Infancia y Juventud

Primera Parte – Infancia y Juventud

Capitulo 1

Empieza con Marco en la cama enfermo, al parecer con un severo resfriado, lo primero que se cuenta es Marco hablando con el doctor que le acababa de untar grasa de buitre que apesta horrible, pero eso le ayudo a aliviar un poco su tos.

Cuando el padre de Marco entra, que igual se llama Marco Tulio Cicerón, empezó a hablar con el médico ya que su hijo se hizo el dormido para no tener que hablar con su padre, no tiene tanta importancia de lo que hablaron el papá con el médico, lo único que importa es de que hablaron de cuánto costó esa grasa que le acababan de untar a su hijo y de que su esposa Helvia estaba a punto de dar a luz.

El médico salió en seguida de que le dijeran esto, a lo que el padre de Marco se acercó a la cama y le dijo que dejara de hacerse el dormido y fuera a lado de su esposa en el parto, Marco estaba más que dispuesto a quedarse en la cama ya que estaba muy enfermo, el padre, que para mí es un hombre seco y frío, lo sacó de la cama, lo envolvió en mantas de cuero y se lo llevo a rastras hasta los aposentos de su esposa.

Era invierno y hacía mucho frio, claro, cuando una persona está así de enfermo y lo sacan a dar vueltas en una casa que estaba sumamente fría por los pisos de mármol es una tortura, pero todos, hasta Helvia decía que el aire fresco era sumamente sano y lo curaría de su enfermedad. Al llegar a la puerta de los aposentos estaba Lira, la “esclava” de Helvia que ya no era esclava porque su ama la había liberado al momento en que se casó con Marco, pero con lo que se cuenta, para mí, es una mujer muy acomplejada que odia tanto a Marco como a su padre y también un poco de envidia hacia ellos por haber unido familia con una familia tan influyente como la de Helvia.

Entran en discusión con ella antes de poder entrar a los aposentos de Helvia, cuando los deja pasar Marco se va a sentar junto a su esposa a lo que ella le importa poco el que Marco haya hecho un gran esfuerzo de pararse de la cama para estar con ella mientras está bastante enfermo, es más, hasta le dice que si saliera más no sufriría con enfermedades.

Con muy poco esfuerzo nació el niño, 3 de Enero de 648, lo nombraron igual que el padre, Marco Tulio Cicerón.

El capitulo termina con Helvia y Lira, Helvia estaba cuatro días después en sus aposentos con libros de contabilidad quejándose de todos los gastos que han tenido desde el nacimiento de el niño y de la enfermedad de su esposa, según ella, le han robado dinero.

Lira jura que el niño se parece demasiado a su mamá, pero Helvia sabe que el niño se parece más a su padre, los ojos, es la excepción, ya que los sacó de ella. Helvia, con el odio hacia Marco sigue diciendo que no se parece nada a él y que ha nacido el gran héroe del que toda Roma

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