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GUÍA PARA LA PRÁCTICA DEL CUIDADO PRECONCEPCIONAL Y DEL CONTROL PRENATAL


Enviado por   •  18 de Mayo de 2013  •  4.238 Palabras (17 Páginas)  •  1.038 Visitas

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EL CUIDADO PRENATAL

GUÍA PARA LA PRÁCTICA DEL CUIDADO PRECONCEPCIONAL Y DEL CONTROL PRENATAL

INTRODUCCION

Desde la perspectiva de los servicios de salud, la implementación de políticas activas para aumentar las coberturas debe

ir necesariamente acompañada por la mejoría de la calidad de las prestaciones. Para contribuir con este ultimo aspecto,

mejorar la calidad, se ha elaborado esta Guía para la práctica del cuidado de la salud de la mujer en la etapa preconcepcional

y durante el embarazo. La misma está dirigida al equipo de salud responsable de su asistencia. Este documento,

situado en la perspectiva de la promoción y prevención de la salud perinatal, pretende que el lector examine el estado

actual de los procedimientos, prácticas y tecnologías de eficacia clínica comprobada. Sobre la base de los conceptos

vertidos en esta guía. se espera que la misma sea una ayuda para mejorar la calidad del trabajo que se realiza en el

campo perinatal y sirva de base para la revisión de las normas que se aplican en los servicios de salud.

En la Argentina mas del 98 % de los partos ocurren en instituciones. Sin embargo la cobertura médica para el control

prenatal aún es baja. Para el subsector publico se estima que el 78 % de las embarazadas llegan al parto con alguna

consulta prenatal realizada, muchas de las cuales no reúnen los requisitos aceptables en cuanto a su precocidad, cantidad,

distribución, integralidad y calidad. Sólo el 30 % de los controles se inicia precozmente durante el primer trimestre.

Mucho menor es aun el número de mujeres en edad fértil que se han preparado adecuadamente para emprender un

embarazo.

La compleja problemática que reflejan estas cifras se encuentra atravesada por una historia de débiles políticas para

impulsar el cuidado integral de la salud de la mujer en el contexto de la “atención primaria de la salud”. Aun es deficiente

la articulación entre las actividades de promoción de la salud desarrolladas en las comunidades y los servicios de

salud del primer nivel de atención y de estos, con las maternidades que concentran la atención de los partos y sus

recién nacidos. Esta situación se ve agravada por la condición de pobreza de muchas familias, que contribuye a magnificar

el impacto negativo de la falta de cuidado para preservar en la mujer su plena capacidad de salud reproductiva.

EL CUIDADO PRECONCEPCIONAL

La etapa para implementar las actividades de promoción y protección de la salud en la mujer parte desde la adolescencia.

Esta etapa es considerada como un periodo preparatorio para el embarazo ya que condiciona la salud de la madre y

de su futuro hijo. Además de elegir el momento oportuno para el embarazo, a partir de la decisión responsable, la mujer

debe informarse sobre los aspectos psicológicos y biológicos para asumir un embarazo seguro. Una importante proporción

de mujeres, fundamentalmente las adolescentes no acceden a estas opciones vitales. Es fundamental comunicar y

educar a las mujeres en edad fértil sobre una importante lista de factores que aumentan el riesgo materno-perinatal y

que pueden ser reducidos o controlados en esta etapa. Estas acciones deben estar incluidas en los programas de salud

integral de la mujer, en especial para adolescentes.

A. PREVENCIÓN DE ALGUNAS INFECCIONES

Virus de inmunodeficiencia humana (VIH/SIDA): debe informarse sobre los riesgos de la transmisión vertical y acerca

del tratamiento en especial en caso de embarazo. El tamizaje (prueba de VIH) debe ser ofrecido a todas las mujeres en

edad fértil en especial aquellas con alto riesgo, por ejemplo:

•con síntomas presuntivos de infección por VIH/SIDA,

•con múltiples compañeros sexuales sin protección.

•contacto sexual con individuos infectados por VIH.

