Primer semestre- La edad Antigua

Primer semestre- La edad Antigua

• Asmabel (Tussis)–PRIMER TITAN

Terminadas las 7 semanas del Génesis del Pangea los habitantes de este lugar además de lidiar con su  establecimiento, adaptación y próxima socialización tuvieron que enfrentarse al primer Titán: Tussis,  que se convertiría en la más desgastada y vieja de todos los que la sucederían en medio de aquella caótica situación. Tussis venía del ´´Asthma´´ y los pangeanos se vieron afectados por sus ataques de ira en los que a momentos parecía colapsar, hecho que provocaba angustia y deseo ante la mera idea de pangeanos por verle caer; sin embargo con el tiempo estos se tuvieron que resignar a que el acto era mero drama que no culminaba más que en la recriminación de su ignorancia. Desde sus inicios con la llegada de Tussis los pobladores de pangea comenzaron a cuestionarse sobre la calidad de hábitat en la que se desenvolvían y a reflexionar acerca de la autoridad de los Titanes. En el transcurso del periodo en el que este Titan ejerció su autoridad, los pobladores comenzaron a adaptarse a la pasividad, aceptando el derroche al que eran obligados y el yugo al que estaban sometidos, convirtiéndose ello en la rutina que seguirían un largo tiempo. Entre los pobladores buscaban jugar su mejor cara realizando pequeñas estrategias con aisladas alianzas. Cada pangeano velaba por sus intereses y actuaban en grupo por mero instinto de supervivencia. Pasadas las semanas los habitantes se vieron obligados a asistir a eventos impuestos por el Titan supremo, que se regocijaba en los tributos otorgados y negaba recibir ante los pangeanos pero que en público alardeaba conseguir y tomaba los múltiples créditos.

Con Tussis pangea se dio cuenta de las falsas modestias, los falsos elogios, la falsa belleza y… en pocas palabras la falsedad, además del gran conflicto que ocurría entre Titanes. Tussis agudizaba en sus crisis con semejanza de colapso, lo que los pobladores tomaron a mofa como desquite y le apodaron ´´Asmabel´´ aunque lejos de su presencia por la inseguridad de lo que aquello podría repercutir, a pesar de ello la acción forjó confianza entre pangeanos para una conspiración que quedó sembrada en la mente de más de algún habitante que iba en busca de rebelión y libertad. Tristemente los ánimos fueron cayendo y tan solo alimentaron aquellas almas con cargas intensas que se fueron hasta lo más profundo y fue así como los próximos Titanes vendrían a ser examinados más meticulosamente y estudiados para encontrar un punto de debilidad del cual desquitarse a modo de burla por lo pronto.

Cuarto –Siglo de la Ilustración

• Elbita –DILUVIO UNIVERSAL

En medio de todo el caos que era pangea en esta etapa catalogada en el siglo de la ilustración, con la lucha por el poder que se venía dando y en la que al parecer había triunfado la Nericracia por encima de las demás. También teníamos el reciente acto de pacificación que provocaría más adelante la llegada de un nuevo Titan catastrófico, causante de uno de los peores fenómenos climáticos de pangea: Elbita, la lluviecita que acabó en un diluvio universal que no trajo consigo nada más que destrucción y arrasó con lo que pudo a su paso. El día en que se avecinaba todo parecía tranquilo, la tensión era demasiada, todo comenzó a elevarse y a cargar los cielos tornándose en una espesa negrura de odio, poder y ego; entonces Elbita levantó los brazos y el diluvio impactó al pueblo pangeano. Nadie esperaba la catástrofe, fue la primera vez que el pueblo pangenao fue tomado por sorpresa. Con la llegada de este titán se esperaba paz y armonía dentro del caos que había dejado la despedida de un benévolo titán anterior, pero el pueblo descubrió que su tormento iría aumentando con el paso de los días. Las agua se elevarían aún más, y el pueblo trataba de sobrellevarlas con paciencia, pero llego uno de los primeros detonantes de la lucha de Pangea  por su libertad, aquello que los Titanes nos proporcionan como mediadores para nuestra supervivencia dentro de su dominio, esta maquiavélica Titán lo uso como un arma que comenzó a minar la paciencia y la compostura de la que el pueblo de Pangea ya empezaba a carecer.

Las barreras que había entre el pueblo y el Titán comenzaron a sucumbir con batallas por el poder, batallas que le dejarían claro a Elbita que el pueblo pangenao no era cualquier cosa, era un pueblo bien evolucionado con capacidades que ella nunca había enfrentado en continentes ajenos, y un pueblo que no cedería ante burdas muestras de supremacía que sólo dejaban al Titán debilitado ante los ojos no sólo de Pangea, sino de otras tribus no civilizadas.

Todo siguió su curso, las continuas luchas se hicieron algo común, pero entonces sobrevino la gota que derramo el vaso, una gota que nadie más que Elbita pudo haber derramado. El pueblo se enfureció y supo que era momento de la sublevación total contra esta simple mortal que creía ser una Titán como los anteriores a los que Pangea se había enfrentado. La Titán tembló ante el poder de Pangea y se dobló ante los ojos del pueblo. Pero aún con esto, Titán o no Titán, Elbita se encontraba en las líneas del Gran señor Jurado, por lo que Pangea desafortunadamente tuvo que ceder una vez más ante la barbarie. Pangea  consiguió un buen acuerdo, conveniente para su pueblo, y Elbita sabría que no tendría el mismo dominio sobre ellos si se enfrentaban de nuevo.

...