VINOS COLOMBIANOS
johana2006113 de Julio de 2015
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POR SU UBICACION GEOGRAFICA, COLOMBIA CARECE DE TRADICION VINICOLA. SIN EMBARGO, EN LOS ULTIMOS AÑOS SE HA VENIDO GANANDO UN ESPACIO EN LA DENOMINACION CONOCIDA COMO VINOS DEL TROPICO.
LOS VINOS COLOMBIANOS
Se dice que los primeros viñedos plantados en tierra firme del continente americano se ubicaron en la extinta ciudad de Santa María Antigua del Darién, actual municipio de Unguia en el departamento del Choco. Su fundación se la debemos a Vasco Núñez de Balboa y a su perro Leoncico. Lamentablemente los feroces caribes la asediaron en varias ocasiones hasta que fue abandonada. Algún chistoso me dijo en una cata que la ira caribe contra la ciudad se debía a lo "intomable" de sus vinos. Por eso hablar del vino producido en Colombia para muchos es hablar de una quimera inexistente, para otros, como el chistoso de la cata, es hablar de unos caldos imbebibles y para unos pocos es hablar de una maravillosa realidad que dia a dia viene floreciendo en nuestro país.
Cuando se asiste a una clase de vinos lo primero que se enseña es que los vinos de calidad se obtienen entre los 15 y 30 grados de latitud norte y sur respectivamente y que la zona ecuatorial no es apta para la producción de vinos de calidad. He aquí las razones: días cortos (menos horas al sol); ausencia de estaciones; baja diferencia térmica entre el dia y la noche (pocos grados), y naturaleza hostil, es decir muchas fumigaciones, varias cosechas al año, etc.
Lo cierto es que aunque tengamos condiciones menos favorables para el desarrollo de una óptica viticultura, la tecnología, el estudio y la tozudez de algunos "Quijotes" nos permiten probar vinos de calidad en la denominación conocida como vinos del trópico que poco a poco van ganando medallas y reconocimiento internacional.
Existen dos tipos de viticultura tropical en el planeta. Aquella que se practica por debajo de los 1000 metros sobre el nivel del mar, a una temperatura promedio de 24 grados centígrados, en donde encontramos países como Venezuela, India, Nigeria, Tazmania, Indonesia. Y aquella realizada sobre los 1000 metros sobre el nivel del mar, a una temperatura promedio de 17 grados centígrados, donde se ubican Colombia y Bolivia. En esta última, las condiciones para la viticultura son menos inclementes y más favorables para la correcta maduración de la uva y la ulterior consecución de mejores vinos.
Existen varios emprendimientos enológicos en Colombia, empezando por el Valle del Cauca que en 1994 introduce la uva Isabela a territorio nacional, pasando por los departamentos de Huila y Tolima, en donde se experimenta con variedades como Syrah, Tempranillo, Garnacha o Viogner. Mención aparte merecen los maduros viñedos de Boyacá en los que se destacan las operaciones del profesor Marco Quijano y su viñedo de Punta Larga fundado en el año de 1982 y la quimera del extinto Pablo Toro con su viñedo de Ain Karim entre Sutamarchan y Villa de Leyva, que bajo la supervisión del enólogo Mauricio Camacho, especialista en viticultura y enología de la Universidad de Turín, ha logrado los primeros reconocimientos a nivel internacional.
La tarea es dura y los esfuerzos apenas se están viendo, pero en la medida que avance la búsqueda adecuada de climas y tierras para la viticultura se encontrara la uva adecuada para cada región. Ello va de la mano con el uso adecuado de tecnología y tradición, de modo que el vino Colombiano florezca poco a poco en su nicho tropical.
Por eso cuando usted viaje por el soleado del Valle del Cauca tómese sin reparo un joven vino de uva Isabela o pregunte por los viñedos experimentales que existen en Huila y Tolima, que con paciencia y trabajo pronto nos darán de que hablar. Pero si quiere ir a la fija váyase para la turística Boyacá (nuestra pequeña Burdeos) y pruebe el Riesling de Punta Larga o el Sauvignon Blanc de Sutamarchan, por ahora, las estrellas del vino nacional
LAS PERSPECTIVAS SON HALAGADORAS
Avianca en revista entrevisto a Mauricio Camacho enólogo experto en viticultura acerca de la historia y el momento actual de los vinos Colombianos:
Avianca en revista: ¿Quiénes fueron los pioneros del vino en Colombia?
Mauricio Camacho: Los pioneros de la vitivinicultura moderna en Colombia sin duda han sido Pablo Toro con su Marques de Villa de Leyva y Marco Quijano con su Marques de Punta Larga, los dos en el departamento de Boyacá, quienes han encontrado unos terroirs especiales para la producción de uva para vino en alturas superiores a los 2000 m.s.n.m, dando como resultado unos vinos muy frescos, aromáticos y de alta tipicidad.
AER: ¿Cuales son los retos de la viticultura tropical?
