Discurso

Quiero agradecer la oportunidad que me es otorgada para hacerles llegar este mensaje que para mi persona y mis compañeros es de suma importancia y apreciaremos mucho su acato, o al menos su atención en el tema:

Si bien es preciso que no somos una institución de gran número, tenemos necesidades. Nuestras vidas se esfuman como el polvo en el viento y el tiempo de tratar los problemas es ahora. Mis compañeros de salón y de la unidad nos hemos visto un poco incomodos debido a la falta de algún comedor o de cafetería dentro del área de humanidades, ya que no contamos con el tiempo ni dinero suficiente para acudir a las loncherías de la periferia del campus, y la falta de bocado perturba nuestra atención repercutiendo directamente en nuestro desempeño y repercute en nuestras calificaciones. Anteriormente se habló del tema de manera fugaz en alguna pasada conferencia, pero en vista del éxito no obtenido en este lapso de tiempo nos hemos visto en la necesidad de recordar el tema en espera de que esta vez no se pase de largo y se pongan las cartas sobre la mesa.

Cabe decir que somos conscientes de que la universidad no pasa por un buen momento pero ¿acaso ese mal momento no comenzó siendo de meses, pasando por años y va por el cuarto de siglo? Las deudas y problemas con externos e internos a la universidad se toman de cajón, todos los proyectos y futuros planes simples o complicados tienen siempre estos problemas detrás y aun así se continúa ciclo tras ciclo regresando, egresando e ingresando afables creadores. Creo que de alguna manera no pedimos perlas y, si se atiende este problema de inmediato tardará menos tiempo en quedar absuelto esta pared que por absurda e increíble que parezca, no permite que mentes entren en una completa plenitud.

Tal vez existan problemas a tratar con mayor importancia, pero esta necesidad es en nivel general, no son caprichos de pocos, y bien si alguna de las personas decisivas se encuentran satisfechas ahora, es cuestión de que lean un par de horas continuas para que sientan el uróboro en el estómago, nosotros solo tratamos de engañarlo, para para volver a sumergirnos en las letras.

Sin mis compañeros no desean añadir alguna otra información sería todo, agradeciendo nuevamente el espacio que me fue concedido para ser el portavoz de mis compañeros. Gracias.

Exordio: Comienza con un agradecimiento por el espacio otorgado dentro de la ceremonia, se hace el llamado a poner atención en el tema venidero:

“Quiero agradecer la oportunidad que me es otorgada para hacerles llegar este mensaje que para mi persona y mis compañeros es de suma importancia y apreciaremos mucho su acato, o al menos su atención en el tema”

Narratio: Se plantea el problema o el tema del discurso, se actualiza la visión y estado del afectado:

“Mis

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