CARTA DESDE EL DESIERTO

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CARTA DESDE EL DESIERTO

Reflexión a la luz de la fe

Hace un año y medio que no llueve en Gode y en la región de Somalí de Etiopía, pero la situación se ha agravado dramáticamente a causa de una epidemia de cólera. La causa de la epidemia ha sido que, en su desesperación, esta pobre gente ha bebido agua de pozos contaminados. Los muertos se cuentan por centenares y los enfermos son incontables. En Gode hacen falta medicinas, agua, comida… Que las ayudas lleguen lo antes posible es una cuestión de vida o muerte.

Esta carta nos muestra la cruda realidad que están viviendo estas personas, personas que no merecen vivir así y que hacemos todos frente a estos casos simplemente actuamos a nuestra conveniencia y casi siempre no cuidamos lo que tenemos como es el AGUA que es vital para nuestra vida muchas veces la desperdiciamos sin saber que hay otras personas que las necesitan con urgencia que para ellos un vaso de agua es lo mejor que les podría pasar por eso pensemos en cuidar cada bien que la naturaleza nos ofrece valoremos lo que hoy tenemos mañana por nuestra ignorancia podríamos pasar la misma situación.

Bien dicen los principios de la sociedad de la iglesia primero el principio de dignidad de la persona este principio nos da a conocer que no somos algo sino alguien por lo tanto estas personas merecen una vida digna, sana con oportunidades, segundo el bien común al que debe referirse todo aspecto de la vida social para encontrar plenitud de sentido por eso, la tarea por el bien común es responsabilidad de todos y cada uno, nadie puede sentirse eximido de ella , tercero el principio de destino universal de los bienes creados deben llegar a todos en forma equitativa bajo la egida de la justicia y con la compañía de la caridad pero lamentablemente estas personas no reciben estos bienes sobre todo el agua que es vital para nuestras vidas, cuarto el principio de subsidiaridad expresa  y defiende los derechos y autonomía de cada uno en el ámbito de la sociedad y respecto a este principio todas las personas u organizaciones de orden superior deberían brindar su ayuda a esta población que la necesita urgente, quinto el principio de participación es un deber que todos han de cumplir, en modo responsable y con vistas al bien común; como es este caso del médico, voluntarios y el Padre Christopher quienes participan brindando apoyo a esta comunidad y por último  el principio de solidaridad es uno de los principios básicos de la concepción cristiana y vemos que los voluntarios participan en este principio y no estaría de más que algunas organizaciones de orden superior lleven pronta ayuda a estos lugares que lo necesitan, son seres humanos que merecen una mejor vida y con un futuro que les garanticé estabilidad y facilidades para integrase a la sociedad con igualdad de oportunidades.

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