Suena el despertador, Jorge se levanta y enciende la luz, casi antes de abrir los ojos .afuera hace rato que es de día, pero es igual: es mucho más cómodo darle un manotazo al interruptor que subir la persiana.

ECOLOGIA PARA NO ECOLOGISTAS

El medio ambiente y yo: Una cuestión de hábitos

Suena el despertador, Jorge se levanta y enciende la luz, casi antes de abrir los ojos .afuera hace rato que es de día, pero es igual: es mucho más cómodo darle un manotazo al interruptor que subir la persiana.

Luego se dirige al baño y abre el grifo del agua caliente. Mientras espera que salga caldeada va a la cocina, abre la puerta del frigorífico y… caramba, ¡no recuerda lo que iba a coger! Mientras duda sobre el motivo que le ha llevado a abrir la nevera decide dirigirse a otro rincón de la cocina para encender la vitroceramica (La nevera sigue abierta, la ducha también).

Gira el mando de la encimera y espera que se ponga rojo el vidrio .mientras tanto abre el armario para coger una taza de desayuno .la llena a medias de leche, la mete en el microondas y gira el reloj sin mirar el tiempo marcado exactamente (Hasta ahora están abiertos la luz de cuarto, la puerta de la nevera, el grifo de la ducha, la vitroceramica y el microondas).

En pleno ejercicio de acciones inconclusas Jorge recibe una llamada y decide ir al salón para atenderla. Cinco minutos de conversación .cuelga. Enciende la tele del salón y lo abandona al recordar todo lo que estaba haciendo sin tan siquiera echar un vistazo a la pantalla, que seguirá trasmitiendo imágenes al vacío.

Para cuando decide volver a la cocina el desastre es evidente, la leche se ha frito dentro del microondas y huela a quemado .pone la cafetera sobre el rojo ardiente de la vitroceramica. Se da cuenta que se ha dejado la nevera abierta ¡Ah sí, ya se acuerda!, coge la mantequilla y la mermelada (el motor se ha vuelto a disparar hace rato) .regresa al baño y entre la espesa niebla creada por el vapor del teléfono de la ducha alcanza a meterse dentro girando de inmediato el grifo hacia el color azul porque ahora lo que pasa es que el agua sale hirviendo.

Al regresar a la cocina, después de la ducha no llega a tiempo de evitar que la cafetera se vuelva a salir .mientras se seca el pelo con secador eléctrico decide que será mejor ir a desayunar a la cafetería.

Se viste y sale de la habitación para no volver hasta la noche (La luz se queda encendida porque ya ha levantado la persiana, el sol inunda el interior y no se percibe la luz de la lámpara).Antes de salir echa la pijama y la ropa interior a la lavadora vacía y tan solo con ese nivel de carga le pone en marcha .apaga desde el mando a distancia la tele que no ha visto, coge la bolsa de basura (Una sola, el no separa) y sale del piso.

La luz de la habitación se ha quedado encendida para el resto del día. También se ha dejado la tele, el video, el equipo de música y la consola de video juegos en posición standby, es decir, apagados, pero no, o sea, desde el mando, con lo que seguirán consumiendo un 10% de energía el resto del día.

Aunque vive en una primera planta y es un hombre joven llama al ascensor .baja directamente al aparcamiento, coge el coche y sale .recorre 50 metros y  se detiene en doble fila para comprar el diario en el quiosco .vuelve a subirse no sin antes discutir con la fila de coches que se han detenido que esperar para poder pasar .Llega al centro .Inicia las vueltas en busca de apartamiento: Una, otra, otra más. Se desespera al volante.

Jaime es vecino de Jorge .se levanta, sube la persiana y entra la luz de afuera .se ducha al instante .piensa lo que quiere y entonces abre la nevera, lo coge y lo cierra (10 segundos: no se ha disparado el motor por que no se ha escapado ni una frigoría). Se exprime una naranja en un exprimidor manual, se prepara un café y se calienta la leche en el fogón de gas.

Desayuna mientras hojea una revista y escucha la radio.

Sale a la terraza y entra la bolsa de envases (Amarilla) y la de vidrio (Verde) para bajarla a los contenedores de la calle. La taza y la cucharilla acaban de llenar el lavavajillas de ayer: Coloca una pequeña pasta de jabón y lo pone en marcha con el programa económico, de ese modo ahorra mucha más agua que si los lavara a mano. Aunque vive en un tercero baja andando a la calle, un poco de ejercicio ayuda a despertar el organismo. Echa las bolsas al contenedor y sube andando tranquilamente tres travesías para llegar a la estación del metro, donde ha quedado con su chica. Aprovecha y de camino compra el diario y charla de futbol con el quiosquero.

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