Análisis de la película "Еl Último regalo"

EL ÚLTIMO REGALO

La película nos deja una enseñanza enmarcada en la realidad. El dinero no lo es todo en la vida, existen otros aspectos importantes para alcanzar la felicidad. Una de las características del principal personaje Jasón Steven, es la vanidad la cual es todo aquello que se tiene por valioso pero que en realidad no lo es. Lo vano nos apega a una falsa imagen del hombre, medido por sus riquezas, fama y poder.

Todo lo vano carece de solidez y es superficial, pero lamentablemente asi esta el mundo actualmente lleno de personas superficiales. Hoy en día las personas tienen que adaptarse de acuerdo a sus ingresos económicos. Si bien es cierto las personas más pudientes gozan de mayores privilegios que aquellas que viven en condiciones de pobreza, pero es evidente que la riqueza material no lo es todo, lo que verdaderamente importa es la riqueza espiritual la cual proviene del alma, de los dones del hombre, como su capacidad de soñar, de imaginar, de amar, de dar, de ser.

El ser es una cualidad del alma, y su abundancia de dones es lo que hace a ésta inmensamente rica. La riqueza del alma está relacionada con las cualidades que hombre el hombre posee, como lo son la verdad, la bondad, la belleza, que son tan distintivos del ser humano. A través de estos elementos, el hombre encuentra el significado por la vida. Son estas cualidades y virtudes precisamente lo que le otorga al individuo una institución para apreciar la existencia. Al tener riqueza espiritual, se tiene sentido por la vida, amor por la existencia.

Un ser humano lleno de riqueza espiritual, también gozara de La autonomía moral la cual es uno de los síntomas de madurez del ser humano. Pero esto, no es algo que se logre de la noche a la mañana, sino que, se podría decir que es tarea para toda una vida. Y estas son las etapas por las que pasa todo individuo hasta lograr la autonomía que, por otro lado, no siempre está al alcance de todos.

Además, la vida es un vínculo que nos proporciona posibilidades de compartir experiencias, conocimientos y sabidurías, y para ello debemos aprender a valorarla. No debemos dejar que lo material se apodere de nuestro cuerpo, alma o espíritu; hay que tener en cuenta que todo lo que está a nuestro alrededor son puros bienes materiales y lo que realmente vale son nuestros familiares y amigos. En la vida vale más lo sentimental que lo material ya que a través de ello se aprende a valorar lo que tenemos y no lo que anhelamos. Siempre se aprende de las personas no importa su edad, su raza social, ni su clase social.

La vida es una sola y por eso dios nos dio muchos regalos, que para algunos puede ser malo pero para otros puede ser lo mejor de la vida, así que debemos aprender a valorar día a día todo lo que tenemos como lo es la amistad, la familia, el trabajo, entre otras.

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