Neoliberalismo Carlos Freites
tiraca24 de Marzo de 2014
2.913 Palabras (12 Páginas)500 Visitas
NEOLIBERALISMO
El último de los modelos dice relación con la reconsideración de la economía clásica por parte de una serie de autores, en los que destacan Hayek y Friedman. También conocido como monetarismo, el modelo neoliberal genera una menor intervención del Estado frente al fracaso del mismo para resolver los problemas nacionales. Ocupado por la mayoría de los países latinoamericanos en la década de los ochenta, destacando el régimen del General Pinochet en Chile, el gobierno neoperonista de Carlos Saúl Menen en Argentina y las políticas de Alberto Fujimori en Perú. El modelo neoliberal se caracteriza por:
• Apertura de los mercados: se eliminan una serie de aranceles y otras políticas proteccionistas, especialmente con las industrias propias de los modelos estatistas y socialistas. De esta forma desaparecen una serie de fuentes de trabajo y se crean otras, principalmente ligadas a la extracción de materias primas y la agroindustria (Especialmente Chile y Argentina)
• Disminución del gasto social: Como medida urgente que se plantea el modelo neoliberal es equilibrar las cuentas fiscales y disminuir los índices inflacionarios, de esta forma surge como una prioridad la disminución del gasto fiscal; como los gastos relacionados con educación, salud y previsión los cuales son recortados.
• Privatización de gran parte de las empresas públicas: la privatización surge ante la continua crítica de la eficiencia del estado en el manejo productivo; Al vender las empresas públicas al sector privado, se generan dinero importante para gastos e inversiones estatales fuera del ámbito productivo y se fortalece el sector productivo privado, base del desarrollo según el neoliberalismo.
REVOLUCIONES Y REFORMAS EN AMERICA LATINA
Revoluciones y Reformas, América Latina iniciando el siglo XX
El siglo XX implicó para América Latina un nuevo escenario que originó cambios políticos y sociales. La región había salido paulatinamente del control español lo cual generó una serie de sangrientos y largos enfrentamientos entre las tropas patriotas y monárquicas, tiempo después los mismos ganadores de la
guerra de Independencia se envolvieron en rencillas internas por la obtención del poder político de las nacientes repúblicas.
Dos son los procesos revolucionarios más importantes de la centuria: la Revolución Mexicana (1910–1919) y la Revolución Cubana (1959), los cuales marcaron a toda una generación y otorgaron a los habitantes de América Latina una nueva concepción del mundo político, social y económico.
La Revolución Mexicana, 1910-1919.
La elevada inversión de capitales extranjeros involucró industrias ligadas a la extracción del petróleo y también servicios básicos, lo cual modernizó muchos aspectos de la vida en México. Sin embargo esta modernización no llegó a toda la población, de esta desigualdad se generó un sentimiento descontento.
Este sentimiento generó la aversión ante el dictador Porfirio Díaz (1877–1911), quien vivía muy desconectado de la realidad social.
En este escenario aparecerán las figuras de Francisco Madero (autoproclamado presidente de los Estados Unidos Mexicanos); Pancho Villa (agitador rural que buscaba la reforma agraria) y Emiliano Zapata (agitó las masas indígenas en busca de mejoras sociales.)
La Revolución Mexicana marcó un precedente sobre el poder popular y lo que podía lograr. El poder popular había derrocado al orden establecido, es por ello que la Revolución cumplió su objetivo, a pesar de las pérdidas humanas y materiales que trajo. La Revolución definió un estilo de vida, generó un estilo musical, el corrido mexicano – y mitificó figuras como la de Pancho Villa o de Emiliano Zapata, este último fue la base del Movimiento Zapatista que a finales de 1993 generó un levantamiento indígena en el estado de Chiapas.
La Revolución Cubana, 1959
Cuba fue uno de los últimos dominios españoles que se independizaron. Después de un intento fallido de independencia entre los años 1868-1878, se estrecharon los lazos comerciales con los Estados Unidos.
Estados Unidos ayudó a los cubanos en la Guerra Hispanoamericana en 1898 donde España salió derrotada y tuvo que firmar la Paz de París con el fin
de reconocer la independencia de la Isla. Desde entonces Cuba quedó ocupada por las fuerzas norteamericanas hasta 1902, cuando se definió un protectorado sobre la Isla a través de la Enmienda Platt, en la cual se estipulaba que Estados Unidos mantenía bajo su control algunos recursos naturales como el carbón, y estratégicos como las bases militares. Esta condición hizo que grupos liberales cubanos se sublevaran en contra del Presidente Estrada Palma, sin embargo fueron reprimidos por las fuerzas estadounidenses entre los años 1906 y 1909.
