LA BUENA SUERTE.

LA BUENA SUERTE

INTRODUCCIÓN.

Se dice que para poder entender el mundo, hay que entendernos a nosotros mismos, es decir hay que saber nuestras virtudes y nuestras deficiencias, el libro “La buena suerte”, es eso precisamente, entender que lo que sale de nosotros, tanto lo bueno como lo malo, se ha cosechado y se ha construido en uno mismo, en el mismo libro nos da un consejo muy importante, nunca seremos demasiado viejos como para recibir un buen consejo y mucho menos para ponerlo en cuenta, y precisamente la lectura es y será sólo eso un buen consejo, el cual podríamos o no seguir, depende de lo que nosotros queramos recibir.

Un libro nunca nos dará todas las respuestas, ni nos dará las claves del éxito, creo que el libro es el punto de vista de dos personas que han tenido una visión de la vida de diferente manera para poder estar en el negocio, además la fábula que cuenta es interesante y se apega a la actualidad.

DESARROLLO.

Richard Wiseman, profesor de psicología en la Universidad de Hertfordshire, realizó  una investigación con todo el rigor de la ciencia acerca de la suerte, en la cual estudió los casos de más de 1.000 personas que en verdad parecían tener las peores de las fortunas.

De acuerdo con Wiseman, las personas sí pueden cambiar su suerte, ya que ésta no es algo paranormal, sino un hecho que creamos con nuestros pensamientos y actitudes ante la vida; para probarlo enseñó a las personas a cambiar su destino.

Al final, 80% de las personas que siguieron los consejos de lo que Wiseman llamó ‘La escuela de la suerte’, dijeron que su panorama había cambiado. En promedio, estas personas estimaron que su suerte había aumentado en más del 40% y, además, eran más felices^[1].

La Academia Mexicana de la Lengua define la suerte como: Hecho de ocurrir, por casualidad, un acontecimiento favorable o adverso en ese sentido la palabra casualidad es lo esencial de esto, es decir, que se puede dar o no se puede dar, un 50% de si contra un 50% que no, ya sea malo o bueno eso no importa, la casualidad es lo que genera una forma de dar bueno o malo, si sucede es buena suerte si no sucede es mala suerte, sin embargo en la literatura nos dice que la buena suerte depende de nosotros, que viene de dentro, que lo que pensamos se nos regresa y que eso es la buena suerte, en consecuencia y pensamos o hacemos cosas mal entonces tendremos mala suerte.

        Precisamente lo que dice el libro como buena suerte, en la fábula que cuenta, es más un trabajo del diario.

        “la vida te devuelve lo que tedas…” (Fernando Trías de Bes, 2004) así lo menciona en la lectura, dice además “…Sí compartes, siempre ganas más.” Bueno parte de lo que piensan las grandes empresas es que si dan algo a la comunidad serán recompensados, parte de ello es bueno, sin embargo no sólo lo hacen como gesto de buena voluntad, lo que ellos ganan también es para que su empresa reduzca el pago de impuestos o que sea reconocida con algún incentivo gubernamental.

“…De pronto recordó lo que le había dicho la Secuoya: <>…”^[2] es un hecho que todas las personas dejan de hacer cosas y las postergan, a eso se le llama procrastinación, y no es sólo dejar las cosas para después, cuando empezamos a realizar las cosas, nuevamente las dejas de hacer es una situación psicológica dónde la falta de atención y la confianza que nos tenemos para terminar ciertas actividades nos ganan, pero lamentablemente cada vez que se acerca la hora de entrega de la actividad postergada, se tiene una sensación de frustración. Se sabe que en el ámbito internacional (y también nacional) se nos tacha de impuntuales, eso quiere decir que dejamos las cosas para el final, nuevamente hay que cambiar la educación desde los más pequeños.

        Caer en cuenta de que ya hemos terminado cuando tenemos un proyecto, es caer en un error, ya nunca hay que obviar algo, como dice en el libro “…concentrarse en lo que pudiera faltar…”^[3] siempre hay algo que nos falta, siempre necesitamos tener nuestros cinco sentidos en lo que hacemos, a veces cuando tenemos un proyecto y lo hemos hecho funcionar, creemos que todo está hecho, que lo único que hay que hacer es esperar.

        No podemos dejar que las cosas sucedan por sí solas, hay que verificar que eso que estamos haciendo, no sea lo último que hagamos, siempre podemos mejorar en todos los aspectos.

        Cuando creemos que hemos hecho las cosas bien y aun así la buena fortuna no nos ha sonreído, tratamos de darle una vuelta a la mala suerte y buscar los remedios mágicos, precisamente el buscar la buena fortuna se hace a base de esfuerzos, si de buscarla, pero buscarla con trabajo y esfuerzo continuo, la forma más sencilla siempre será la que nos dará menos satisfacción, no se trata de llegar, se trata de que lo que hagamos día a día nos dé una satisfacción, nos llene y nos enorgullezca de lo que hemos logrado, el objetivo es tener un desarrollo completo de lo que formamos y de lo que será nuestro legado, eso es lo importante.

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