Código de Integridad HGM

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Código de Integridad HGM[pic 2][pic 3][pic 4][pic 5][pic 6]

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El Código de Integridad es una declaración de la política institucional que enmarca los principios, valores y reglas de conducta. En este punto vale la pena aclarar que no se cambian los valores existentes, sino que estos dan un giro en la evolución cultural de la institución frente a los valores de integridad.

Con ello, el Hospital busca preservar la ética empresarial, garantizar la transparencia de su gestión, administrar sus recursos, y reconocer y respetar los derechos de los usuarios y partes interesadas, teniendo en cuenta que la integridad tiene que ver con el cumplimiento de las promesas que hace el Estado a los ciudadanos frente a la garantía de su seguridad, o lo que es lo mismo hacer lo que se dice. Ahora bien, la integridad es una característica personal, que en el sector público se vive como la coherencia del ejercicio laboral del servidor. Toda vez que con ello se facilita la trasformación cultural, la confianza sobre la gestión y el logro de los objetivos estratégico organizacionales.

Este Código busca establecer los valores institucionales, principios de acción, buenas prácticas y comportamientos íntegros y ejemplares de cómo deben ser y obrar los servidores públicos del Hospital General de Medellín, y así consolidar el núcleo que dinamizará la cultura deseada de la Institución como lo presenta nuestro mapa de la cultura.

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Objetivo General

Establecer el marco de actuación ética desde la perspectiva de la integridad del servidor público basado en la trasformación de los valores del Hospital General de Medellín.

Objetivo Específicos

• Enunciar y armonizar las proporciones del Código de Integridad del Departamento Administrativo de la Función Pública y el Código de Ética y Buen Gobierno del Hospital General de Medellín.

• Establecer la migración de los valores que funda el código de Código de Ética y Buen Gobierno con el actual Código de Integridad del Hospital General de Medellín.

• Fortalecer la cultura organizacional HGM para acortar la brecha entre la cultura actual y la cultura deseada.

• Dinamizar las sub-culturas organizacionales (cultura de la humanización, cultura de la calidad, cultura de la seguridad, cultura de las transparencias, cultura del riesgo) desde la perspectiva de los valores de integridad.

• Implementar estrategias para promoción de comportamientos éticos en el desempeño de las funciones del servidor público del Hospital General de Medellín.

Del Código de Ética y Buen Gobierno al Código de Integridad

“Los valores en la administración pública son indispensables al ser parte de la cultura organizativa, la cual es vital en la conducta del personal, ayudándole a crecer y a desarrollarse en armonía con la institución. Cualquiera que sea la forma de los códigos, en el fondo deben reunir dos requisitos: primero, potenciar o fomentar siempre los valores y actitudes positivas y, segundo, proporcionar un criterio sólido para poder adecuar la conducta de las personas al buen ejercicio de

la función pública. De esta manera quien haya leído y asimilado un código conocerá lo que está bien y lo pondrá en práctica. Un código eficiente además de permitir identificar los vicios o antivalores sienta las bases o establece un procedimiento para evitarlos o erradicarlos” 1

La armonización entre el Código de Ética y Buen Gobierno y el Código de Integridad del Servicio Público, articulado con los lineamientos de MIPG-v2 (Modelo Integrado de Planeación y Gestión), radica en la trasformación de los seis valores del Código de Ética y Buen Gobierno (Responsabilidad, Solidaridad, Respeto, Vocación de Servicio, Honestidad y Seguridad)2.

Es así como en la actualidad nos rigen estos seis valores:

• Honestidad.
• Respeto.
• Compromiso.

• Diligencia.
• Justicia.
• Seguridad.

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1 Oscar bautista. Códigos de ética en la administración pública. 2015.

2 Código ES-PLI-GP 002D08 v2.

Tabla 1: Armonización de Valores

Dicho cambio busca la articulación del Código de Ética y Buen Gobierno de la institución y la política de integridad con los valores propuestos de los servidores públicos desarrollados por el DAFP3. Dicha armonización tiene como fin último, resaltar la necesidad de un comportamiento especial, ejemplar, íntegro y un deber ser particular en concordancia con el sentido de lo público. Así, la[pic 11]

3 DAFP: Departamento Administrativo de la Función Pública.

Institución acoge los valores como pautas inexorables que permeen las prácticas de la Junta Directiva, del gerente, del equipo directivo y de los servidores públicos del Hospital General de Medellín Luz Castro de Gutiérrez.

Valores

Hacen parte de las cualidades o virtudes que promueve una institución para materializar su misión, su visión y su proyección. Se relaciona con el comportamiento y la cultura de la organización. Ponen un sello y una marca que diferencia y da identidad a nuestro Hospital.

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Actúo siempre con fundamento en la verdad, cumpliendo mis deberes con trasparencia y siempre favoreciendo el interés general.

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• Siempre digo la verdad, incluso cuando cometo errores, porque es humano cometerlos, pero no es correcto esconderlo.

• Cuando tengo dudas respecto a la aplicación de mis deberes busco orientación en las instancias pertinentes al interior de mi entidad. Se vale no saberlo todo, y también se vale pedir ayuda.

• Facilito al acceso a la información pública completa, veraz, oportuna y comprensible a través de los medios destinado para ello.

• Denuncio las faltas, delitos violaciones de derechos de los que tengo conocimiento en el ejercicio de mi cargo, siempre.

• Apoyo y promuevo los espacios de participación para que los ciudadanos hagan parte de la toma de decisiones que los afecten relacionados con mi cargo.

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• No le doy trato preferencial a personas cercanas para favorecerlas en un proceso en igualdad de condiciones.

• No acepto incentivos, favores, ni ningún otro beneficio que me ofrezcan personas o grupos que estén interesados en un proceso de toma de decisiones.

• No uso recursos públicos para fines personales relacionados con mi familia, mis estudios y mis pasatiempos (esto incluye tiempo de mi jornada laboral, los elementos y bienes asignados para cumplir con mi labor, entre otros).

• No soy descuidado con la información a mi cargo, ni con su gestión.

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Reconozco, valoro y trato de manera digna a todas las personas, con sus virtudes y defectos, sin importar su labor, su procedencia, títulos o cualquier otra condición.

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• Atiendo con amabilidad, igualdad y equidad a todas las personas en cualquier situación a través de mis palabras, gestos y actitudes, sin importar su condición social, económica, religiosa, étnica o de cualquier otro orden. Soy amable todos los días, esa es la clave, siempre.

• Estoy abierto al diálogo y a la comprensión a pesar de perspectivas y opiniones distintas a las mías. No hay nada que no se pueda solucionar hablando y escuchando al otro.

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• Nunca actúo de manera discriminatoria, grosera o hiriente, bajo ninguna circunstancia.

• Jamás baso mis decisiones en presunciones, estereotipos o prejuicios.

• No agredo, ignoro o maltrato de ninguna manera a los ciudadanos ni a otros servidores públicos.

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Soy consciente de la importancia de mi rol como servidor público y estoy en disposición permanente para comprender y resolver las necesidades de las personas con las que me relaciono en mis labores cotidianas, buscando siempre mejorar su bienestar.

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