La dignidad de la persona en la sociedad

ETICA

INTRODUCCIÓN

LA VIRTUD Y LA MORAL

La virtud hace que las personas puedan tomar las decisiones correctas en las situaciones más difíciles, y con empeño, esmero, animo y dando lo mejor de sí mismas, volcarlas a su favor, logrando su objetivo sin perjudicar a los demás, es el sacrificio que una persona realiza para hacer algo moralmente bueno, realizarla con un animo espiritual positivo, con ganas, alegremente, venciendo las barreras que se interponen a uno.

El virtuoso es la persona que sabe salir de cualquier problema de buena forma, tiene cualidades positivas y las pone en práctica.

Las virtudes están sometidas a los cambios de culturas o épocas determinadas en una sociedad, son percibidas, realizadas de diferentes maneras de acuerdo a la circunstancia.

Las virtudes no son impuestas por las leyes, o por lo que aprueba la mayoría, sino del ser humano en si mismo, de su interior, de su realidad sicológica, personal y hasta social.

La virtud se relaciona con la superación del ser humano, con el saber cuando algo esta bien o mal y realizarla de la mejor manera, el valor para realizar dicha acción, a pesar de las dificultades que pudiera tener, interactuando con la sociedad que lo rodea, pero llegando al fin sin interponer los objetivos personales sobre los colectivos

REDESCUBRIENDO LAS VIRTUDES

Cuando hablamos de virtud, nos debemos referir a que la persona deberá tener el valor y la fuerza de superarse y estar permanentemente alerta para no estancarse en la sociedad y en la construcción de su persona, seguir adelante para ser una persona buena, para realizarse individualmente y en la sociedad actuando correctamente.

LA FORTALEZA

Es la virtud de estar siempre de pie, firme, resistir ante las adversidades o peligros que pudiera tener, seguir ante una situación que no sea agradable o perjudicial, y no ceder no resignarse.

Es la actitud de la persona ante un obstáculo con una fuerza interior y espiritual que permite vencer dicho obstáculo valientemente, es el domino de uno mismo que permite seguir en la lucha sin detenerse.

LA JUSTICIA

Cuando la injusticia se hace constante y repetitiva, ya no llama la atención cuando esta se realiza, la sociedad esta habituada a las injusticias. Todas las injusticias a las que son sometidas las personas, pasan todos los días y pasan desapercibidas por la constancia y naturalidad con la que ya son percibidas por todos en común. A raíz de eso, que nos toca a todos, la injusticia esta en nuestro actos cotidianos, consiente o inconcientemente porque nos parece normal. La justicia es dar a cada uno lo que le corresponde y hacerlo un hábito, es respetar los derechos que los demás tienen, no solo porque la ley lo dice, sino por la dignidad que cada persona debería tener humanamente.

Todos somos iguales como personas y debemos tener la misma dignidad, los mismos derechos.

LA PRUDENCIA

La prudencia es la virtud de actuar con cautela, tranquilidad y seguridad, en forma justa y adecuada, respetando la vida, los derechos, libertades de todas las personas, es la capacidad de poder discernir, razonar en cada circunstancia entre lo bueno y lo malo y lo que se debe hacer y como hacerlo, con la mayor objetividad posible.

LA TEMPLANZA

La templanza sirve de soporte a las demás virtudes. Es la virtud que regula la atracción o deseo por los placeres dominándolos y no hacer del placer un fin en si y no para la satisfacción de una necesidad,

...