El Coyote (cuento)

Mariana Vazquez Angulo

El coyote.

En un lugar muy lejano caminaba un coyote, avanzaba muy despacio por un sendero del campo. Mirando las estrellas y las extrañas figuras que se formaban con ellas. El coyote estaba malhumorado porque no había comido desde hace varios días y entonces decidió salir a buscar comida.

Empezó a caminar hasta llegar al pueblo que estaba cerca; llamado Miravalles.

Pero no podía entrar a ningún lugar porque los coyotes provocan miedo y escalofríos a las personas y los perros que cuidan de las casas no lo dejarían pasar.

El coyote decidió esperar a que diera la media noche para poder entrar al pueblo. Se fue acercando poco a poco a una casa grande de color blanca, entro al patio hasta que llego al gallinero y las gallinas que estaban despiertas; asustadas dijeron

- ¿Qué haces en nuestra casa?

- El respondió que tengo hambre y estoy buscando comida

- ¿ se asustaron? les pregunto el coyote

Todas las gallinas empezaron a cacaraquear y despertaron al guajolote, a los pollitos, al cerdo, al caballo y a las cabras.

Todos los animales se reunieron para hablar con el coyote:

- El guajolote le dijo ¡si tienes hambre puedes comerme a mí! Además soy el más viejo

- Los pollitos se asustaron y empezaron a piar

- La mamá gallina se fue a esconder con sus pollitos porque estaban en peligro

- Después el caballo le dijo que no podía llevarse a ningún animal para cenárselo porque tendría problemas con el ya que los defendería y sería mejor que regresara al cerro a comer bellotas de arboles o ratones.

El coyote les dijo

- Yo no quiero comerme a ninguno de ustedes, o que deseo comer es otra cosa como tortillas.

- Los animalitos se dieron cuenta de que el coyote era bueno y buscaba comida pero nunca había pensado en comérselos a ellos.

- Todos estaban felices porque no se los comería

- Y para suerte del coyote esa noche le habían dado al puerco un poco de desperdicio con tortillas y le ofreció su cena al coyote.

- Las gallinas curiosas empezaron a preguntarle cómo era el lugar de donde venia y les dijo que muy bonito

- Tenía libertad de salir a caminar y vivía en una cueva rodeada de arboles, magueyes, nopales, flores y piedras bonitas.

- Al guajolote se le ocurrió la idea que el coyote los invitara a ir al cerro. Dijo que sería una aventura muy divertida

- El coyote acepto llevarlos a su casa solo que en una noche irían unos y en otra noche los demás.

No tardaron en decidir quiénes iban a ir esa noche a casa del coyote.

El guajolote y algunas gallinas fueron los primeros en ir

A la mañana siguiente los dueños de los animales se dieron cuenta de que faltaban y pensaron que algún coyote se los había comido.

Entonces pensaron que regresaría el coyote a comerse a los demás animales y esperaron a que llegara la noche y ya lo estaban espiando para cuando llegara

- El coyote entusiasmado regreso a la noche siguiente para llevar a los demás animales a la cueva donde vivía. Pero los hombres del pueblo ya lo estaban esperando y le tendieron una trampa.

- Entonces, llego y lo atraparon

Querían matarlo pero como en ese pueblo se tenía la costumbre de que si atrapaban un coyote lo deberían presentar a las personas del pueblo para que pagaran el perjuicio, y así lo hicieron.

Lo ataron a un palo y colgado lo llevaron casa por casa para pedir limosna o el pago por haberlo atrapado y así ya no se seguiría comiendo a los animales de pluma.

Los animales que estaban en el cerro estaban muy contentos y los que estaban en a casa se encontraban preocupados por lo que estaba pasando.

Pasaron dos días y tenían atado al mismo palo al pobre coyotito. Las gallinas y el

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