis)

• Razonamiento cotidiano: Para resolver y saber actuar ante diferentes situaciones.

• Creatividad: Ayuda al cambio y a formar personas ricas en originalidad y flexibilidad ofreciendo herramientas para la innovación.

3. Competencias instrumentales

• Gestión: planificación responsabilidad.

• Instrumentales (idiomas, informática, documentación).

También es importante la competencia en la expresión oral y escrita.

Es importante el uso de nuevas tecnologías de la información y comunicación, para integrarse a la sociedad del conocimiento.

El autoconcepto, la base de nuestro trabajo.

La autoevaluación, el camino a la mejora.

Evaluación Crítica

1) En realidad para mi si es significativo, ya que ponen de manifiesto la diversidad de competencias que deben trabajar en cada uno de los diferentes niveles educativos, de igual forma se establece un serie de competencias que como requisito indispensable, debe poseer o desarrollar el docente, a fin de tener la herramientas suficientes para dar respuestas a una sociedad de constantes cambios.

Pretende introducir al tema sobre el desarrollo de competencias en los alumnos y el profesorado, reconociendo también las exigencias y dificultades que se pueden encontrar durante el desarrollo de dicho proceso.

Cada vez son más constantes y por lo tanto más exigentes los cambios en el mundo actual, que demandan de los docentes el desarrollo de nuevas competencias y habilidades, para poder ofrecer a nuestra sociedad una serie de respuestas adecuadas a sus demandas de aprendizajes en el plano de la educación.

Cambios que de una u otra manera han dejado una marca importante en los maestros, induciéndolos de forma comprometida y decidida al desarrollo de nuevas competencias y habilidades que deben ser congruentes con las tareas que dentro de cada institución educativa se deben de realizar.

2) Este libro en lo personal es algo nuevo para mí y considero que es sumamente importante, ya que al plantear una serie de actividades a realizar para cada una de las competencias mencionadas por la autora, permite a los lectores hacer un ejercicio de autoevaluación como vía para la mejora y comprender que el desarrollo de las competencias sugeridas en el texto, son necesarias para mejorar nuestro quehacer cotidiano en las aulas y optimizar con ello el proceso de enseñanza - aprendizaje como parte de nuestra actividad docente.

3) Este libro no pretende aportar una nueva y original teoría sobre las competencias docentes. Antes bien, se trata de resumir lo ya existente y darle la forma necesaria para que los lectores, expertos o no en la materia, tengan un punto de partida sólido antes de adentrarse en este amplio y complejo mundo. De hecho, se trata, como lo dice el subtítulo del libro, de una “Guía para la autoevaluación y el desarrollo de las competencias del profesorado”. Dedicada exclusivamente al estudio de las competencias docentes, aportando consejos que todos los profesores deberíamos tener siempre en cuenta ante los retos y las exigencias de la sociedad, los centros escolares y los propios estudiantes. Es consciente de que las circunstancias ambientales y sociales que tanto nos condicionan; pero, al mismo tiempo, está convencida de que no determinan nuestras posibilidades de actuación.

4) Sería importante conocer más de fondo sobre el tema tratado en el libro ¨Cómo mejorar las competencias de los docentes¨, pero desafortunadamente no he tenido la oportunidad de leer otra bibliografía relacionada con el tema.

5) En realidad si recomiendo la lectura de este libro, es manejable, no demasiado extenso, con una portada atractiva para mí gusto. Una vez en su interior, antes de entrar en su contenido específico, se observa, asimismo, el deseo de la autora de seducir al lector poniendo ante su vista unos titulares de gran tamaño, a los que le siguen esquemas, resúmenes, clasificaciones de fácil memorización, etc.

Además algo que me gustó mucho fue que analiza la comunicación, concediéndole la importancia que merece. Nos ayuda a relacionarnos. Por obvio que parezca. De ahí que nos proporciona una serie de ideas con el fin de mejorar dicha comunicación. Ideas, en apariencias sencillas, como: escuchar con atención a los demás (sonreír, asentir con la cabeza), intentar ser empático (poniéndose, si es preciso, en el lugar del otro), ponderar las consecuencias de nuestras frases, estudiar el mejor momento de decir algo, y, finalmente, analizar siempre la audiencia a la que nos dirigimos. Estos consejos, sin duda valiosos, traen consigo unas propuestas para mejorar la comunicación oral. Es preciso, ser natural y no fingir ser una persona que no se es: “Una persona puede ser tímida, pero puede aprender a mirar a los ojos a su interlocutores; otra persona puede poseer una personalidad arrolladora, pero puede aprender a dejar a hablar a los demás” (p. 71).

Nos brinda una serie de consejos prácticos a la hora del instante supremo de comparecer ante un auditorio, ante un público que no nos va a dejar de observar, que lo espera todo de nosotros, de nuestras explicaciones. Nos da propuestas para intentar identificar conflictos; captar la máxima información acerca del tema; abordarlo; buscar y proponer soluciones. Este libro, resulta de gran utilidad porque aborda asuntos que nos conciernen a todos, no sólo a los docentes, puesto que la educación, como se ha venido diciendo por activa y por pasiva, es un asunto en el que no está excluido ningún sector de la sociedad.

El libro es de suma importancia para los docentes ya que les ayuda a ser un completo agente de cambio, tener una constante iniciativa por seguir actualizando los conocimientos adquiridos, en beneficio de los estudiantes, pero sobre todo para ser un pilar en la construcción de nuevos restos que demanden en los niños y adolescentes nuevas propuestas y trabajo, despertando en cada uno de ellos un pensamiento creativo, donde se sienten las bases de nuevos y mejores aprendizajes.

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