MC: Cuando se habla de viticultura tropical la mayoría hemos sido muy escépticos y hemos creído que por no tener presencia de estaciones durante el ciclo de producción de la Vid es imposible llegar a obtener buenos resultados, sin embargo con el tiempo se ha venido demostrando que la obtención de uva de calidad para la elaboración de vinos en el trópico es posible y puede dar resultados muy satisfactorios debido a los bajos rendimientos por hectárea y a la posibilidad de programación del ciclo vegetativo de la Vid.
AER: ¿Qué podemos esperar del vino Colombiano?
MC: Las perspectivas del cultivo de uva para vino son bastante halagadoras, tanto que ya se ha iniciado la experimentación en otras zonas del país diferentes a Boyacá. En Tolima se realizan estudios de adaptabilidad de un gran número de variedades que posiblemente veremos en un futuro, y en Santander, también hay algunos cultivos que sería interesante evaluar en el tiempo. En Colombia se encuentran variados microclimas que nos podrían servir como base productiva para una gran diversidad de tipologías de vino.
AER: ¿Como han recibido sus vinos en los concursos internacionales?
MC: Mejor imposible, Marques de Villa de Leyva con su Sauvignon Blanc 2008, segunda vendimia, ha obtenido medalla de Plata en el concurso Vinus 2009 en Mendoza, Argentina, y medalla de oro en el concurso Terravino 2009 realizado en Israel. Esto es muestra de que la viticultura tropical realizada sobre bases y un conocimiento amplio del clima y suelo puede dar resultados sorprendentes.
¿VINO DE COLOMBIA?
Durante bastante tiempo fui un profundo crítico de nuestros vinos. Me quejaba con mis amigos, era escéptico y hasta renegué diciendo que lo peor relación de costo-beneficio, la había tenido con un vino de mi patria. Pero luego de que varias personas me dijeran que no me cerrara y me aseguraran que existían unos muy buenos, decidí volver a probarlos. La oportunidad se presentó en la pasada Expo vinos (que tuvo lugar hace un mes), donde se anunció que por primera vez que iba a participar un vino colombiano, exactamente Sauvignon Blanc. Por eso, con mucha expectativa y ganas de confirmar lo que me habían dicho, me acerqué al stand del viñedo Marqués de Villa de Leyva. Probé su vino y mi primer sentimiento fue de asombro, esa copa me transportó a otras latitudes reconocidas por su calidad, sólo que ahora se trataba de un producto hecho en Colombia. A partir de ese momento me convertí en un orgulloso promotor del delicioso vino que se está produciendo en mi país y, por eso, se lo he dado a probar a visitantes españoles, argentinos y chilenos expertos en el mundo del vino quienes han confirmado mis impresiones y admiración por la buena labor realizada en nuestras tierras. Por supuesto con mi curiosidad al máximo también decidí emprender un viaje a Villa de Leyva, para saber que más se estaba produciendo. Y allí me encontré con el autor de este maravilloso vino, Mauricio Camacho, un joven enólogo colombiano formado en la Universidad Nacional como ingeniero agrónomo que culminó su carrera en Italia y se fogueó en el Piamonte (una de las mejores regiones vinícolas de Italia). El decidió volver al país porque no soportaba las inclemencias del clima y desde su regreso se ha dedicado a sacar lo mejor a esta tierra y, seguramente pronto nos sorprenderá con nuevas cosechas. Mauricio, con su trabajo se ganó mi admiración pero también me asombro cuando me mostró sus “bebés”, que están en el vientre de la madera o de la cuba de acero inoxidable perfeccionándose. A ellos les hicimos una “ecografía” (es decir, una deliciosa cata) y sólo puedo decir que lo que viene es extraordinario. Sí, me emocioné casi hasta las lágrimas y no pude hacer nada distinto a darle un gran abrazo y aguardar que llegue muy pronto diciembre, para probar el producto final. Les aseguro que no los defraudará. ¡Que viva Colombia, Mauricio Camacho y su Marqués de Villa de Leyva! hay que probarlos todos, tanto los tintos como los blancos.
MARQUES DE VILLA DE LEYVA
Pasar por Boyacá y no visitar el Marques de Villa de Leyva, es imperdonable. Contar con un viñedo en esta zona es un privilegio y este, enclavado en la cordillera de los Andes, goza de un microclima ideal. En sus 10 hectáreas se cultivan en las famosas cepas francesas Cabernet Sauvignon, Sauvignon Blanc, Merlot, Viognier y la californiana Chardonnay, traída de Napa Valley. En su bodega dotada con maquinaria enológica europea y barriles de roble americano y francés, se elaboran vinos de aromas y colores intensos. Aliste el sombrero y la cesta, si quiere, puede ver de cerca el proceso de la vendimia.
TRIBUTO A UN SOÑADOR
En columnas pasadas hable del enólogo Colombiano Mauricio Camacho en Villa de Leyva, y me pase de injusto con la labor de otro pionero en el mundo del vino, Pablo Toro. El fue un ser humano
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