•que hayan recibido transfusiones de sangre,

•que usen drogas intravenosas,

•que su compañero sexual tenga algunas de las características anteriormente citadas,

•historia previa y/o actual de enfermedades de transmisión sexual.

Hepatitis B (HB): Los factores de riesgo para hepatitis B son similares a los de VIH/SIDA. El riesgo de transmisión perinatal

es alto principalmente en el momento del parto. Aproximadamente entre el 70% al 80% de los neonatos infectados

son portadores crónicos de antígenos HB. Además la infección fetal se asocia con prematuridad y niños pequeños para

su edad gestacional. Estas razones avalan la importancia de que toda la población, y prioritariamente las mujeres en

edad fértil, sean vacunadas para la Hepatitis B con 3 dosis de vacuna. Se deben identificar mujeres no vacunadas, en

especial aquellas con factores de riesgo, e inmunizarlas aún en el embarazo ya que el tipo de vacuna no lo contraindica.

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Rubéola: Alrededor del 15% de todas las mujeres en edad fértil no tienen inmunidad para la rubéola. El ideal es determinar

los anticuerpos en todas las mujeres y vacunar antes de embarazarse a aquellas con resultado negativo. En caso de

no poder realizar la determinación y no contar con certificado de vacuna, se aconseja vacunar y esperar 3 meses para iniciar

el embarazo.

A pesar de tratarse de una virosis benigna para la madre, su pasaje transplacentario produce en el feto diferentes formas

de embriopatías (20% a 35%).

Toxoplasmosis: Es aconsejable que las mujeres conozcan su estatus serológico. En caso de ser negativa se debe instruir

a la mujer sobre los cuidados para evitar la infección (ver en Control Prenatal).

Virus de inclusión citomegálica: Se ha comprobado mayor probabilidad de

infección en mujeres que están en contacto con niños que usan pañales. La vía

de contagio son las manos al manipular los pañales con orina. Una prevención eficaz es el lavado de manos cada vez que

se cambien los mismos.

Esta recomendación tiene especial pertinencia para aquellas mujeres que deseen embarazarse y trabajen en guarderías,

salas de neonatología o tengan niños pequeños.

Tétanos: Se debe vacunar a todas las mujeres para evitar especialmente el tétanos neonatal.

Sífilis: Como toda enfermedad de transmisión sexual debe solicitársele la prueba de tamizaje (VDRL) a ella y al compañero

sexual.

Otras ETS: Se debe investigar al compañero sexual, igual que en caso de sífilis.

Chagas: Conocer su estado serológico, para realizar eventuales controles y tratamiento adecuado.

Infecciones buco-dentales: Deben tratarse preferentemente antes de embarazarse.

B. CONTROL DE ENFERMEDADES CRÓNICAS.

Aproximadamente entre 15% y 20% de las madres tienen problemas médicos antes del embarzo que deben ser corregidos

o controlados .

Hipertensión crónica: es una de las complicaciones más frecuentes. Cuando se planea el embarazo es el momento de

modificar el tratamiento para evitar los efectos teratogénicos de algunas drogas.

Diabetes mellitus: La prevalencia estimada es entre 0,5 a 1,5%. Una forma de reducir la prevalencia de los defectos

congénitos es con un control de los niveles de glucosa antes de la concepción y durante el primer trimestre del

embarazo. Para conocer el nivel metabólico es útil determinar el nivel de hemoglobina glicosilada, dado que si este es

alto indica pobre control metabólico y alto riesgo de malformaciones congénitas.

Anemia: La prevalencia de anemia (Hb < 12 g/dl) en mujeres en edad fértil no embarazadas, para el área del Gran Bs.

As. es de 26% y para Tierra del Fuego es de 10%. (MINSA/1998) Tratamiento acorde al diagnostico etiológico tanto por

deficiencia de hierro como por ácido fólico (ver asesoramiento genético).

Patología uterina: la pesquisa sistemática del carcinoma cervical se hará porel método de Papanicolau. Las miomatosis

importantes, malformaciones uterinas y tumores de ovario deben ser evaluados y eventualmente tratados.

