Cómo afectan las redes sociales en nuestro desarrollo emocional y en la toma de decisiones?

¿Cómo afectan las redes sociales en nuestro desarrollo emocional y en la toma de decisiones?

Un hombre será mejor solamente cuando le hagas ver cómo es en realidad.

Antón Chéjov

Pocas veces los humanos nos preocupamos por alguien diferente a nosotros.

En el año 463 a.C. Pericles quien era un viejo sabio, político bastante querido y muy influyente ateniense fue el responsable de la creación de la edad de oro en Atenas. El era diferente a los demás, vio por otras personas antes que por su beneficio político, y así comenzó su proyecto de obras públicas. Los atenienses estaban acostumbrados a líderes que les hablaran con mucha valentía y que fueran bastante persuasivos, es por eso que pensaban que Pericles como político era raro, el no quería estar siempre en guerra, ni tenía arranques de grandeza. El pensaba más las cosas que decía, utilizaba palabras más razonables que hacia que la gente lo escuchara, lo siguiera y se tranquilizaran al mismo tiempo.

En la actualidad teniendo las redes sociales tan de la mano nos pasa algo similar que a los atenienses, que en este caso, los “influencers” son un nuevo tipo de líderes.

La mente humana debe de adorar algo, es su naturaleza, tiene que dirigir su atención, para la mayoría tal cosa es su ego.

En el libro “Las leyes de la naturaleza humana” su escritor Robert Greene nos explica paso a paso sobre como nos creemos personas racionales, que en realidad no somos conscientes de cuanto nos rigen las emociones. Pero nos ayuda a comprender el camino hacia la racionalidad.

Personalmente llamaron mi atención tres puntos que podemos comparar en la actualidad, como actúan, como somos persuadidos por las redes sociales y que influencia tienen en nosotros los llamados “influencers”.

El sesgo que es el rumbo que lleva un tema, en este caso, el sesgo de apariencia, nos revela como una persona con acciones, casi siempre ficticias de seguridad o éxito de cualquier indole nos hacen creer en ellos y justo en ese momento es cuando pueden crear una influencia en nosotros, el sesgo grupal nos explica que somos animales sociales por naturaleza por lo cual nos sentimos motivados a adoptar ideas y opiniones ajenas por que nos hacen sentir alivio, lo que no sabemos es que no siempre estamos al tanto de esta influencia y creemos que esas decisiones las tomamos solos, y el sesgo de convicción nos habla de como nos volvemos susceptibles ante los vendedores y marcas que demuestran seguridad a la hora de hablarnos como un medio para persuadir y engañar, saben como llegar a nosotros, que decirnos y como hablarnos.

Introduciendonos en este último punto Elizabeth Paquette, académica de la Assumption College explica como una marca (influencer) se vuelve un fenómeno cultural, dice que cuando se trata de éxito lo importante es tener buena narrativa, que incluso sin tener algún talento, una persona puede llegar a ser un líder de opinión solo con saber como hablarle a su público.

Ahora bien ya hablamos sobre como somos influenciados, pero esos “influencers”, llegan a tener demasiada seguridad lo que causa que la mayoría sufra de algo llamado narcisismo que explicado por google es: “admiración excesiva y exagerada que siente una persona por si misma, por su aspecto físico o por sus dotes o cualidades”. A veces las personas narcisistas se enfocan tanto en ellos que dejan a un lado lo que puedan llegar a pensar o sentir las personas que los rodean o sus seguidores; llegan a ser tan egoístas que se les dificulta la interacción con los demás y pierden el sentido de la empatía, el cual creo yo a lo largo de estos años todos lo hemos perdido, perdimos ese sentimiento de preguntarnos si la otra persona está bien. El problema es que uno puede llegar a pensar que es empático y creer que entendemos a la gente, y solo se termina juzgando y haciendo un juicio

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