Estado de Bienestar (Offe)

Estado de Bienestar (Offe): formula pacificadora de las democracias capitales en el período de la post 2da guerra mundial. Consiste en suministrar asistencia y apoyo, y además en reconocer el papel de los sindicatos para equilibrar la asimétrica relación de poder entre trabajo y capital.

Es el resultado combinado de distintas fuerzas: reformismo socialdemócrata, socialismo, elites políticas y económicas conservadoras, y grandes sindicatos.

Posee un carácter multifuncional, es decir, capacidad para servir simultáneamente muchos fines y estrategias conflictivas: leyes sobre protección del trabajo, salario mínimo, expansión de servicios sanitarios y educativos, reconocimiento de sindicatos, etc.

Su carácter multifuncional hizo que la diversidad de fuerzas que lo inauguraron, lo conviertan en objeto de conflicto, convirtiéndolo, a mediados de los 70, en fuente de contradicciones y divisiones políticas:

• Ataque de la derecha o liberal conservador.

Los seguidores de la neo-laissez faire critican al Estado de Bienestar, considerándolo como la enfermedad de aquello que pretende curar, ya que impide el funcionamiento apropiado y benéfico del mercado por dos motivos:

-Por un lado, al ser interventor, impone una carga fiscal y normativa al capital. Esto equivale a un desincentivo para la inversión.

-Por otro, garantiza pretensiones, títulos y posiciones de poder a trabajadores y sindicatos. Esto equivale a un desincentivo para el trabajo.

Offe, sostiene que esta crítica carece de un modelo o meta coherente de transformación, ni tampoco identifica las fuerzas y las estrategias posibles que luego llevarían a dicha transformación. Sólo se busca la desaparición del Estado de Bienestar para cederle lugar a la neo-laissez faire.

La contradicción es que el capitalismo, no puede existir ni con, ni sin el Estado de Bienestar.

• La crítica de la izquierda socialista.

Esta crítica remite a los fundamentos del Estado de Bienestar:

-Es ineficaz, e ineficiente: sucede así, ya que no elimina las causas de contingencias y necesidades individuales, sino que más bien compensa las consecuencias de tales eventos suministrando servicios, seguros, subsidios, etc.

-Es represivo: en el sentido de que para acceder a los beneficios y servicios, el cliente no solo debe probar su necesidad, sino ser un cliente merecedor (plegándose a las pautas y normas económicas, políticas y culturales dominantes).

-Es condicionador de un entendimiento falso (ideológico) de la realidad: cumple una función de control político-ideológico. Este modelo de estado crea la falsa imagen de dos esferas: por un lado, la esfera del trabajo, la economía, la producción y la distribución

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