Novela

Un día no muy lejano visité el parque de mi vecindario con mi madre cuando de repente un niño se me acero y me dijo ¡Hola! ¿Quieres jugar? Por supuesto yo accedí y en ese preciso instante comenzamos a jugar a la pelota, su nombre era Santiago, tenia 8 años igual que yo y desde ese momento empezó todo…

Luego de ese día pasamos muchos años jugando, disfrutando, y compartiendo momentos inolvidables, tumbando obstáculos y otras cosas que serian parte de nuestra amistad luego el se mudó al piso de arriba de mi edificio, fue mejor aun todo esto, estudiábamos juntos y en las tardes jugábamos hasta que atardecía, junto a varias personas y vecinos .

Cuando cumplimos 14 años algo cambio entre nosotros una magia surgió de un momento a otro los ratos de juegos los cambiamos por sentarnos en las escaleras, hablar, reír y por ende ser felices cierto día de septiembre unos pocos días antes de cumplir 15 años nos reunimos como de costumbre en las escaleras a hablar en un instante sentí como el tiempo se detuvo y la melodía desapareció nos miramos fijamente y en cuestión de segundos acercamos nuestros labios en un beso de amor, ese beso en el que sientes que nadie existe y que todo gira en tu entorno.

Así fue nuestro primer beso, nuestro comienzo y el inicio de una increíble pero hermosa historia de amor. Ese día me di cuenta que estaba profundamente enamorada de el niño que alguna vez me invito a jugar.

Nunca dejamos de vernos en nuestro nidito de amor, recuerdo cuando un día fui a su casa a ver una película y en un instante indeterminado sus dedos comenzaron a recorrer mi espalda y un roce de labios dio la bienvenida a un beso, por primera vez me sentí plena, estaba enamorada y era correspondida, pero jamás pensé que las cosas cambiarían.

II

Los problemas comenzaron a surgir, el tiempo para ambos empezó a encogerse, las personas incluyendo mis padres intentaban separarnos, pensé muchos en esos días de terror todos intentaban hacerme creer que fue un error conocerlo, que fue un error besarlo y que fue un error amarlo, que fue un error que mi corazón se enamorara.

Mis amigos me abandonaron y a el lo sentí muy distante, mi corazón se partía en mil pedacitos y decidí ponerle fin a todo ese dolor.

Con mi corazón roto volví a casa fingiendo que nada pasaba ¿pero como lo explicas a el corazón que ya no lo debes amar? Me alejé de todo, por un mes, sin querer oír a nadie y solo quería estar cerca de Santiago.

Luego mi familia decidió mudarse al otro lado de la ciudad y esto me ayudo a olvidarlo pues ya no lo veía a diario compartir su cuerpo, ocupar su tiempo con otra persona. Que ahora estar en mi casa me producía mucha alegría en ves de tristeza

A través del tiempo ambos reiniciamos nuestras vidas por separados, tuvimos parejas diferentes compartimos muchas cosas.

Un día decidí visitar el parque donde nos conocimos, pues tenia mucho tiempo que no lo hacia por miedo a encontrar allí un príncipe azul, estuve bastante rato paseando y observando cambios, cuando decidí irme me di cuenta que el estaba allí en el mismo lugar donde nos conocimos.

Mi corazón comenzó a latir muy fuerte, trate de mantener la calma pero el brillo de mis ojos se notaba a kilómetros y fue allí cuando no lo vi más y justo después apareció en mi espalda y con un suave susurro me dijo “Puede que te hayas ido pero en mi mente siempre estas” luego de ignorar lo dicho, lo salude y empezamos a hablar como unos amigos que se conocían muy bien, no tarde mucho y empecé a hablarle de nosotros con lagrimas en mis ojos pude decirle que lo extrañaba y que aunque intentaba olvidarlo no podía…

Pensé que no quería hablar sobre el tema porque duro algunos minutos sin palabras, pero luego empezó a hablar y desahogarse, sus palabras realmente me daban alivio pues a través de ellas descubrí que el

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