LA COYUNTURA DE LA REVOLUCION BOLIVARIANA (POR WILLIAM IZARRA)

        Cuando hablamos de Coyuntura, hablamos sobre un espacio de tiempo en la historia con todos sus acontecimientos significativos, en éste caso, el enfoque será sobre la Revolución Bolivariana. En el presente artículo, objeto a ser analizado, el autor de la misma, William Izarra, reseña sobre la situación actual de Venezuela con respecto a la Revolución Bolivariana y todo lo que conlleva hasta la actualidad, resumiendo desde su punto de vista, los procesos por los cuales está pasando y siendo centro de atención nuestra Patria Venezuela, el cual por poseer riquezas naturales abundantes (entre los cuales se encuentran además, del petróleo, el oro, bauxita, hierro, coltán y otros), estimula el interés del denominado Imperio de USA para intervenir a la Nación militarmente hablando y someterla de manera arbitraria bajo los pretextos de salvar al pueblo venezolano, con la intención principal de apoderarse de todas las riquezas que posee Venezuela. El autor hace mención de la ignorancia que el Gobierno de los EEUU posee con respecto a la conciencia revolucionaria que hay en el pueblo venezolano “que a mi criterio personal, no es absoluta por la mala información que los medios de comunicación privados se han encargado de divulgar desde los inicios del mandato del ex presidente Hugo Chávez”.

        El autor Izarra, en uno de sus párrafos cita textualmente: Los 120 días anteriores han fortalecido la conciencia y la espiritualidad de los revolucionarios; ésta coyuntura ha permitido proyectar el Socialismo Bolivariano como un modo de vida que sí puede tener cabida en el mundo global capitalista de hoy…, “particularmente, considero que parte de la población venezolana que conoce de toda ésta transición Revolucionaria a modo más profundo, ha adquirido más conciencia y espiritualidad de la misma, sin embargo, no podemos dejar de ver la otra cara de la moneda, asumiendo conscientemente la apatía que hay en gran parte en los habitantes del país por todo lo que está pasando el pueblo venezolano, llámese: escasez, delincuencia, hiperinflación, corrupción, entre otras negativas que ha sido resultado de tanto saboteo del lado opositor y a su vez culpa del lado oficialista al permitir la progresividad y gran auge de la misma, siendo el Gobierno de Estado el mayor poder de la Nación, el ente encargado de velar por el bienestar integral y en la búsqueda de la mayor felicidad posible de cada ciudadano venezolano (y extranjero residenciado en Venezuela), el cual no existe”.

El autor hace alusión de tres rasgos fundamentales en el Socialismo Bolivariano: a.- Modo de producción: Busca satisfacer las necesidades colectivas, la obtención de mayor felicidad posible al satisfacer las necesidades tanto materiales como espirituales de cada individuo de la Nación, mejorando así su calidad de vida, “ocurriendo actualmente todo lo contrario por todas las negativas citadas en el texto anterior”, b.- Democracia Directa: Hace Referencia a la democracia directa, participativa, protagónica y de autogestión, sin la intervención de ningún complemento o ente político que impida el poder popular a la comunidad organizada, “en éste punto, podría acotar que si hay Democracia Directa, por darle más poder al pueblo, para solventar por sí mismos los problemas más directos que afecta a la comunidad, sin embargo, la falta de conocimientos y preparación para los integrantes de los llamados consejos comunales, han dado como resultado la falla o desmotivación de los mismos, como consecuencia, la incompetencia de gestionar los requerimientos de su comunidad, c.- Sistema Cultural: Donde se rompen todos los paradigmas del Estado Paternalista, así como también el sometimiento del pueblo ante entes político sociales. El Socialismo Bolivariano, no ha sido comprendido en su totalidad, lo que en sí se debería y desea lograr con éste modelo socioeconómico, el cual generaría mayor estabilidad a los ciudadanos habitantes del país, partiendo de la ruptura de paradigmas actuales de dependencia y sumisión, con la finalidad de generar el bien común, desarrollando así tres líneas maestras mencionando el autor: 1.- Bien común: Hace mención a determinar las necesidades reales de la población, eliminando las ficticias o inducidas al consumo impulsivo por el capitalismo. 2.- Remuneración Compensable: El autor hace alusión sobre la remuneración compensable por los servicios prestados o productos elaborados, satisfaciendo ambas partes pero eliminando la competencia despiadada generada por el capitalismo, “de lo cual no difiero, ya que el capitalismo tiene la cultura de la generación de plusvalía sin consideración alguna por el prójimo”, 3.- El socialismo en su práctica económica, deja por fuera lo que comúnmente caracteriza al capitalismo como lo es la plusvalía, es decir, que en la práctica Socialista Bolivariana el producto llegaría directamente al consumidor al canalizar por otros medios la adquisición de la misma, eliminando así las compras y reventas que genera al consumidor final el pago por determinado producto hasta más de dos veces su valor. “Sería lo más idóneo, evitaría los costos elevados actuales y habría otra conciencia de la satisfacción al prójimo y la solidaridad.

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