Carcinoma de mama: Se debe realizar un examen clínico de las mamas y enseñar el auto examen mamario, el cual es

más difícil de aprender durante el embarazo por las modificaciones que se producen en la glándula. La mamografía como

tamizaje no es recomendada antes de los 50 años.

C ASESORAMIENTO PARA REDUCIR DEFECTOS CONGÉNITOS

Los defectos congénitos son frecuentes, afectando el 5 al 10% de los embarazos, especialmente en mujeres con:

•niños afectados en embarazos previos

•antecedentes familiares de enfermedad genética

•edad avanzada

•exposición a tóxicos ambientales

Características étnicas especiales: Beta talasemia: italianas y griegas, anemia a células falciformes, raza negra

Prevención del cretinismo endémico: el suplemento de yodo en una población con altos niveles de cretinismo endémico

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lleva a una reducción importante de la incidencia de este trastorno, sin efectos adversos conocidos ( Mahomed K 2000).

Prevención de defectos del cierre tubo neural: se ha demostrado que la suplementación con ácido fólico a la mujer en la

etapa preconcepcional y durante el primer trimestre protege al embrión de padecer estos defectos en un 72% de los casos

( O.R.= 0,28 I.C. 95% 0,15-0,53) (ver Fig. 9). La recomendación es que todas las mujeres deben recibir un suplemento en

su dieta diaria de 0.4 Mg. de ácido fólico desde que discontinúan su practica anticonceptiva hasta las 12 semanas de

embarazo (ver mas adelante en Control Prenatal). En madres con antecedentes de hijos con defecto del cierre del tubo

neural, la indicación es de 4 Mg. por día durante un periodo similar (OR= 0.32 0.16-0.64) (ver Fig. 10) (Lumley J 2000).

La misma intervención debe ser recomendada a pacientes insulinodependientes y epilépticas tratadas con ácido valproico

o carbamazepina.

D. MEDICACIÓN

Durante la visita preconcepcional se debe advertir sobre drogas teratogénicas que pueda estar consumiendo la mujer por

padecer enfermedades crónicas, como por ejemplo el litio, antagonistas de los folatos, ácido valproico, prednisona, warfarina

y cualquier otra en la que no este demostrado la ausencia de efectos teratogénicos.

E. EDUCACIÓN

Además de la asesoría que debe brindarse sobre higiene y dietética en general es importante insistir en los siguientes

aspectos:

Asegurar el cálculo de edad gestacional: El conocimiento de la fecha de las menstruaciones antes de embarazarse es de

importancia para disminuir el porcentaje de mujeres que la desconocen o tienen dudas. También es recomendable que se

suspendan los anticonceptivos orales 3 meses antes de la fecha que pretenda quedar embarazada para que se regularicen

sus ciclos menstruales. Conocer la fecha de ultima menstruación es fundamental para el seguimiento del control prenatal,

así como para adoptar conductas frente a una interrupción de la gestación por un presunto embarazo cronológicamente

prolongado o para la atención de un parto de pretérmino.

Esto es de particular interés en comunidades donde es dificultoso el acceso al control prenatal temprano.

Evitar embarazos en edades extremas de la vida: adolescencia y luego de los 35 anos.

Evitar intervalos intergenésicos cortos: advertir sobre los efectos perinatales adversos de las embarazadas con menos de

24 meses de intervalo.

F. HÁBITOS Y ESTILOS DE VIDA.

Nutrición: la futura madre debe conocer su peso habitual y llegar al embarazo con un peso adecuado a su contextura. La

subnutrición previa al embarazo no corregida, asociada con poca ganancia de peso durante el embarazo, aumenta la morbilidad

y mortalidad neonatal. Por otro lado, la obesidad, se asocia con diabetes, hipertensión y macrosomía fetal, la cual

también aumenta el riesgo perinatal.

Durante la adolescencia el problema del déficit de nutrientes adquiere especial importancia, pues si se embaraza los

requerimientos son mayores que los de una mujer adulta.

