Estrategia de la seguridad nacional

ANALISIS de las ESTRATEGIAS de SEGURIDAD NACIONAL de ESTADOS UNIDOS

(Iván F. Mérida A.)

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Abril 2016

ESTRATEGIAS de SEGURIDAD NACIONAL de ESTADOS UNIDOS

 (2002, 2006, 2010, 2015)

La Estrategia de Seguridad Nacional (ESN) de septiembre de 2002 inicia su texto reconociendo que: “Los enemigos en el pasado necesitaban grandes ejércitos y grandes capacidades industriales para poner en peligro a Estados Unidos. Ahora, sombrías redes de individuos pueden llevar enorme caos y sufrimiento a nuestras (sus) costas por menos de lo que cuesta comprar un solo tanque.”^[1] 

Se hace un énfasis en que se opondrán fuertemente a la agresión de cualquier gran poder, pero también se afirma que se usara aquel momento de oportunidad para extender los beneficios de la libertad a través del globo, llevando democracia, desarrollo, libre mercado y libre comercio a cada esquina del mundo^[2]. Se afirma que:

Los eventos del 11 de septiembre de 2001, nos enseñaron que los estados débiles, como Afganistán, pueden plantear un peligro a nuestros intereses nacionales igual que los estados fuertes. La pobreza no convierte a las personas pobres en terroristas y asesinos. Sino al contrario la pobreza, las instituciones débiles y la corrupción pueden hacer que los estados débiles sean vulnerables a las redes terroristas y a los carteles de la droga dentro de sus fronteras.^[3]

En la ESN de 2002 se plantea que sus metas para el progreso son la libertad económica y política, relaciones pacíficas con otros estados y el respeto por la dignidad humana. Para llegar a estas metas se plantea: defender las aspiraciones por la dignidad humana, fortalecer las alianzas para derrotar al terrorismo trabajando en la prevención de ataques conjuntamente a los aliados, trabajar con otros el apaciguamiento de conflictos regionales, prevenir que los enemigos amenacen mediante el uso de armas de destrucción masiva, encender una nueva era de crecimiento económico a través de los mercados y el libre comercio, expandir el circulo de desarrollo por las sociedades abiertas y la construcción de la infraestructura para la democracia, desarrollar agendas de acción cooperativa con otros centros de poder mundial y transformar las instituciones de seguridad nacional norteamericanas para encarar los retos y oportunidades del siglo XXI.^[4]

Respecto al terrorismo se afirma que hay terroristas entrenados y que hay células en Norte América, Sud América, Europa, África, Medio Oriente y en Asia^[5]. Por lo que se buscara destruir el alcance global de las organizaciones terroristas, atacando sus mandos, sus comunicaciones, financiamiento y apoyo material. Para ello, Estados Unidos usara su influencia para hacer que todos los actos del terrorismo sean considerados ilegítimos y así el terrorismo sea considerado igual a la esclavitud, la piratería o el genocidio, Estados Unidos apoyara gobiernos moderados y modernos, reduciendo las condiciones que engendran el terrorismo y usando la diplomacia pública efectiva para promover el flujo de ideas y de información.

En esta senda El documento plantea que se está desarrollando un cambio enorme desde la era de Truman:

Esta administración ha propuesto la reorganización gubernamental más grandes desde que la administración Truman creara el consejo nacional de Seguridad y el Departamento de Defensa. Centrado en un nuevo Departamento de Seguridad nacional e incluyendo un nuevo comando militar unificado y un reordenamiento fundamental del FBI, nuestro exhaustivo plan para dar seguridad a nuestra tierra engloba cada nivel del gobierno y la cooperación del sector público y privado.^[6]

En referencia al hemisferio occidental, se establece que se ha formado coaliciones flexibles con países que comparten las prioridades norteamericanas, en particular México, Brasil, Canadá, Chile y Colombia, en la búsqueda de consolidar una integración en temas de seguridad y apoyando institucionales regionales como la Cumbre de las Américas y la OEA para el beneficio del hemisferio entero. Claramente en la ENS de 2002 se afirma que:

Partes de Latinoamérica confrontan conflictos regionales, surgen especialmente de la violencia de los carteles de la droga y sus cómplices. Este conflicto y el trafico irrestricto de narcóticos podría poner en peligro la salud y la seguridad de los Estados Unidos. Por lo que debemos desarrollar una estrategia activa para ayudar a las naciones andinas a ajustar sus economías, reforzar sus leyes, derrotar organizaciones terroristas y cortar el suministro de drogas (…)^[7]

En el octavo punto de desarrollo de la ENS de 2002 se plantea desarrollar una agenda para la acción cooperativa con otros poderes y centros de poder global, esto es en referencia a la OTAN y la Unión Europea, se dice:

Europa es también el asiento de dos de las instituciones internacionales más fuertes y más capaces en el mundo: la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), el cual, desde su creación ha sido el punto de apoyo de la seguridad transatlántica e inter-europea, y la Unión Europea (UE), nuestro socio en la apertura del comercio mundial.^[8]

Se establece que el fortalecimiento de organismos como la OTAN es necesario para responder a cualquier amenaza contra cualquier miembro de la alianza, por lo que la alianza debe crear las coaliciones bajo el mando de la OTAN y para ello se debe: expandir el número de miembros de la OTAN a las naciones democráticas que compartan la defensa en favor intereses comunes, asegurar que las fuerzas militares de las naciones de la OTAN tengan apropiadas contribuciones de combate en la coalición de guerra, mantener la habilidad para trabajar y pelear juntos como aliados en tanto que se realizan los pasos necesarios para transformar y modernizar nuestras fuerzas^[9].

Además de las consideraciones sobre Medio Oriente, China, Rusia y Corea del Norte que no han variado enormemente desde los años 1990’s, el texto de la ENS 2002 no hace aportes mayores sobre el contexto latinoamericano.

La ENS de 2006 inicia afirmando que Estados Unidos está en guerra y que se ha provocado un daño serio a los enemigos terroristas, pero ellos no han sido derrotados, por lo que Estados Unidos se ha unido al pueblo afgano para derrotar al régimen Talibán, considerados como protectores de la red de al-Qaeda. Se afirma que el camino escogido por Estados Unidos es el de la confianza ante el temor, esta confianza se caracteriza como liderazgo sobre el aislacionismo, la búsqueda del libre comercio y los mercados abiertos sobre el proteccionismo. También se afirma que se ha escogido pelear contra los enemigos afuera en lugar de esperar por ellos a que arriben al país^[10].

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