Familia Y Sociedad

FAMILIA Y SOCIEDAD.

Este articulo hace referencia a la familia como columna vertebral de la sociedad, explica que si no se tienen familias fuertes y funcionales para tener una buena sociedad. Ya que es un hecho social fácilmente verificable que no todas las familias son funcionales y algunas generan personas con mayor numero de conflictos hacia la sociedad, desatando conflictos con la autoridad, adicciones, conductas delictivas o falta de asociación y asimilación lo cual a la larga representa una carga muy pesada para el Estado; sobre todo para mis países en proceso de desarrollo.

Se hace énfasis en el hecho de que los gobiernos o el Estado se ha preocupado más por saber ¿quien depende de quién?, dejando de lado los valores de las familias sin darse cuenta de que no se trata de otra cosa más que de una simple codependencia entre ambas instituciones, la familia nos brinda las bases de la vida en sociedad desde el instante en que nacemos, es una escuela de fe, de valores tanto humanos como cívicos, al acoger en su ceno una nueva vida se ejerce el sentido de responsabilidad ya que estas aceptando el compromiso de educar a un nuevo individuo y de formarlo social, emocional y físicamente.

Si bien se dice que “el país no hace a la gente, si no que la gente hace al país” y lo que el estado quiere es generar o contar con ciudadanos de excelencia fieles a su nación, pues bien deberían preocuparse más por la importancia que tiene la primer formación de una persona (la familia) pues es en ella donde incluso se marcan las primeras restricciones y normas. Esto no quiere decir que la familia sea más importante que el Estado sino que simplemente sin familia no existiría el Estado; un ejemplo de esto es que en la familia se nace con mamá, papá y en su caso hermanos, al ir creciendo adquieres amigos, vecinos, que a la larga forman una colonia, esa colonia forma un municipio y el conjunto de municipios forman el Estado; si se le diera la importancia y se reconocieran los derechos de cada individuo notaríamos que incluso en nuestras leyes y documentos que las rigen está establecida la familia como un derecho, debemos hacer conciencia sobre todo aquello que se está perdiendo en cuanto a valores e inclusive tradiciones ya que hemos caído en un aspecto permisivo totalmente creyendo que así se respeta la libertad e identidad de cada persona sin darnos cuenta de que incluso hemos ido borrando poco a poco la diferencia entre lo bueno y lo malo, los valores, los derechos y las obligaciones que corresponden a cada uno de nosotros.

Hoy en día el enfoque que se les da a las sociedades países y naciones es meramente material, enfocado al desarrollo tecnológico e infraestructuras del más alto nivel, pero en verdad ¿será esto lo que un país necesita para sobresalir? ¿Para crecer y tener un desarrollo y crecimiento a nivel mundial? ¿Para ser un país tercermundista? A primera instancia podríamos responder que si y sin temor a equivocarnos pero pensemos, en países de Europa (tercermundistas) últimamente se han escuchado noticias sobre manifestaciones revueltas e inconformidades del pueblo hacia sus gobernantes, entonces ¿será esto realmente lo que se necesita para tener una nación fuerte y una sociedad de bien? Si bien no ser lo único e indispensable es un factor para conseguirla aquí lo verdaderamente importante es el hecho de reconocer el derecho de cada persona a pertenecer a una familia y regir a la familia con sus valores originales, fortaleciendo así a esta primera institución y garantizando la integración de individuos capaces, autosuficientes y aptos para la vida en sociedad sin tener la preocupación de que tipo de conflictos generara dentro de la misma cada uno de ellos ya que se está poniendo el debido cuidado e importancia a su origen y bases ; lo cual deslindaría una carga al Estado ya que estaría consientes y seguro de la clase de sociedad que se tiene, dejando

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