Poesia Epica
Enviado por vale_28 • 15 de Julio de 2011 • 465 Palabras (2 Páginas) • 3.023 Visitas
LA POESÍA ÉPICA
“Epica” proviene de “epos” que significa palabra, discurso.
La poesía épica trataba temas de los tiempos heroicos, principalmente la Guerra de Troya. Los poemas homéricos nacieron en Jonia, Asia Menor, hacia el siglo VIII A.C. Allí se habían establecido pueblos de origen aqueo que debieron abandonar su país ante el empuje de los invasores dorios que irrumpieron en la península balcánica alrededor del 1200 A.C.
La aristocracia helénica establecida en Jonia gustaba oír a los aedos que cantaban las hazañas de sus remotos antepasados aqueos.
El aedo, poeta y cantor, canta para un auditorio restringido en el que goza de gran aprecio y consideración; celebra la gloria de los guerreros y su canto es inspirado por la Musa. Aunque es lícito pensar que en los tiempos homéricos debió existir una poesía popular que se nutrió con
los mismos temas, lo cierto es que la épica exalta a una aristocracia militar que cifraba su grandeza en la gloria, la fama, la belleza corporal y la posesión de riquezas.
Al establecerse en las costas del Asia Menor, los pueblos que fueron desplazados por los dorios cambiaron su forma de vida. Los aedos que cantaban en Jonia lo hacían para una aristocracia de comerciantes y terratenientes que escucharían con nostalgia el relato de las hazañas guerreras de sus remotos antepasados.
Una larga tradición de heroísmo, mitos y leyendas ofrecía al aedo abundante material para componer sus cantos. Pero no era un relator de crónicas guerreras, sino un creador, un verdadero poeta.
La poesía estaba asociada íntimamente con la música. Grandes poetas fueron también músicos importantes. No han llegado hasta nosotros ejemplos de la música griega de la antigüedad, pero todo hace supone que el canto del aedo estaba más próximo al recitado rítmico que a la melodía.
La poesía griega se regía por principios diferentes a los que nos son familiares. Las palabras se ordenan en el verso según la cantidad, , es decir, el tiempo que se requiere para pronunciar una sílaba. Hay en griego sílabas breves y sílabas largas, cuyas diferentes combinaciones dan lugar a los diferentes pies. El verso épico es el hexámetro dactílico (hexámetro: seis pies; dactílico: es el pie que consta de una sílaba larga y dos breves.
Junto a los Aedos, y sobre todo después que éstos desaparecen y ya no componen nuevas epopeyas, tenemos a los rapsodas, que dotados de excelente memoria, serán los depositarios del repertorio épico.
No eran creadores sino intérpretes y sólo recitaban , sin acompañamiento instrumental. Con los rapsodas la epopeya sale del ambiente exclusivo de la aristocracia y se populariza. Se atribuye a Pisístrato, tirano
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