Fujimori

Todo inició con un comentario por parte de un amigo Alejandro acerca del “Diplomado de Liderazgo Juvenil” mientras estaba entrenando en el gimnasio. Le dije para que servía, que se hacía y que se ganaba con eso; él respondió: Son pruebas físicas y hay dinámicas muy creativas que se realizaban por equipos y que eran tipo competencias; a parte te serviría para cuando te vayas a graduar, se puede convalidar por créditos académicos y también te serviría para los talleres que se necesitan llevar.

Después de lo que me dijo, no estaba tan seguro de querer entrar en el diplomado de Liderazgo; pasaron los días y en clases me animé por preguntar a mis amigos si es que sabían algo del “Diplomado de Liderazgo”. Me respondieron todos emocionados que si sabían algo y que iban a postular. Fue ahí en donde la pensé bien y me animé porque no estaría solo, tal vez no estaríamos en los mismos equipos pero la cuestión era sacarle provecho al diplomado y también divertirse un poco.

Me gustan las competencias, puedo decir que soy muy competitivo y que no me gusta perder, me gusta dar todo de mi; todo mi esfuerzo, mi entusiasmo, mi energía en pruebas físicas y de agilidad. Me gusta brindar mi apoyo, tratar de motivar a las personas para que hagan lo mejor de sí mismas.

Bueno, era el último día de plazo para pre-inscribirse y tuve q salir de clases en la tarde antes de que cierren el lugar donde se podía realizar el pago; fui, pague y luego me acerqué a la oficina de “Liderazgo” para que me digan el día, el lugar y la hora de la entrevista. Calos me hizo unas cuantas preguntas y eso fue todo.

Llego el día de la entrevista, me bañe, me puse el terno y fui manejando a la UCSP junto con mi amigo que mas o menos me había convencido para dar ese paso a tomar la decisión acerca de llevar el diplomado. Al llegar pensé que Carlos me iba a entrevistar, pero había otra persona ahí y es en donde me confundí. Busque a Carlos para preguntarle. Felizmente lo encontré y me lo volvió a decir donde me tocaba y quien me entrevistaría.

Pasaron los días y me percaté que un correo del Diplomado de Liderazgo me había llegado al iPhone, lo abrí y habían adjuntado un archivo. Era la lista y estaban los nombres de los que habían aceptado, se la enviaron a todos los que postularon, incluso a los que no pudieron ingresar. Busque mi nombre y lo encontré, lo triste es que mi amigo, el que de una u otra manera influyó en mi decisión, no lo habían aceptado.

Llego el primer día, Carlos era mi tutor, tutor del equipo verde de muchachos, Lourdes y María Paz eran tutoras del equipo verde de mujeres. Nos llamaron, salimos afuera del salón y conocí a mi equipo, conocía a unos cuantos, no a todos. Asistieron todos, menos un chico que al parecer decidió abortar en su decisión en permanecer en el curso, así que faltaba un integrante del equipo verde.

Ya que faltaba un integrante, tenían que llamar a alguien si o si; me encontré con Alejandro y me dijo que justo lo llamaron, me alegre porque estaría en mi equipo, ya lo conocía porque llevé cursos con él, aparte iba con él al gimnasio y con Carlos Millones. Sería bueno hacer una mejor amistad con él y con todos los chicos del equipo.

Empezando con las charlas y las dinámicas grupales aprendí mucho. Aprendí a trabajar en equipo y no independientemente, no solo preocuparse por el bienestar personal, sino grupal, armonizando esfuerzos para llegar al objetivo. A veces me preocupaba solo por mi, se puede decir que era un poco egoísta, pero el diplomado me sirvió para ayudar al prójimo, preocuparme por otra persona y sobre todo por la prudencia. En este caso creo que di lo mejor de mí para tratar de ayudar a mis amigos de equipo tanto a los chicos como a las chicas. Creo que todos nos dimos la mano cuando más lo necesitábamos.

Me gustan las competencias, puedo decir que soy muy competitivo y que no me gusta perder, me gusta dar todo de mi; todo mi esfuerzo, mi entusiasmo, mi energía en pruebas físicas y de agilidad sobre todo cuando algo me gusta.

Sábado tras sábado podía sacar y rescatar algo bueno de las charlas y tratar de ponerlo en práctica en mi vida. Una de esas cosas fue la prudencia al

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