Hijas De Lilith

Lilith es una diablesa posiblemente de origen asirio babilónico que tuvo relevancia en la demonología hebraica.

En la tradición oriental es princesa de los súcubos, que son diablas seductoras y devoradoras de hombres. Es considerada también una atacante de las parturientas y de los recién nacidos.

El Talmud, hace referencia a Lilith y en un Midras que es una interpretación del siglo XII aparece como la primera compañera de Adán, creada de inmundicia y sedimentos.

Lilith quería que Adán la tratara con igualdad y reñía con el en cuanto a lo posición para realizar el acto sexual que le exigía que era la del misionero, que equivalía a sometimiento, por lo que al rebelarse y Adán querer obligarla a la fuerza, ella airada pronuncio el nombre mágico de Dios, se elevó y lo abandono. Se fue del edén y vivió en la región de aire y se unió el mayor de los demonios, engendrando una estirpe de diablos.Se le representa como mujer alada con larga cabellera; con su cuerpo desnudo terminando en cola de serpiente. En el Zohar es la ramera, la perversa, la falsa, la negra.

Los rabinos necesitaron y encontraron a una figura femenina a quien culpar de los males que aquejaban al mundo, hicieron a Eva como la “madre de todos los vivientes”, personaje a respetar pues servía de ejemplo de las judías casaderas,minimizando su culpa. Lilith fue la primera mujer que se rebeló al hombre y a Dios mismo.

A Lilith se le representa como una mujer hostil a los niños y a la maternidad, es la mujer mala, en contra oposición a la virgen a la que se le asocia a la maternidad y a la pureza, es la mujer buena.

Además Lilith es la mujer mala devoradora de hombres a quienes ataca y seduce. Lilith aparece con cola se serpiente, que se interpreta como un paralelismo entre la culpa de ésta y la de Eva en el pecado original: además de ser una de las representaciones del diablo.

Capítulo II

Aproximación de la génesis de la ética sexofóbica y la misoginia.

En el siglo XIX el protestantismo y al revitalización del cristianismo, imprimió una característica de severidad a los códigos sexuales, señalando la figura de la mujer como elemento indiscutible del pecado, y además como elemento de la represión sexual. Respecto a esto, Crawley dice que el hombre y la mujer en el momento del galanteo y de la relación sexual, ponen toda su atención y descuidan toda su demás circunstancia, lo que es mayormente perjudicial para el hombre que es el que realiza las tareas de trabajo y de gobierno. El autor Levy Strauss, vio al incesto, institución universal, como origen de la represión sexual. Sin embargo, estas teorías no explican suficientemente el fenómeno sexofóbico. Las ideas del filósofo Platón en elentido de que

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