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DÍA FELIZ

Había una vez una niña llamada Mariana que le encantaba jugar con la arena en la playa mirar al cielo y contemplar las aves que volaban sobre el., Mariana acostumbraba a ir todos los días a este lugar decía que eso le daba mucha felicidad., cierto día la niña se encontraba ahí cuando de pronto se le acerco una mujer la cual lloraba sin consuelo, al verla Mariana se le acerco y le dice “Hola” a que ella mujer levanta la vista y con un gesto, si muchas ganas de hablar con una niña pequeña le dijo “Hola” Mariana le dice estoy construyendo, y dijo ella “ya veo… que es”, le dijo la mujer sin darle mucha importancia. No lose me gusta sentir la arena. Eso suena fantástico pensó se quito los zapatos. De pronto, una gaviota paso volando “la felicidad y la paz”, dijo la niña ¿qué es? Es la felicidad mi mamá dice que las aves blancas viene para traernos felicidad y paz.

El ave se fue deslizando suavemente por la playa hasta luego felicidad y paz murmuro la mujer interiormente, “Hola dolor”, dijo fuera de control. Mariana no se rendía ¿Cómo se llama? pregunto Catalina le respondió me llamo Catalina Gonzales y yo soy Mariana y tengo 8 años Hola Mariana dijo, ella sonrió que graciosa es pensó Catalina. En el lugar de seguir triste también se sonrió, se levanto camino y cuando llevaba unos cuantos pasos le dice Mariana “vengo otra vez y tendremos otro día feliz y en paz”.

Pasaron los días y en la vida de Catalina todo era problema con sus hijos, reuniones, su madre enferma, pacientes que atender y una investigación sin resolver. Una mañana en la que el sol brillaba radiantemente Catalina decidió alejarse de todos esos problemas que tenían y dijo necesito una ave blanca y cogió su saco y salió hacia la playa de camino pensaba en el bálsamo de las olas del mar que la esperaba., camino rápidamente, a pesar de la brisa fría, trataba de recuperar la serenidad que tanto necesitaba… había olvidado a la niña y se sobresalto cuando ella apareció Hola señora Gonzales ¿Quiere jugar? ¿Qué tienes en mente?, le pregunto no lo sé, Ud. diga que ¿Qué tal unos chistes? Le pregunto sarcásticamente. Ella se rio diciéndole “no se jugar a eso” entonces caminemos dijo Catalina y al mirarla se dio cuenta de la delicada palidez de su rostro y pregunto ¿Dónde vives? Por allá dijo y señalando hacia una fila de cabaña de verano., la mujer le pareció raro ya que estaba en invierno “a que escuela vas” no voy a la escuela mi mamá dice que estamos en vacaciones caminaron hacia la playa hasta la atardecer cuando se iba a su casa Mariana le dijo que había sido un lindo día la mujer se sentía mucho mejor, le sonrió y ambas concedían., cuatro semanas después corrió aquella mujer nuevamente a la playa sumida en un estado de pánico y tristeza sin humor ni si quiera para saludar a Mariana la mujer creyó

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