Fumar: Alertar a la mujer que el tabaco es un tóxico directo sobre el feto produciendo serias alteraciones, siendo la más

importante el bajo peso al nacer (OR: 0,80 I.C. 95% 0,67-0,95)(Lumley J 2000 bis). (ver también Intervenciones educativas

para suprimir el hábito de fumar ).

Consumo de alcohol: es desaconsejable el consumo excesivo de alcohol antes del embarazo, pero durante la gestación

el alcohol debe evitarse en forma absoluta, en particular en el primer cuatrimestre de la gestación por asociarse con malformaciones

fetales.

Consumo de drogas: cocaína, heroína, metadona, anfetaminas, marihuana, etc. Se asocian con retardo de crecimiento

intrauterino y muerte perinatal. Las mujeres que consumen drogas ilegales deben ser educadas sobre los daños que éstas

producen en la descendencia.

Laborales y ambientales: La realización de trabajos pesados, utilización de plaguicidas, solventes orgánicos, y el contacto

con material radioactivo deben ser prohibidos durante la gestación.

Algunos de los puntos que se trataron, también son de aplicación en el puerperio y en el control prenatal precoz de aquellas

mujeres que no tuvieron cuidados pregestacionales.

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CONTROL PRENATAL

Se entiende por Control Prenatal a la serie de entrevistas o visitas programadas de la embarazada con integrantes del

equipo de salud, con el objeto de vigilar la evolución del embarazo y obtener una adecuada preparación para el parto y la

crianza.

EFICACIA DEL CONTROL PRENATAL DE RUTINA (PROGRAMADO)

Actualmente la mayoría de los autores coincide con su eficacia cuando es provisto de rutina a toda la población de

embarazadas, aunque para algunos las dudas se han planteado en cuanto a su utilidad para reducir la morbimortalidad

perinatal dada por el bajo peso al nacer, por prematurez o por retardo del crecimiento fetal(Chalmers I,1989 bis; Rooney

C, 1992; Fiscella K,1995). Tal sospecha sobre la eficacia del control prenatal generalizado, proviene de algunos estudios

clínicos controlados realizados principalmente en países desarrollados. El tipo de poblaciones incluidas, el tamaño muestral,

las intervenciones estudiadas (visitas bisemanales, visitas domiciliarias, educación para la salud, evaluación del riesgo,

exámenes cervicales) y los indicadores primarios de salida utilizados para medir su impacto (incidencia de pretérmino

y de bajo peso al nacer), plantean algunas dudas sobre la eficacia de ciertas intervenciones incluidas en el “paquete” del

control prenatal y dejan preguntas por aclarar( Olds DL 1986; Main DM 1989; Spencer B 1989; Heinz HC 1990; Gondelberg

RL 1990; Bryce RL 1991). Los interrogantes estimulan a la realización de nuevos estudios controlados que despejen los

factores interferentes, que utilicen otras intervenciones e indicadores y que consideren otras poblaciones.

¿Como el control prenatal se asocia con una “dosis-respuesta” cuando éste es provisto a diferentes “dosis” ?. En cuanto

a esta pregunta sobre el número total de consultas para embarazadas con bajo riesgo perinatal, la gran mayoría de los

países latinoamericanos y del Caribe, junto con el Programa Materno Infantil del Ministerio de Salud de la Argentina, hace

tiempo que redujeron las metas de 8 a 12 controles y adoptaron en sus normas los 5 controles propuestos por el CLAPOPS/

OMS en 1988 (Schwarcz R, Fescina R H y col. 1988, 1992 y 1995). Esta propuesta de 5 controles prenatales, posteriormente

fue respaldada por los resultados de un estudio clínico multicéntrico controlado llevado a cabo por la OMS (Villar

J y col. 2001).

