Murgas De Sur A Norte

1- Introducción:

El tema a tratar serán las murgas, tanto en el sur del país como en el norte, éste concepto abarca múltiples dimensiones, desde el género, identidad, la repercusión que ha tenido desde Montevideo hasta Artigas, como también ha ido evolucionando desde el estilo, el impacto que ha tenido en nuestro departamento y en los ciudadanos más arraigados al carnaval brasileño.

Debemos plantearnos como docentes si tenemos el deber de inculcarles nuestra cultura a los educandos para que tengan siempre presente cuál es su identidad y cuáles son sus raíces.

Este fenómeno artístico y social se ha ido construyendo de forma paulatina en nuestro país, tornándose algo nuestro en definitiva, por ello merece una atención más profunda dentro del ámbito escolar, ya que hace parte esencial en la conformación de nuestra cultura en general.

Es importante el ayudarles a nuestros alumnos en que espejo deben reflejarse, tratar de que también los mismos no terminen por hacerlo en un espejo truncado confundiéndolos sin dejarles visualizarse e identificarse.

2- Concepto de Murga

Consideramos pertinente tratar de construir un concepto de murgas a partir de otras definiciones, esto nos permitirá hacer un paralelismo y ver la evolución del mismo desde diferentes ópticas y momentos de la historia.

Según el diccionario de la Real Academia Española el término murga se define como (1889): “compañía de músicos instrumentistas, más o menos numerosa, que a pretexto de Pascuas, cumpleaños, etc, tocan en las puertas de las casas acomodadas con la esperanza de recibir propinas”.

Si bien esta definición sobre murga se aleja y difiere un poco de como la conocemos en nuestro país, en la actualidad existen ciertos elementos de dicha definición que encajan perfectamente cómo ser la compañía de músico instrumentistas más o menos numerosos.

Ya una definición oficial que se aplica para el Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavaleras para nuestro país cita lo siguiente:

“La Murga, esencia del sentir ciudadano, conforma una verdadera autocaricatura de la sociedad, por donde desfilan identificados y reconocidos, los acontecimientos salientes de la misma, lo que la gente ve, oye y dice, tomados en chanza y en su aspecto insólito, jocoso y sin concesiones, y si la situación lo requiriera, mostrará la dureza conceptual de su crítica, que es su verdadera esencia…”.

Aquí vemos dos conceptos enfocados en las murgas en diferentes épocas, una enfocada más a la murga tradicional, para ser más específicos la murga original, y la segunda más actualizada y contextualizada a nuestro país, en donde se nota como este género va más allá de ser una compañía más o menos numerosa y engloba a la sociedad en general, el sentimiento, la pasión que despierta en las personas y los variados temas sociales que estos toman como crítica, caricaturizando sucesos del ámbito social y a su vez creando controversia a través de sus letras.

Podemos entonces llegar a decir que las murgas en nuestro país abracando estos dos conceptos serían un grupo de personas los cuales buscan el criticar a la sociedad y sus problemas a través de la música y el entretenimiento, caricaturizando las mismas a modo de generar conciencia y hacer reflexionar a las mismas de lo que sucede en su entorno. Además de ello tratan de generar disfrute y clima de festejo a través de grandes espectáculos con sus melodías alegres y de mucha euforia.

3- Murgas desde sus raíces hasta la actualidad

Etimológicamente la palabra murga tiene su origen en España, y es un vocablo el cual proviene de musga, forma mal pronunciada de la palabra música.

En nuestro país ha cobrado un significado diferente, se incluyen conjuntos de artistas y personas de la comunidad las cuales se encargan de representar el Carnaval.

Las murgas como género surge durante el primer gobierno de Claudio William y su origen se relaciona con una de las compañías de zarzuelas provenientes de España.

Al comienzo y cómo define la Real Academia Española este conjunto de músicos españoles que conformaban orquestas desafinadas y desentonadas, solían pedir dinero y a hacer parte de eventos como ser fiestas populares o conmemoraciones.

Se estima que la murga en nuestro país se originó en el año 1909 con la llegada de una compañía de zarzuelas procedente de Cádiz llamada “La Gaditana” que se vio dirigida por el actor Diego Muñoz, esta se considera la primera murga española en Montevideo. Esta compañía “La Gaditana” se vio atascada en nuestro país al no tener dinero para retornar a España por lo que deciden crear en honor a la misma otra compañía, la llamada “La Gaditana que se va”. Si bien ya podemos notar aquí cierta ironía y humor ácido al colocar un nombre tan sugestivo, ya que es una de las características de las murgas en el momento de hablar de problemas sociales utilizando un tinte de humor negro.

Tanto “La Gaditana que se va” como otras compañías de murgas que surgieron posteriormente, contaban al comienzo con solo seis integrantes más su director. Estas ejecutaban variados instrumentos como flautas, pistones, saxofón, bombos y platillos, a los que también se incluían instrumentos caseros tales como cañas o tubos con una hojilla de fumar al extremo en donde los murguistas hacían vibrar su voz. Algunos a modo de percusión utilizaban una batería de cocina.

Líricamente y como explicamos con anterioridad estas compañías hacían críticas a la alta sociedad a partir de lo que ellas denominaban “versos zafados”, igualmente dichas letras no se limitaban únicamente al escándalo, sino que también hacían alusiones al futbol, deporte ya muy popular en esa época.

En lo musical el género comenzó a adoptar elementos del candombe, en donde el mismo comenzará a enriquecerse de múltiples ritmos, gran parte de ellos afroamericanos, o para ser más específicos adoptados del folklore afro-uruguayo.

En la actualidad en nuestro país estas compañías se componen con un mínimo de catorce y un máximo de diecisiete integrantes, siendo las más populares en nuestro país “Agárrate Catalina”, “Asaltantes con patente”, “Curtidores de hongos” y “Arca la cana”. También siguen la línea del humor en sus letras en cierto tono de protesta punzante, inteligente, crudo y reflexivo, haciendo sátiras políticas,

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