HEMANEUTICA, VERDAD Y PRAXIS

CAPITULO #5

HEMANEUTICA, VERDAD Y PRAXIS

La nueva conciencia teológica no carece de oposición en América Latina. En la teología latinoamericana en profundamente polémica, pero no aislacionista. Trataremos de ubicar los problemas y sugerir algunas líneas de abordaje, correspondiente a nuestra ubicación y perspectiva latinoamericana.

La ideologización del evangelio es la acusación más frecuente lanzada contra la teología de la liberación, en una observación crítica Pedro Arana concluye en la ideología de Izal. Dios se traduce como revolución, el pueblo de Dios como huestes revolucionarias y la palabra como escritos revolucionarios, todo esto es humanismo marxista, aquí no hay redención para esta teología por que ha amordazado la palabra de Dios en su transcendencia y libertad.

Nuestra teología latinoamericana de la liberación no ha tomado aún en cuenta suficiente de este peligro y no ha desarrollado aun las necesarias defensas frente a él.

Las diferentes formas de ver las cosas nos lazan a las arenas movedizas del subjetivismo, por esta razón muchos de inclinarías por una segunda respuesta. Hay una verdad cristiana absoluta o principios cristianos eternamente validos resguardados en en la escritura o en los pronunciamientos de la iglesia.

Se habla de una teoría y en un segundo momento aparece la aplicación de esta teoría a una situación histórica particular. En esta concesión de la verdad la que ha hecho crisis en la teología latinoamericana, cuando Assman habla del rechazo de toda la logia que no sea de la praxis, o Gutiérrez que escribe sobre la rotura epistemológica. No toda verdad debe ser aplicada, no se limiten a eso que ni siquiera hay una relación entre la verdad y su aplicación; existen diferentes aplicaciones con respecto al tema, pero también varias objeciones.

#1. Que la verdad bíblica es reducida a acción ética

#2. Que la dimensión vertical de la fe es reabsorbida en horizontal  

#3. Que esta realidad solo la teoría marxista de la verdad y del conocimiento

Hay que plantear al menos dos preguntas respecto del “punto de vista clásico” y “el concepto bíblico de verdad”. Su verdad no no reside en su correspondencia con una idea si no en su eficacia para llevar a cabo la promesa de Dios o para cumplir su juicio, por eso la fe de Israel no se presenta como una gnosis si no como un un camino (la forma de actuar) la de Dios con Israel. La fe es un caminar y se conduce por estos dos conceptos, tiene en la biblia este contenido activo y participatorio, solo la palabra hace conocer la doctrina. Las epístolas juaneas elaboran el mismo tema vinculado al conocimiento de Dios con el amor a los hermano, Dios es desconocido a menos que el hombre participe en su vida concreta mediante el ejercicio activo del amor.

La concesión práctica no puede reclamar una base bíblica para su concepto de verdad o para la distinción entre un conocimiento teórico de la verdad y la aplicación práctica de la misma. Un conocimiento correcto depende de una acción correcta. La sociología del conocimiento documenta el hecho de que siempre pensamos y teorizamos a partir de un contexto específico de acción y reacciones a saber

Indicamos a continuación algunos puntos que merecen más amplia consideración. Toda interpretación ética o sistemática debe ser examinada respecto a la praxis de la cual se origina. Ejemplo: ¿por qué han permanecido tan ocultos para los interpretes liberales, hasta muy recientemente los motivos y resonación políticos de la vida de Jesús?

No entonces perfectamente comprensible fue         Dios, sea asimilado a este ámbito como su esfera de acción. Cuando Freud y Marx denuncian tal Dios como una proyección ideológica mediante la cual disfrazamos nuestra incapacidad para resolver nuestra realidad humana, no hacen más que ofrecernos las herramientas para una purificación de nuestra hermenéutica teológica.

Poseemos ahora los instrumentos que nos permiten analizar el impacto histórico de la fe cristiana, es decir la relación entre protestantismo y capitalismo, la relación entre armonía social y el crecimiento de las sectas. El significado del cristianismo no puede abstraerse de su impacto histórico, el mismo testimonio bíblico no nos permite refugiarnos en un firmamento conceptual, el criterio de veracidad histórica y  la crítica del concepto de verdad, demandan a su vez nuevas formas e instrumentos hermenéuticos, ya no bastan las consecuencias de unas verdades conceptuales, si se trata de actos y no solamente de ideas, sentimientos o intensiones. Nos sumergimos en el ámbito de la política. Los hechos económicos, culturales y políticos son tan significativos para el conocimiento de esta praxis como la exegesis de sus pronunciamientos y publicaciones.

El modelo democrático compara la conducta del grupo pentecostal con los comportamientos medios de la clase, correspondiente en la sociedad chilena investigan las actitudes hacia el dinero, el trabajo, y la política en relación con los modelos des protestantismo clásico. En este nuevo contesto la hermenéutica incluye también la identificación de los marcos ideológicos de referencia de la interpretación implícita en una determinada praxis religiosa. Podía incluso decirse que en la mayoría de los casos son totalmente ajenos a tal propósito, sus palabras o acciones pueden proponerse fines muy distintos. Esta distinción es importante porque permite comprender el carácter histórico de actos y pronunciamientos cristianos. Una posición tomada en cualquier tiempo puede tener una idea distinta u opuesta en otro propósito opuesto ideológico.

La ideología tiene un significado muy positivo el cual da a entender que mediante nuestra obediencia cristiana gana coherencia y unidad, pero el carácter de la ideología solo puede ser conjurado después de que se le haga una constante revisión crítica, tanto del mismo evangelio como el análisis de la realidad. No toda praxis muestra una proyección de la realidad. El trabajo real de la praxis es corregir el análisis ideológico.

Existen revoluciones cristianas y una gran confusión por la ambivalencia y oscilación de la nace instrumental analítico e ideológico que han asumido. En algunos casos el materialismo dialectico e histórico lo toman como una suerte meta física, y por eso siempre va a ser imposible no tener un conflicto con la fe cristiana, y por eso varios cristianos asumen la causa de los oprimidos y rechazan ciertos elementos analíticos como la lucha de clases o el papel del proletariado. En cambio colocan mejores principios éticos ya que no requieren una mediación histórica que lleva a la frustración, limitado para actuar y sigue siendo presa del mismo error, pero muchos cristianos abrazan la ideología marxista, contemplan la suerte del fervor religioso pero hacen que se pierda la fe.

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