¿Cómo se pueden establecer niveles de cuidados para mujeres con diferentes riesgos? y ¿cuán eficaces son, por separado,

los componentes que integran el paquete de intervenciones del control prenatal?. Estas son preguntas a ser esclarecidas

por nuevas investigaciones. Es necesario aclarar aquí que los ensayos controlados realizados en países desarrollados

si bien pueden tener en sus poblaciones diferencias socioeconómicas internas y de equidad para la provisión de servicios

de salud, estas nunca son tan marcadas como las existentes en los países del tercer mundo. Es previsible que en

las regiones carenciadas de Argentina, donde los indicadores materno-perinatales muestran tasas altas y perfiles de subdesarrollo

pronunciado, sea evidente el impacto positivo de una oferta amplia para el control prenatal.

Por la experiencia acumulada en los servicios de salud y por las evidencias científicas que hasta hoy se disponen,

se puede decir que el cuidado de la salud durante el embarazo (control prenatal), es un buen ejemplo de medicina

preventiva en el campo perinatal.

Los planificadores y organizadores de la salud deben considerar al cuidado prenatal como una etapa dentro del cuidado

continuo de la salud de la mujer. En la Argentina, muchas mujeres, especialmente la adolescentes, ciertas minorías y

mujeres de condición socioeconómicas baja, reciben su primer examen integral de salud durante el control prenatal.

Además, estos contactos con las mujeres y su familia son fundamentales para promover la salud, la educación para padres

y para la crianza y para el establecimiento de un vínculo con los recursos de atención primaria de la comunidad. Junto a

esto, la incorporación de las madres en situación de riesgo a programas de nutrición y servicios sociales, son, entre otras

medidas, actividades que deben integrar el “paquete” del control prenatal.

No es obvio mencionar que el control prenatal provee una oportunidad válida para que las mujeres con factores de riesgo

biológico presentes reciban asesoría y cuidados para controlarlos (Rooney C 1992; Fiscella K 1995; SOGC 1998; Schwarcz

R 1999).

En la Argentina el 18 % de las mujeres presenta alguna patología durante el embarazo (Dir. Mat. Inf., 2001). De estas son

muchas las que se beneficiarían directamente del cuidado prenatal si la captación fuese amplia y precoz. Los resultados

de los ensayos clínicos controlados realizados en embarazadas con riesgo, dejan pocas dudas sobre el impacto positivo

que tiene el control prenatal.

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CONTROL PRENATAL EN EL SECTOR PÚBLICO DE ARGENTINA. PERÍODO 1999-2000

Nº de Partos Nº de Consultas Cobertura de Control Prenatal C.Prenatal anterior 20ª semana

(media) (media) (media)

Buenos Aires 34.060 4,8 85,1 44,8

Córdoba 9.855 4,4 79,3 38,8

Chaco 2 10.546 4,8 81,4 47,9

Chubut 554 3,9 88,7 54,4

Corrientes 8.469 3,7 77,7 40,4

Entre Ríos 1 904 5,8 95,1 65,9

Formosa3 2.145 4,1 86,5 40,3

Jujuy 8.408 3,8 74,5 31,5

La Pampa 347 5,0 89,6 62,6

Misiones 11.816 3,7 72,5 35,4

Neuquén 6.619 6,0 96,2 66,0

Salta 6.378 4,2 85,3 43,8

Santa Fe 16.639 5,1 93,2 56,9

Sgo.del Estero4 6.731 2,4 70,4 22,2

Tucumán 19.752 2,8 63,4 14,8

Total en 15

provincias 143.223 78,20 32,60

Fuente: Etcheverry, M E, 2001.

De un total de 143.223 partos del subsector oficial de quince provincias, el 78 % tuvo algún tipo de control prenatal, pero

con una captación al primer trimestre de solo el 33%.

El control prenatal tiene los siguientes objetivos:

Brindar contenidos educativos para la salud de la madre, la familia y la crianza.

Prevenir, diagnosticar y tratar las complicaciones del embarazo.

Vigilar el crecimiento y la vitalidad fetal.

Detectar enfermedades maternas subclínicas.

Aliviar molestias y síntomas menores asociados al embarazo.

Preparar a la embarazada física y síquicamente para el nacimiento.

El control prenatal debe ser:

Precoz: Debe ser efectuado en el primer trimestre de la gestación. Esto posibilita la ejecución oportuna de acciones de

promoción, protección, y recuperación de la salud. Además permite la detección temprana de embarazos de riesgo.

