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Sistema Penal Y Control Social


Enviado por   •  14 de Agosto de 2013  •  8.820 Palabras (36 Páginas)  •  375 Visitas

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SISTEMA PENAL Y CONTROL SOCIAL

EQUIPO N#1

Luis Medina C.I: 5.280.992

Carmen Martínez C.I: 7.178.221

Ratiba Haskour C.I: 10.755.335

Joizi Rodríguez C.I: 14.104.723

Anaixa Gainza C.I: 16.406.472

Maracay, Julio de 2.013.

INTRODUCCIÓN

El sistema penal es constitutivo de representaciones y relaciones sociales, de políticas públicas, de discursos de poder, e incluso de su propia configuración lingüística, la ley penal; en suma representa lo cotidiano de las sociedades actuales. Por ello resulta necesario evaluar el estado del sistema penal y el papel que juega en la democratización del poder punitivo. Más aún si en materia penal continua el criterio de los últimos años: aumentar las penas; en realidad, ésta es prácticamente la única política criminal en la lucha contra el delito, puesto que equivocadamente se piensa que el endurecimiento de las penas tiene un importante efecto preventivo; cuando ello no es así, pues son los factores que concurren en la criminalidad los que determinan la delincuencia de un país.

En ese contexto, el presente trabajo pretende llamar la atención sobre la concepción del sistema penal en la sociedad contemporánea. Es importante partir desde el estudio del sistema penal porque en él se entrecruzan varias disciplinas como: las jurídico penales y procesales, puesto que si no hay una definición jurídico penal del comportamiento criminal, mal podemos hablar de control social punitivo en el marco de un Estado de Derecho. Para ello comenzamos nuestra investigación por la conceptualización de los términos orden social y control social, así como sus diferentes perfiles de manifestación, siempre con especial referencia al Sistema Penal como mecanismo de control social. Proponiéndonos entonces en esta materia un ejercicio de reflexión crítica de la forma tradicional de abordar esta temática.

El control social es una de las bases del orden que rige al mundo y podría considerarse que es uno de los temas más importantes para la criminología. Este control no necesariamente es represivo, ya que existen medios de control persuasivos, los cuales pueden llegar a fomentar mejor el orden dentro de una comunidad. Estos medios son los encargados de impartir la educación, los valores y la enseñanza de las buenas costumbres. Como se sabe a las instituciones que llevan a cabo esta labor se les denomina entes de control social informal. Cabe destacar que estos entes a pesar de no ser establecidos por el estado legalmente, cuentan con un alto grado de legitimidad hacia los miembros que la integran, quienes acatan las normas impuestas, inclusive voluntariamente, debido a la influencia que ejercen sobre cada individuo, quienes internalizan estas normas de forma casi inconsciente.

Desde hace varios años parece advertirse un claro desfase entre el funcionamiento real de nuestra policía y las expectativas que la población y el gobierno colocan sobre ella respecto a la atención y contención de la problemática de la inseguridad. El alto nivel de delitos, persistente en nuestro medio desde hace casi dos décadas, acentúa la percepción disvaliosa del funcionamiento policial lo cual no sólo afecta de manera central la calidad de vida de la población, sino que lastima también la legitimidad de los gobiernos y del propio sistema democrático ante tentaciones de facilismo autoritario. ¿Cuáles son las razones de la incapacidad del sistema de seguridad para contener y reducir el delito en sus configuraciones actuales? Respecto de las mismas se han sostenido diversas tesis: falta de recursos; obsolescencia de marcos legales; deficiente capacitación del personal; benignidad de las leyes penales; ineficiencia y colapsamiento del sistema de justicia criminal; no erradicación de la doctrina de la “seguridad nacional”; cultura autoritaria; etc. En muchos casos estas respuestas se han traducido en concretas decisiones de carácter político. Sin soslayar la naturaleza compleja y multicausal del fenómeno, concentramos nuestro análisis en el subsistema policial y su crisis.

Las sociedades desde los primeros tiempos de convivencia ya mantenían un orden y una estructura que es denominada como control social. Con el paso del tiempo y el crecimiento de las sociedades este control social se ha visto obligado a fortalecerse y a institucionalizarse llegando así al Derecho Penal.

EL CONTROL SOCIAL

El control social es un conjunto de mecanismos que tienen por propósito el hacer que el individuo llegue a acatar normas éticas, morales, religiosas y jurídicas durante su convivencia con seres semejantes a él.

Básicamente, el “control social” van a ser una serie de mecanismos institucionalizados o no (informales o formales) que van a regular la vida y la conducta del individuo (persona básicamente, hablando de manera general, puesto que el término persona e individuo varían si es que profundizamos en los diferentes tipos de derechos penales, tal es el caso del Derecho Penal del enemigo) en sociedad. El control social va a variar de acuerdo a la estructura de poder que tiene una sociedad determinada, puesto que van a existir grupos dominantes y dominados, con sectores más o menos alejados a los centros de decisión. Conforme a esa estructura, se “controlará” socialmente la conducta de los hombres (a todos de una u otra forma se aplica este control, tanto a los que estén lejos o cerca, fuera o al interior de estos grupos de poder). Por ello podemos decir que el control social, debido a ésta “centralización – marginación” de grupos más cercanos o lejanos al poder, se presenta de manera bastante amplia. En conclusión podemos decir que el control social, ese control (o serie de mecanismos) que viene desde el Estado (formalizado, institucionalizado, punitivo o no) hasta el difuso (medios masivos, familiar, rumores, modas) para regular y controlar la vida del hombre en una determinada sociedad, de acuerdo a ciertos tipos de variables, que, básicamente vienen desde el poder y la ideología imperante en éste (poder) hacia el control del Estado. Es por eso que de aquí van a nacer diferentes tipos de concesiones acerca de cómo debería ser o manejar el control social institucionalizado punitivo. Cabe resaltar que, como la “idea de control social” es tan amplia, es iluso reducir éste concepto a un contenido mínimo como la es el sistema penal, sino es necesario analizar también la estructura familiar, la educación, la medicina y muchos otros aspectos que hacen al complicadísimo

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