La niña de los fósforos.

Materia: Secretariado

Nombre del alumno: Favi Yectlanezy González Vargas

Docente: Noelia Reyes Flores

Fecha: 24/09/14

No. práctica: No 18

La niña de los fósforos

Hacía mucho frío, nevaba y el cielo comenzaba a enturbiarse, era la última noche del año. Descalza y con la cabeza descubierta, una pequeña vagaba por la calle en medio de aquel terrible frio. En su viejo y roto mandil llevaba unas cuantas cajas de fósforos que ofrecía a todos lo que pasaban, pero nadie le había comprado durante el día. Tenía mucha hambre y estaba congelada, a pesar que los pocos de nieve comenzaba a cubrirle su larga y rubia cabellera, ella proseguía su camino. Había luces en todas las ventanas y hasta la calle llegaba el olor a pavo asado se sintió cansada luego de caminar tanto y se acurruco en un rincón que había entre dos casa, tratando de cubrirse los pies con el vestido, pero a cada momento el frío la iba invadiendo más y más, no quería regresar a su casa porque no había vendido un sólo fósforo y tenía mido de que su padre la golpeara. Además, en su casa asía tanto frío como en la calle, ya que sólo la abrigaba el techo, pues el gélido viento entraba por todas partes. La pobre niña tenía las manos muy heladas. ¡Ha!, un fósforo prendido se las habría calentado ¡pero si se atreviera a usar uno sólo de estos! entonces, la pequeña tomó uno, lo frotó y ¡ritch! se encendió la cabecita del fósforo y su flama cálida iluminó y el miserable rincón donde se encontraba. Colocó sus manitas sobre ella y se imaginó que se encontraba sentada frente a una enorme chimenea y que el fuego ardía tanto que era un deleite entrarse ahí... estiró los pies para calentárselo, pero se apagó la flama. La chimenea desapareció y se encontró en el suelo con un fósforo quemado entre sus dedos.

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