Durante la mitad del siglo XX Cuba tuvo la intervención de los Estados Unidos, hasta que el dictador Fulgencio Batista (1952–1959), quien fue depuesto a través de una Revolución liderada por Fidel Castro.
Fidel Castro, en su calidad de abogado, solicitó un juicio a Fulgencio Batista por la violación a las leyes del Código de Defensa Social, por su llegada tras un golpe de estado. A pesar de ello esta medida no fructificó. Tras esta derrota en tribunales, Fidel Castro decidió la vía revolucionaria para devolver a la isla un gobierno democrático, así el 26 de julio de 1952 hizo un ataque armado al Cuartel Moncada con el fin de aprovisionar un ejército revolucionario, dicha misión fue un completo fracaso: varios heridos, muertos y el líder de la sublevación prisionero y sentenciado a la cárcel hasta 1955, año en que fue amnistiado y se exilió en México, donde organizó un nuevo grupo armado con la colaboración del médico Ernesto “Che” Guevara y el Coronel Alberto Bayo, veterano de la Guerra Civil Española, planificando así el retorno a Cuba en 1956.
Recibiendo el apoyo de la burguesía azucarera, Castro y su guerrilla se pudieron internar en la isla, llegándose a un acuerdo con el fin de derrocar el gobierno dictatorial a través del Frente Revolucionario Democrático que trazó los lineamientos básicos del fin de la administración de Batista: la vía armada para llegar al poder, más tarde organizar un gobierno provisional que sería la preparación para uno constitucional, democrático y soberano, poniendo fin al protectorado norteamericano. La victoria revolucionaria se alcanzó en 1959 con la renuncia y posterior exilio de Batista. Inmediatamente se organizó un gobierno de transición el cual comenzó una política proteccionista, destinada a nacionalizar la banca, las refinerías de azúcar, emisoras radiales y televisivas,
compañías telefónicas y servicios básicos, los cuales se encontraban en manos norteamericanas en su mayoría.
Esta medida fue respondida por Estados Unidos, quien utilizó medidas tendientes a colapsar el sistema económico a través del cierre del mercado azucarero y el apoyo contrarrevolucionario en la isla que buscaba derrocar al régimen. Ante esta situación el gobierno provisional abrazó las ideas revolucionarias de corte socialista y se alió con la URSS, lo cual causó más tensión internacional.
Con la URSS como aliada, Fidel Castro se consolidó en el poder y el gobierno transitorio se transformó en una de las dictaduras más largas de la Latinoamérica (que tiene más de 40 años).
En 1960 en el foro de la Organización de Estados Americanos (OEA) en San José de Costa Rica, Estados Unidos acusó formalmente a la política cubana a la URSS de intervenir en América. Cuba pronto se convirtió en un peligro para los intereses norteamericanos en el bloque occidental, hacia 1962 se desató un problema político, diplomático y militar denominada la Crisis de los Misiles Cubanos, que tuvo al mundo durante trece días a borde de la guerra nuclear.
Con el desarrollo de la dictadura castrista, muchos disidentes y refugiados políticos fueron exiliados, otros condenados a penas cárcel y algunos con menos suerte, ejecutados. Los cubanos que partieron al exilio fueron acogidos por los Estados Unidos como medida de atacar al régimen de Castro, ubicándolos preferentemente en el estado de Florida.
LOS GOBIERNOS AUTORITARIOS, EL CESE DE LA VIDA DEMOCRÁTICA.
Las revoluciones en México y en Cuba marcaron a la sociedad americana y sentaron un precedente importante para las generaciones posteriores. Hacia 1960 se concretaba en los estados latinoamericanos un lento proceso de industrialización con el fin de salir del subdesarrollo, a pesar de ello no solucionaron el problema de la mala distribución de la riqueza y la concentración del poder económico en pocas manos.
Naciones como Perú, Bolivia, Ecuador, Guatemala y México tenían una gran población indígena, que superaba con creces el 40%, la cual estaba ligada
a graves problemas de pobreza, analfabetismo y delincuencia. A partir de la
segunda mitad del siglo XX se generó una creciente efervescencia social de trabajadores urbanos y rurales, profesionales y estudiantes, donde todo el espectro social estuvo involucrado en busca de mejoras generalizadas para lograr la ansiada igualdad.
Este nuevo panorama, inserto en la Guerra Fría, motivó la búsqueda de una solución, a través de las ideas del marxismo, pues el capitalismo era, al parecer, el causante de los males de las sociedades pobres. Naciones como Cuba abrazaron las ideas del
...