Periódico: La frecuencia dependerá del nivel de riesgo. Para la población de bajo riesgo se requieren cinco controles.

Completo: Los contenidos y el cumplimiento del control prenatal garantizan su eficacia.

Amplia cobertura: En la medida que el porcentaje de población bajo control es mas alto (lo ideal es que comprenda el

total de las embarazadas) se espera que aumente su contribución a la reducción de la morbimortalidad perinatal.

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ACTIVIDADES Y OBJETIVOS PARA EL CONTROL PRENATAL

ACTIVIDADES OBJETIVO Modificado de Schwarcz R, Fescina R y col. 1995

9

Fijar un cronograma para las visitas prenatales

Administración de ácido fólico en periodo periconcepcional

Categorizar a la embarazada según riesgo, examen

físico, y llenado de HCPB

Evaluación en cada consulta de factores de riesgo.

Determinar Grupo sanguíneo y factor Rh

Medir el peso pregestacional, la talla, la ganancia de

peso durante la gestación y el nivel de hemoglobina.

Preparar a la mujer para la maternidad

Detectar tabaquismo y otras adicciones.

Medir la presión arterial

Determinar el nivel de hemoglobina

Suplemento con hierro y ácido fólico

Medida seriada de la altura uterina

Medir Glucemia

Diagnostico de sífilis, VIH, Chagas, Hepatitis B,

Toxoplasmosis

Urocultivo

Vacunar contra el tétanos

Detectar presentación pelviana a término

Comunicar e instruir sobre las principales situaciones

de riesgo materno-perinatal

Recomendar la lactancia natural y preparar a la

madre para la lactancia exclusiva

Informar sobre métodos anticonceptivos

Estudio Ecográfico

Recomendar el lugar para la asistencia del parto

Agendar las visitas prenatales de acuerdo a la edad gestacional en la primera

consulta.

Reducir la frecuencia de defectos del tubo neural, y de malformaciones cardiovasculares

y renales

Clasificar a las embarazadas de acuerdo a las necesidades especificas, registro

de la información

Detectar embarazadas con necesidad de cuidados especiales y prevenir complicaciones.

Prevenir y tratar la enfermedad hemolítica perinatal

Evaluar el estado nutricional materno

Informar y lograr la participación de la embarazada y su familia en la identificación

de signos de alerta, protagonismo en el parto, cuidados del puerperio,

recién nacido.

Intervención educativa para reducir el bajo peso y el parto de pretermino.

Detectar tempranamente todo tipo de hipertensión durante el embarazo,

reducción de pre-eclampsia, eclampsia.

Detectar anemia y necesidad de dosis más altas de hierro, mejorar la salud

materno y oxigenación fetal

Evitar la anemia.

Identificar los fetos con crecimiento normal, embarazos múltiples, y RCIU.

Detectar diabetes gestacional

Identificar estas infecciones para su tratamiento y/o control.

Diagnosticar y tratar la bacteriuria asintomática, para reducir pielo nefritis y

parto de pretérmino.

Prevenir el tétanos materno y neonatal.

Intentar versión externa, para evitar la cesárea por presentación pelviana y en

caso de ser irreversible programar la operación cesárea al término.

Participación de las embarazadas para el auto cuidado e identificación precoz

de sintomatologías de riesgo.

Contribuir al crecimiento y desarrollo del niño y reducir la morbimortalidad

infantil.

Prevenir el embarazo no deseado, el aborto provocado y la mortalidad materna.

Detectar malformaciones fetales, localizar la placenta, vigilar el crecimiento

fetal, anticipar él diagnostico y confirmar el embarazo múltiple, ajustar la

edad gestacional cuando la amenorrea es desconocida.

Brindar una atención del parto y del recién nacido en el nivel de complejidad

que corresponda al riesgo materno perinatal.

CRONOLOGÍA DE LAS ACTIVIDADES PARA EL CONTROL PRENATAL DE BAJO RIESGO.

