CALIDAD EN EL SERVICIO

La calidad en el servicio también vendrá por parte de los auxiliares, que deben procurar a los invitados en todo momento. Al mesero que atiende la barra de servicio, al supervisor y a la niñera se les paga alrededor de $300 por las cuatro o cinco horas que dura la fiesta. Aunque sea personal eventual, es recomendable que los capacites en primeros auxilios y sepan usar el botiquín en caso de accidentes. De planta se necesita sólo un empleado de limpieza para que las instalaciones siempre estén impecables.

Adicionalmente, la ubicación del salón debe ser de fácil acceso, sobre avenida principal en fraccionamientos residenciales, o cercano a zonas comerciales. Recuerda que debe disponer de estacionamiento y que puedes ofrecer servicio de valet parking –un plus que valoran los clientes–, sobre todo si te ves obligado a celebrar un convenio con algún estacionamiento aledaño.

Utiliza tu creatividad para poner el toque que haga la diferencia. Muchas veces pueden ser detalles que requieren de poca inversión, pero que realzan la fiesta con el factor sorpresa que las caracteriza –como un rayo láser o una descarga de confeti a la hora de partir el pastel. La suma de todo esto tiene un efecto multiplicador en la recomendación de boca en boca, la que hace que la cartera de clientes prácticamente crezca sola, como menciona Héctor Olguín, de Chiqui Boom! Si refuerzas la publicidad con una página de internet atractiva, presencia en las redes sociales y en una revista local de tu zona, lograrás posicionar tu salón en muy poco tiempo.

Aprovecha estos recursos para ofrecer información de los proveedores de entretenimiento u otros animadores con los que tengas alianzas. Esto también te servirá para captar a grupos escolares y mandarles promociones a los kínders y primarias.

Otra recomendación es que contactes a la banca comercial para aceptar pagos con tarjeta de crédito, con opción a meses sin intereses. Toma en cuenta que, por tratarse de un giro muy sensible al precio, lo mejor es que lo fijes con base al mercado y lo eleves sólo cuando ofrezcas algo muy exclusivo o poco imitable.

Por ejemplo, sácale el mayor jugo a la reglamentación para que compitas con estrategias diferenciadoras ya que, en lugares como el Distrito Federal, la Ley para el Funcionamiento de Establecimientos Mercantiles permite a los salones de fiestas realizar eventos o actividades culturales e, incluso, las llega a incentivar.

Por último, aunque los salones de fiestas en general son considerados de impacto vecinal, en el caso del Distrito Federal, a los infantiles se les exime de la Licencia de Funcionamiento.

Por esa razón, sólo se requiere de Declaración de Apertura, Uso de Suelo Autorizado, Visto Bueno de Seguridad y Operación, la Licencia de Anuncio, Contrato de Adhesión con la Profeco y, por supuesto, del Programa Interno de Protección Civil. Y

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