Las actividades para el control prenatal deben estar dispuestas en un cronograma elaborado de acuerdo a la oportunidad

en que deben ser realizadas a lo largo del embarazo. En cada consulta debe confluir la mayor cantidad de actividades con

la finalidad de reducir al mínimo útil el numero de controles.

La elección del numero, la oportunidad de cada consulta y el contenido de las mismas se basa en el conocimiento epidemiológico

del momento de aparición de los problemas perinatales prevalentes y en la posibilidad de resolverlos o controlarlos

por tecnologías, prácticas y procedimientos de eficacia demostrada.

Consultas

Prueba de embarazo *

Cálculo de amenorrea * * * * *

Historia Médica y evaluación de riesgo * * * * *

Examen clínico completo *

Peso corporal * * * * *

Talla *

Suplementación con ácido Fólico + hierro * * * * *

Examen Ginecológico, Papanicolau y colposcopía *

Detectar ETS y vaginosis * *

Detectar otras ETS – Sífilis * *

Detección de VIH con consentimiento informado * *

Examen odontológico *

Medida de la tensión arterial * * * * *

Medida de la altura uterina * * * * *

Diagnóstico de vida fetal * * * *

Vitalidad fetal y cantidad de líquido amniótico * * * *

Grupo sanguíneo y factor Rh *

Determinar hemoglobina * *

Detectar Chagas *

Orina completa * * *

Cultivo de orina * *

Vacunación antitetánica * *

Detectar diabetes * *

Detectar embarazo múltiple * * *

Descartar presentación pelviana *

Preparación para la maternidad * * * *

Educación.

Recomendaciones para detectar síntomas de alarma.* * * * *

Examen mamario y recomendaciones

para la lactancia * * * * *

Consejería sobre métodos anticonceptivos * * *

Actividades para reducir el tabaquismo * * * * *

Estudio ecográfico cuando se dispone de equipo * *

Evaluar capacidad pelviana y relación feto pélvica *

Modificado de Schwarcz R y col. 1995

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10

antes de

las 20

1a visita

entre las

22 y 24

2a visita

entre las

27 y 29

3a visita

entre las

33 y 35

4a visita

entre las

38 y 40

5a visita

HISTORIA CLÍNICA PERINATAL

El primer contacto con la mujer gestante debería ser utilizado para realizar la historia clínica, dado que es la mejor fuente

de información para evaluar los diferentes riesgos y de esta forma convertirse en un elemento de planificación para el

futuro cuidado prenatal. No siempre los clínicos toman acciones basadas sobre la información obtenida de las historias

clínicas o manejan de manera apropiada la información de los carnés prenatales. La experiencia de la utilización de métodos

de recolección de la información como es la historia clínica perinatal base ha mostrado un déficit en el llenado de la

misma, impidiendo realizar un correcto análisis de la información.

Una investigación clínica aleatorizada demostró que la utilización de una metodología estructurada en la recolección de

información durante la primer consulta resultó en una mejor y más completa información y una optimización de las

acciones clínicas. Este resultado refuerza la necesidad de enfatizar un cambio de actitud en el equipo de salud al respecto

(Lilford R y col 1992).

Para realizar un relevamiento de las acciones del control prenatal se ha convenido en una serie de preguntas referidas a

la identificación socio educacional, antecedentes familiares, personales, obstétricos y del embarazo actual, cuya respuesta

es por sí una pauta que debe seguir quien realice el control de una gestante. Estas preguntas representan una minuciosa

y completa anamnesis, y sus respuestas consignadas en forma de cruz, se vuelcan en la Historia Clínica Perinatal

Base. Este formulario integra el Sistema Informático Perinatal junto con el Carné Perinatal, los formularios complementarios

diseñados para el alto riesgo y los programas de computación para el ingreso de las historias y procesamiento de los

datos (Schwarcz R y col. 1983, 1987). Este sistema informático es utilizado ampliamente en la Argentina y fue oficialmente

publicado en la Propuesta Normativa Perinatal (Dir. Mat. Inf. MINSA, 1993).

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Tomado de Schwarcz R. y col. 1983, 1995

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